Capítulo 8: Eyaculación en la cara de la madrastra

Dolly no podía soportar ver el sufrimiento en el rostro de su hermana mayor y tampoco podía permitir que alguien más observara el error que cometió su delgado cuerpo, después de todo eran hermanas de sangre por lo que se apresuró a cerrar la puerta de la habitación lateral a la sala de dibujo, no permitiría que alguien viera como su novio amasaba y pellizcaba el frágil cuerpo de Sili, aun así no pudo evitar preguntarse ¿Qué había ocurrido ese día para que su hermana mayor repentinamente atrapase esa enfermedad tan desconcertante?

• ¡Ahh… esta picazón! Presione más fuerte…

• Baja un poco la voz Sili ¿está bien? ¡Debes tener cuidado de que nuestra madre no te oiga!

• ¡Pica mucho!

• Aiwa, ¿realmente funcionará tu método?

• Sentirá alivio, pronto todo estará bien.

Aiwa introdujo un dedo dentro de su vagina, en ese momento debido al efecto de promover la pasión, el brote de flor dentro de la vagina de Sili salto de inmediato para salir, Aiwa usó su dedo para acariciarlo suavemente. Cuando el dedo de Aiwa tocó la cumbre del capullo floral, el cuerpo entero de Sili tembló al tiempo que secretaba en ligeros chorros sus fluidos sexuales.

Originalmente ya estaba llena de un intenso deseo sexual, ahora el encuentro con el dedo de Aiwa hizo que su deseo se encendiera, el cuerpo de Sili temblaba y se retorcía.

• Uuu… eso se sintió muy agradable…

Aiwa no quería que Dolly viera la escena de como el cuerpo de Sili era penetrado salvajemente por él, por lo que mirándola  asintió con la cabeza y dijo.

• Dolly, tú vas a preparar agua tibia y a aguardar en la puerta desde afuera, no dejes entrar a nadie.

• Ahh… Muy agradable…

• ¡Ahh… Aiwa… una vez más un poco más profundo!

Al oír el grito de Sili, Aiwa condujo su gran erección hacia el ápice haciéndola chocar contra su interior, esto dejó que el deseo del cuerpo de Sili brotara y saliera, como si todos los nervios estuvieran concentrados en ese lugar <<Resiste el placer, deja que Sili grite en voz alta>>

• Sili, ¿estás bien?

• .. insoportable la… oh…

Después de que Sili volvió a chorrear una porción de fluidos sexuales, su cuerpo cayó flácido sobre la cama.

Sintió que carecía de fuerza, todos sus huesos se habían debilitado. Su falda fue levantada por Aiwa exponiendo sus dos largas y blancas piernas, miraba esa región secreta, Sili no tenía suficiente cantidad de fuerza para ordenarle nada.

Puesto que Aiwa era bueno en promover la pasión, naturalmente también lo era en la contención; Leyó silenciosamente algunos encantamientos en su corazón, poniendo fin al intenso deseo de Sili.

• ¿Todo bien ahora?

• Debe ser seguro.

• También aquí.

Aunque Dolly era tímida, ya había llegado allí, así que sin perder el tiempo ni tomar las cosas en consideración, sin ninguna opción se preparó; Para atender a Aiwa y lavar la cosa entre su entrepierna.

Después de lavar y limpiar a Aiwa, Dolly volvió a sostener la falda de Sili y la bajó por su cuerpo.

Saliendo de la habitación adyacente, Dolly aún no se sentía aliviada y le preguntó a Aiwa.

• ¿Mi hermana mayor sufrirá una recurrencia en el futuro?

• Al hablar referente a ella, esta clase de enfermedad se denomina enfermedad maníaca sexual, pero en cualquier momento puede ocurrir una recurrencia, sin embargo, después de la terapia que le di una vez, debería ser improbable repetir de nuevo el crimen en un futuro próximo.

• Si Sili vuelve a repetir el crimen, ¿qué hay que hacer?

• En ese momento trata de encontrarme otra vez, yo soy la única persona que puede darle el tratamiento gratuito.

• Entonces, si durante el tiempo de recurrencia de mi hermana mayor tu no estas presente ¿se humillaría frente a todos?

• Entonces no hay nada que pueda hacer, yo no puedo seguirla todos los días e ir detrás de sus nalgas ¿no? Usted vio el repugnante comportamiento de su hermana mayor, ¿cómo puede considerarme el marido de su hermana menor?

• Por lo tanto, según lo que usted también vio en este momento, podría decir que el tratamiento de su hermana mayor consiste en tener sexo con ella, después de que Sili se case, ella de inmediato tendrá que dejar de mirar a este joven extremadamente apuesto y buscar una manera madura de solucionar su problema ¿o creen que su marido le permitirá desnudarse frente a mí?

Después de descansar por un buen rato Sili lentamente se levantó y comenzó a ordenar.

En ese momento, un grito se escuchó en la entrada, Dolly fue a mirar y regresó a decirle a Aiwa que su hermano mayor había regresado.

En el momento en el que Federer llego noto el carruaje estacionado fuera de le entrada y la insignia del Clan Holtzer en la parte superior del mismo pincho en sus ojos, de inmediato noto que aún no se había ido. El joven Aiwa aún estaba de visita dentro del palacio del Clan Herman.

Federer se dirigió airadamente al salón, hacia Aiwa que estaba sentado allí.

• ¿Aiwa por qué todavía no te has ido? el Clan Herman no te da la bienvenida.

• ¿No me diga que su Clan Herman trata de esta manera a este tipo de visitantes?

• ¿Quién te tiene como visitante? Nuestro Clan Herman no le da la bienvenida a este tipo de visitas.

En ese momento, Sili ya había salido del interior de la pequeña habitación adyacente, con su ropa limpia y ordenada, simplemente mirando hacia el frente, todavía sonrojada, miró a su hermano mayor y dijo en voz alta.

• Hermano mayor, no te he permitido tratar Aiwa de esa manera, no sólo es el visitante de la hermana menor, sino también es amigo de Sili, debemos tratarlo correctamente y con el debido respeto.
• ¿Tratarlo con el debido respeto? ¿Me estás diciendo que lo trate con respeto?

• ¿Va a reportar esto a su amo, Aiwa?

• Hehe, no tiene por qué preocuparse, sólo es el cuñado jugando conmigo, eso es todo, yo tampoco me atrevería a ser grosero con mi cuñado.

• Humph…

• Joven maestro Aiwa, hoy eres nuestro visitante importante ¿puedo ordenar que la cocina prepare un banquete para entretenerte?

• Naturalmente, todavía quiero agradecerle por haberme salvado primero.

Aiwa todavía tenía a Dolly a su lado, por lo tanto, naturalmente no podía ser demasiado excesivo, no tuvo otra alternativa que mover su cuerpo hacia atrás, para no mirarle los abundantes pechos erectos y fascinantes.

Dolly al notar que su hermana mayor se mostraba tímida ante Aiwa, noto que su pecho se sentía un poco mal, pero no sería apropiado para ella mostrarse celosa, sin embargo era una persona incapaz de ocultar lo que su pecho sentía, por lo que su disgusto se le reflejo claramente en el rostro.

Sili percibiendo preocupación de su hermana menor, volvió de nuevo junto a ella y dijo riendo.

• Dolly, siéntete aliviada, pera tu hermana mayor es improbable luchar por tu amado, siempre serás mi adorada hermana menor Dolly.

Durante el banquete de almuerzo del Clan Herman, Aiwa mostró una exhibición ajustada y refinada, dejando a Alice, que originalmente tenia prejuicios hacia la familia de Kyle debido a la influencia de Groote, noto que este joven maestro, se había convertido en ese momento en una excepción por lo que se había formado una buena opinión sobre Aiwa, decidió usar su opinión para influenciar a su marido Groote, apoyando a su humilde hija Dolly para casarse con ese elegante muchacho. Luego de terminar la comida Federer salió molesto de casa.

Cuando Aiwa tuvo que partir del castillo de la familia Herma, Sili se sintió reacia a separase de él, por lo que en el momento de la despedida final, tomo la mano de Aiwa sintiendo como ese dedo le rascaba la palma repentinamente, al mismo tiempo en que ella dejaba algo en la mano de Aiwa.

Luego, tomando la iniciativa, se puso de puntillas y beso repentinamente a Aiwa, un beso que sin embargo fue muy penetrante, su pequeña lengua lila exploraba dentro de la boca de Aiwa entrelazándose con la suya, tanto que incluso Aiwa sintió que le empezaba a doler. Ese beso comparado con la vez en la que estuvo dentro de ella era mucho más significativo, porque el amor profundo que profesaba esa joven de la casa del primer ministro era algo que ningún joven había sido capaz de obtener.

Dolly también se adelantó para ir a besar Aiwa, el beso entre ellos fue más entusiasta, después de todo ese chico al que estaba besando era su prometido, por lo tanto su beso fue muy descarado, loco y fascinante.

Espero hasta que estuvo dentro del carruaje para poder ver que era lo que Sili le había dado con tanto sigilo, extendiendo su mano pudo notar que era un jade de sangre. En el Imperio Hass, los jades de sangre eran un tesoro invaluable, podía ayudar a practicar el Dou Qi y también hacer que una persona aumentara  su fuerza de combate por un rango.

Aiwa había escuchado que Dolly en conjunto con Sili sumaban cinco hermanas, ya las había conocido a ellas dos, pero todavía le faltaban tres. Aunque no debía negar que su madre, Alice, también era realmente hermosa, si se le presentara una oportunidad adecuada, pensaba que realmente tras la conquista de la primera ministra, podría obtenerlas a todas.

Cuando Aiwa regresó a su casa, Margaret ya lo estaba esperando dentro de su habitación, estaba vestida con ropa casual y se veía aún más fascinante que cuando se había ido en la mañana, llevaba una falda ajustada que cubría sus excepcionalmente largas y sexy piernas de jade, y sobre sus firmes y fascinantes senos  un escote que mostraba la parte superior de estos que temblaron con cada uno de sus movimientos atractivamente.

• Querido Aiwa, ya he recibido el decreto de Su Majestad la Reina, ordenándole que se informe en el palacio imperial mañana. Lo lamentable es, que después de esto no podre ver más a mi Aiwa todos los días.

El dedo de Aiwa alzo el hermoso mentón de Margaret y mirando sus profundas pupilas de color azul, presiono su boca sobre los labios atractivos de ella, su fragante lengua exploraba hacia adentro, y la mano de Aiwa siguió su escote recorriendo la línea de su escote para agarrar su pecho regordete. Además de ese vestido casual, no llevaba nada para cubrir su cuerpo; La mano de Aiwa fue directamente a su cintura para sostenerla.

Bajo el toque de las manos grandes de Aiwa la cuales se aferraban a sus senos y cintura, ella respondió de igual manera, sus manos desprendieron frenéticamente la ropa de Aiwa, desnudándose ella también con rapidez, luego agarro con impaciencia ese tosco miembro deseando insertarlo inmediatamente en su interior.

Aiwa no tenía prisa así que la beso lentamente mientras pellizcando sus pezones, aflojando la ropa en el proceso y masajeando sus senos, haciendo que Margaret se sintiera entumecida y hechizada.

La mano de Aiwa se deslizo hacia el interior de su falda, Margaret al no llevar nada debajo de su esta, sólo una maleza peluda, pudo sentir la humedad bajo ese matorral.

• Hehe, ¿Reaccionaste tan rápido?

• Todo es tu culpa, ya estaba esperando por ti ¿Qué te ha parecido esa mocosa de Dolly? ¿Tenías la esperanza de dormir esta noche con esa pequeña belleza en tu cama?

• Jeje, quiero llevarte a ti a mi cama, ¿qué dices?

• Yo… ya no puedo esperar…

Aiwa sostenía a Margaret acercándola sobre la cama, levantando su falda, exponiendo sus dos muslos blancos como la nieve, ahora que el área entre esas dos piernas ya se había humedecido, casi parecía una corriente. Inclino su cabeza acercando la boca a la entrada de su vulva, extendiendo su lengua para lamer la ya húmeda cavidad.

• Oh… Aiwa… Te quiero…

• Oh… quiero… tu larga cosa…

Sin embargo, Aiwa estaba tranquilo y continuaba lamiendo sin prisas, lamiendo ocasionalmente dos veces superficialmente por la parte superior, en donde naturalmente se encontraba la zona más sensible de la mujer, cuando solo la punta de su lengua tallo esa zona una vez su cuerpo tembló causando que sus paredes se contrajeran y que fluyeran sus secreciones sexuales.

Esas secreciones sexuales blancas lechosas permiten que la naturaleza de un hombre se despierte. Aiwa lamio ese líquido blanquecino y lo trago, chupando encima de su tierna carne, dejando a Margaret privada de experimentar un efecto de refresco, y luego provocando su deseo sexual más intensamente.

• Oh… ¿Aiwa, puedes ser un poco más rápido? Si regresa tu padre, entonces no podremos continuar.

Para manejar a Margaret, Aiwa no necesitaba ninguna técnica Yin, sólo usando métodos comunes podía hacer que se volviera lasciva inmediatamente, ahora sus labios y lengua aun jugando en la parte superior de su vulva, moviéndose frotando contra su carne tierna, causaba en el cuerpo de Margaret un ligero temblor.

• Ahhh… siento mucha picazón…

• Ahh… Aiwa… harás que muera… harás que muera por la picazón… entra en mi rápidamente…

Al ver el cuerpo de Margaret retorcerse violentamente hizo que se preocupara un poco por lo que se levantó y sosteniendo las piernas que le rodeaban la cintura se empujó dentro de él agujero de carne de Margaret.

• Oh… agradable a la muerte…

Después del empuje de Aiwa Margaret se descargó, el enorme miembro de Aiwa comparado con el de otros hombres, era capaz de permitir que una mujer llegara al clímax varias veces y con mayor intensidad, con el maestro Kyle lograba legar una vez pero ya no se sentía igual en absoluto, tras todos los encuentros con Aiwa quien simplemente le otorgaba un placer intenso.

Margaret no estaba consiente de cuantas veces había llegado al clímax, solo que como el maestro Kyle no había regresado aun simplemente se había dejado llevar por el momento y lo disfruto, incluso se impulsó ella misma mientras se mordía los labios.

Pero finalmente ya no pudo contenerse, justo cuando quería abrazarse al cuerpo de Aiwa el suyo  se contrajo inmediatamente. De hecho sus largas piernas ya estaban alzadas hacia el cielo descontroladamente. En ese momento estaba esperando sentir el clímax de Aiwa, pero el miembro de este aún seguía firmemente erguido totalmente empapado con sus secreciones sexuales y disfrutando de las contracciones de las paredes de carne que lo rodeaban.

• Ahhh… ¿cómo todavía no has eyaculado?

• ¿Quieres ayudarme a eyacular?

• ¿Esto todavía no es fácil?

• ¿esto te gusta?

La entrepierna de Aiwa, esa gruesa erección, entraba y salía de esa pequeña boca, pero él no se atrevía a ir más profundo, después de todo ella no era la señorita Ruth, hacer eso podría herir a su madrastra e incluso poner en peligro su vida, el miembro de Aiwa era muy grande y grueso por lo que podría bloquear la garganta de Margaret y ahogarla, no había pensado hacer que su madre adoptiva asumiera ese tipo de riesgos.

No estaba muy decidido a meterlo por completo en la boca de Margaret, por lo que busco otras alternativas y pensó en el ano de su madrastra como una buena opción, deslizo el dedo por su vientre, atravesó su húmedo valle y enterró un dedo en su ano.

Sonriendo como de manera obscena sabía que la mayoría de las mujeres no estarían de acuerdo con esa opción, sin embargo Margaret dio su respuesta franca y directa, ajustando su cuerpo y levantando las caderas hacia Aiwa invitando a su pene, quien miro con cuidado esa línea crisantemo que ya estaba cubierta de esa cosa pegajosa y traslucida, que fluía precisamente desde su vulva hacia la cima. El miembro erguido de Aiwa se empujó lentamente para entrar, deslizándose con delicadeza dentro de su ano, tragándose por completo su gruesa erección.

Aiwa se enterró profunda y descaradamente en ese agujero tan escondido en el cuerpo de Margaret ya no necesitaba preocuparse por herir el cuerpo de su madre, pero lo que hizo que se sintiera más fresco fue que la entrada de crisantemo de Margaret ofrecía una inesperada pero poderosa fuerza de contracción que se aferraba a su rudeza, si no fuera por la gran fuerza de Aiwa, entonces necesitaría gastar una gran energía en Margaret para ampliarla por lo que continuo embistiendo vigorosamente, acrecentando el intenso placer que le producía Margaret.

• Ah… muy caliente...

Margaret se encontró gritando intensamente sin poder detenerse mientras notaba que la enorme erección que se frotaba contra ella se asemejaba a un gran fierro ardiente pero que a la vez era agradable. Sin embargo fue Aiwa quien experimento el mayor placer, sentía que ese placer no podía ser igualado ya que podía hacerlo sin restricciones y con la valentía de quien va a la guerra, embistió la entrada de crisantemo de Margaret  sin contenerse y con un ritmo desenfrenado. Aun a pesar de ya tener media hora con esa guerra, el miembro de Aiwa todavía se mantenía erguido y simplemente no daba indicios de querer acabar aun a pesar de que el ano de Margaret daba una sensación tan ardiente que realmente le resultaba dífila seguir.

• Oh… Aiwa, no lo soporto… es muy caliente…

• ¡Pero todavía no he acabado!
• Se quejó Aiwa.
• ¿Qué tal si usas estos?

Allí, aunque no era el interior de Margaret, sentía que ese tipo de vigor, la suavidad y la flexibilidad con que lo frotaban eran una sensación desquiciante. Margaret al sentir la gruesa erección entre sus senos empezó a moverse para darle placer, acariciándolo con sus senos varios cientos de veces, ese roce rápido lo hizo perder la noción del tiempo y alcanzo el clímax y sintió como su esencia salió disparada en chorros embadurnando la cara y los senos de Margaret, escurriendo por ellos todo su blanco semen.

• Aiwa, ¿también vas a disparar así en toda la cara de la Reina?