Capítulo 141: Pesadilla

El agotado Klein disipó el muro sellado de espiritualidad, permitiendo que el viento fresco le soplara en la cara. El aroma a hierba y árboles que transportaba el viento lo revitalizó.

Frotó el cálido y clásico Artefacto Sellado 3-0782 con las manos y suspiró para sí mismo.

"Quién hubiera pensado que habría una gota de sangre de dios en este emblema. Tengo que suponer que los expertos de la Iglesia del Eterno Sol Ardiente deben haber tratado de buscar este artículo en el pasado, pero no pudieron encontrarlo..."

Klein se estiró el cuello. No se atrevió a probar nada más, manteniendo el Emblema Sagrado del Sol Mutado en el bolsillo interior de su chamarra.

Su mano siguió una cadena y sacó un reloj de bolsillo de hojas de parra de plata. Lo abrió para ver que todavía faltaba aproximadamente una hora para el turno del Coleccionista de Cadáveres Frye.

Necesito dos fósforos para sujetar mis párpados... ¡Este es un efecto secundario de esa experiencia cercana a la muerte! Klein no tuvo otras ideas. Todo lo que pudo hacer fue sacar una pequeña botella de metal de un pequeño bolsillo oculto. Destapó la botella y la acercó a su nariz.

Un olor penetrante, una mezcla de menta y desinfectante, rápidamente entró en su nariz, dándole a Klein escalofríos. Sus sentidos se estremecieron, haciéndole olvidar temporalmente su fatiga.

Había aprendido la fórmula del Coleccionista de Cadáveres Frye. Se llamaba Aceite de Quelaag, y podía ayudar a una persona a ignorar el hedor de los cadáveres en descomposición, así como refrescar y despejar la mente.

La siguiente hora se sintió como una tortura. Klein caminó de un lado a otro de vez en cuando, y los mosquitos del bosque lo mordieron varias veces.

Finalmente, vio al Frye de cabello negro y ojos azules, que caminaba fuera de la ciudad con una chaqueta y sosteniendo un bastón.

Aunque Frye todavía parecía un cadáver viviente, Klein sentía que estaba mirando a su salvador. Se cubrió la boca y dejó escapar un bostezo, haciéndole lagrimear los ojos. Se acercó y sacó el Artefacto Sellado 3-0782 de su bolsillo.

"¿Qué pasó?" Preguntó Frye mientras miraba el rostro pálido de su compañero.

Klein suspiró y dijo: "Solo hice mi turno en la Puerta Chanis la noche anterior y no dormí muy bien por la mañana, así que estoy muy cansado".

No profundizó más y cambió de tema. "¿Debería venir para mi próximo turno dentro de cuatro horas?"

"Siete horas. El Capitán no necesita dormir por la noche". Frye tomó el Emblema Sagrado del Sol Mutado.

Me alegro de que alguien disfrute de quedarse despierto hasta tarde... Klein se burló del Capitán en voz baja. Se despidió de Frye y caminó hacia la ciudad.

En el camino de regreso a la posada, volvió a sacar su reloj de bolsillo y miró la hora.

Hmm, diez minutos antes de lo que acordamos... Qué agradable persona... Klein rió y caminó más rápido. Regresó a la posada y abrió la puerta entreabierta. El gerente lo observó mientras se dirigía al segundo piso antes de entrar a su habitación.

Se quitó el abrigo y los zapatos después de cerrar la puerta con llave. No se lavó, sino que se dejó caer directamente sobre la cama.

Su respiración se hizo pesada en solo unos segundos, luego larga y pacífica.

En sus sueños, Klein regresó a la Tierra donde estaba jugando un juego que no había superado. Un vaso de refresco y un plato de alitas de pollo picantes estaban a su izquierda. A su derecha había un tazón de arroz y una sopa de carne con brotes de bambú amargos.

No le gustaban los brotes de bambú amargos, pero le gustaban en sopa con rodajas de carne. El sabor refrescante y la poca grasa de la carne eran tentadores, un complemento perfecto para el arroz.

¡Podía comer un tazón extra de arroz si se emparejaba con una buena salsa para mojar!

Justo cuando Klein estaba a punto de disfrutar de su cena y continuar jugando su juego, su sueño cambió nuevamente, presentándole el diseño interno del número 2 de la Calle Narciso.

Klein de repente se puso alerta, consciente de que estaba soñando.

Se vio sentado al lado de la mesa del comedor, con una copia del Periódico Diario de Tingen en la mano. Delante de él había un plato de estofado de rabo de toro con tomate, chuletas de cordero a la plancha, puré de papas y pan de trigo.

Subconscientemente se dio la vuelta para mirar hacia la puerta, notando de repente una figura de pie afuera de la ventana de la sala, mirando fijamente y en silencio dentro de la casa.

Klein estaba conmocionado. Inmediatamente reconoció al Dunn de ojos grises. La mitad de su rostro se pegaba a la ventana mientras observaba en silencio a las personas dentro.

... Capitán, ¿no puedes asustar a alguien en sus sueños? ¿Es esta tu forma de actuar como Pesadilla? Pensó Klein, encontrando humor en su exasperación. Recogió una cucharada de estofado y se la metió en la boca.

Ah, ¡esta es mi cocina! Suspiró para sí mismo. Entendió por qué de repente se puso alerta en su sueño, por qué desapareció la escena de él en la Tierra.

¡Se volvería consciente de forma natural cuando alguien irrumpiera en sus sueños!

En ese momento, Dunn dejó su lugar junto a la ventana y entró directamente en la casa. En su chamarra negra, llegó en silencio ante Klein.

Se quitó el sombrero e inclinó la cabeza antes de sentarse. No se anduvo con ceremonias, agarró los cubiertos y rápidamente terminó con el estofado, las chuletas de cordero y el pan de trigo que había sobre la mesa.

Klein observó atónito, sin saber qué estaba haciendo el Capitán.

Uf. Dunn exhaló satisfecho y le dio a Klein un pulgar hacia arriba. Luego sacó su pipa y un fósforo antes de dar una bocanada intoxicada.

Exhaló una nube de humo y se puso de pie. Luego se puso el sombrero e hizo una reverencia antes de salir de la casa y del sueño.

"..." Klein miró la espalda del Capitán, sin poder recobrarse durante mucho tiempo.

Miró hacia abajo a los platos vacíos e instintivamente quiso conjurar la comida que acababa de tener.

Pero esta vez, el estofado de rabo de toro con tomate, las chuletas de cordero y el puré de papas no aparecieron en su sueño.

¿Fue completamente comido? ¿Una Pesadilla puede hacer eso? Klein contrajo los labios y pensó frustrado. Entonces, el objetivo del Capitán era evitar que comiera la cena en mi sueño. Eso sí que es una pesadilla... Este método de actuar como Pesadilla sí que es creativo...

Soltó una carcajada y salió de su sueño, quedándose dormido nuevamente.

Alrededor de las cinco y media de la mañana del día siguiente, Klein, que no tuvo más remedio que despertarse temprano, beber su café y comer sus tostadas con tocino, se apresuró a salir de la ciudad para relevar a Dunn.

A las siete de la mañana, se prepararon para regresar a Tingen.

Apenas eran las diez cuando llegaron a la Calle Zouteland 36. Frye se sentó detrás de la máquina de escribir después de que Dunn, el más energizado de todos, devolviera el Artefacto Sellado 3-0782 a la parte posterior de la Puerta Chanis. Aprovechó el hecho de que los secretarios aún no habían llegado para escribir un informe sobre la misión y las demandas de los gastos relacionados.

Klein observó desde un lado, satisfecho de que los artículos que había gastado estuvieran en la lista, incluidos los materiales que usó para alejar los insectos y mosquitos.

No regresó a casa de inmediato, porque había arreglado encontrarse con el doctor Daxter del asilo a la una de la tarde en el lugar acordado a través de una carta codificada.

Luego está la Reunión del Tarot a las tres... ¿Por qué el jefe de una sociedad secreta tiene una vida tan agotadora? Pensó Klein. Tomó una siesta de dos horas en la sala de descanso de los Halcones Nocturnos para recuperar el sueño.

No olvidó la información que había obtenido el día anterior. No estaba preocupado por olvidarla, ya que la información podía recordarse mediante adivinación. Temía que ignorara la existencia de esta información e incluso perdiera la capacidad de adivinar la información. Por lo tanto, volvió a recordar los fragmentos de información una vez más antes de dormir para reforzarlos.

Esta también fue la razón por la que Klein insistió en hacer una revisión cada semana y reorganizar toda la información que conocía.

Después del almuerzo, miró su reloj de bolsillo y dejó la Compañía de Seguridad Endrina hacia el Club de Tiro en la calle Zouteland 3.

Klein entró en el área de recepción después de empujar la puerta, pero no se dirigió directamente al campo de tiro que pertenecía a los Halcones Nocturnos. En cambio, encontró un asiento en el vestíbulo mientras esperaba pacientemente con su bastón negro en la mano.

¡Había arreglado encontrarse con Daxter en el Club de Tiro de la Calle Zouteland!

Había organizado esto a través de cartas manuscritas. Siempre que Klein necesitaba reunirse con él, le escribiría al doctor Daxter Guderian en lugar de un familiar del paciente y le preguntaría sobre una condición única llamada "trastorno de identidad disociativo". En su carta, Klein usaría varios métodos para mencionar el término Espectador, así como una marca de tinta oculta para autenticar su identidad. La carta también mencionaría casualmente una hora para reunirse.

En cuanto al lugar de reunión, ya lo habían decidido la primera vez que se encontraron. Si Klein sentía que era necesario cambiar la ubicación, lo mencionaría cuando se reunieran en persona.

Cuando Daxter Guderian necesitaba reunirse por asuntos no urgentes, podía enviar una carta al Bar del Sabueso o al Club de Tiro. El destinatario estaría marcado como el Señor Hornacis, que Klein recogería en los horarios programados.

En situaciones urgentes, podía entregar la carta directamente al jefe del Bar del Sabueso, Wright, y mencionar su "búsqueda de mercenarios". De esta manera, Wright, quien era un asociado de los Halcones Nocturnos, entregaría la carta de inmediato a la Compañía de Seguridad Endrina.

Después de esperar un rato, Klein vio llegar al refinado Daxter al Club de Tiro, unos minutos después de la una.

Llevaba puesto un sombrero negro y un esmoquin ajustado. Tenía un bastón incrustado en plata en las manos, así como un par de gafas con montura dorada en la cara.

Daxter caminó por el club sin llamar la atención y vio a Klein, quien asintió levemente. Luego retiró la mirada y se dirigió al mostrador, donde solicitó con pericia un campo de tiro y alquiló un arma.

Esta no era su primera visita.

"Campo de tiro pequeño 7, 3 solis por hora. La tarifa de alquiler de un revólver es de un soli y siete peniques por hora y contiene seis rondas", el recepcionista se encargó rápidamente de la solicitud.

Después de que Daxter confirmó que estaba alquilando los artículos por una hora y pagó la tarifa de 10 solis, tomó el revólver y las balas adicionales y lo llevaron al campo de tiro respectivo con la ayuda del facilitador.

Klein esperó otros cinco minutos antes de ponerse de pie lentamente. Agarró su bastón antes de caminar hacia el pequeño campo de tiro 7 y llamó a la puerta.

La puerta se abrió una rendija con un chirrido. Daxter primero miró a su alrededor con cautela y luego abrió la puerta por completo.

Klein entró de inmediato y cerró la puerta con llave.

"Buenas tardes, Señor Daxter", dijo mientras sacaba un billete de 10 solis. Se lo entregó a Daxter. "No dejaremos que nuestros asociados soporten ningún cargo adicional".

¡Porque puedo reclamar una compensación...! Agregó en su corazón.

Daxter no se negó. Tomó el efectivo y preguntó pesadamente: "Señor Moretti, ¿por qué me pidió que nos reuniéramos?"