⚠️ Traducción hecha por fans. Sin derechos sobre el contenido original.
Volumen 2 Capítulo 3
Encuentro con la tribu Tanzya
Fá Bā Gòng (Favargo), era una pequeña guarnición al sur.
En el dialecto local 'bā gong' significaba apuntar hacia las montañas. Aquí los ríos cruzaban entre sí, las montañas se extendían para siempre en la distancia, Favargo estaba situada en un llano dentro de estas montañas, un área que cubre menos de 100 li.
Al oír que alguien venía a reemplazarlo, el funcionario local estaba un poco salvaje de alegría, tenía miedo que después de entrar aquí Aiwa cambiaría su plan de quedarse; Por lo tanto, rápidamente empacó su equipaje para salir de esta región fantasma que había supervisado durante 5 años. Durante este tiempo, él nunca había pasado un solo día pacífico.
Había pedido a la Reina que tropas atacaran a la tribu de Tanzya dos veces, sin embargo el resultado fue que la Reina había enviado a Federer esa generación incompetente, dando como resultado represalias de la tribu, si no fuera por la protección de la muralla, los jóvenes y los ancianos de su familia ya habrían sido tratados por los tanzianos.
Aiwa junto con unos pocos soldados llegaron a las murallas del sur de la ciudad, yendo hacia la dirección de la tribu Tanzya. Cubierto por el calor ensangrentado del sol poniente, el polvo subía hasta el cielo, dentro del polvo, había una escuadra de tropas que se movía lentamente hacia el sur.
Algunos de esos chambelanes fueron dejados atrás por el viejo general para agradecer a Aiwa por su reemplazo, estaban muy familiarizados con esta región, él eligió especialmente a unos cuantos asistentes capaces como un regalo a Aiwa, este no se negó, esa era una región desconocida para él, este tipo de de obra era muy esencial.
- ¡Aquellos tanzianos vuelven a luchar por la propiedad de nuestras fronteras!
- ¿No tenemos también caballería?
- Ellas son una tribu nómada, viviendo su vida cotidiana a caballo, muy rápidas y feroces, nuestra llamada caballería sólo montan un caballo durante su tiempo de entrenamiento, que también podría ser tratado como divertirse, ¿cómo pueden superarlos?
- ¿Nuestra caballería entrena regularmente?
Una especie de rabia se elevó dentro de su mente.
La vista de Aiwa se alejó de sus espaldas, mirando las montañas alrededor, después de ver el valle que se extiende entre estas montañas, Aiwa concluyó que estas Tanzianas seguramente se infiltrarían desde allí.
- Cada via dentro del valle podría ser una ruta de ataque, nuestros números también son limitados, por lo que es imposible cubrir cada paso de montaña, además nuestra fuerza de combate es incapaz de comparar a nuestro enemigo. No debe ver que son en su mayoría mujeres, su fuerza de combate no difiere ni siquiera un poco en comparación con un hombre.
- Proteger dentro de las murallas de la ciudad es lo más seguro, si confía demasiado en nuestra caballería, entonces eso sería entregar su pequeña vida hasta su fin.
- ¿Lo que quiere decir es que, sólo podemos ser saqueados por esos tanzianos?
- Respondiendo al Jefe, lo que quiero decir es que si no queremos que los tanzianos nos hostiguen, entonces no es posible confiar en nuestro ejército actual.
Aiwa hizo a algunas personas plantar muchos espantapájaros, para ser usados como enemigos imaginarios para entrenar a los soldados. La caballería fue entrenada dos veces al día, los que se destacaran serían promovidos a jefes de peloton, una vez durante el día, una vez durante la noche, debido a la promesa de Aiwa, los soldados pusieron toda su energía en el entrenamiento, algunos todavía entrenaban intensamente mientras los demás descansaban, porque estaban pensando en destacarse durante la competición.
Mientras los soldados entrenaban intensamente, Aiwa a menudo envió un grupo para inspeccionar la situación en cada paso de montaña.
En una semana, ya conocía todas las regiones alrededor de Favargo desde adentro hacia afuera, especialmente el terreno del sur de la montaña cerca de Tanzya.
Después de una semana, Aiwa tomó la mitad de su caballería visitando cada paso de la montaña, haciéndolos hacer cosas grotescas en los árboles y las rocas de la montaña. A los soldados no les importaba esto, creyendo que este recién nombrado oficial mayor era un niño inmaduro, simplemente quería divertirse, sin embargo, como Aiwa era un hombre rápido y decisivo, nadie se atrevía a desobedecer su orden.
Durante el tiempo en que los soldados estaban recibiendo todo tipo de entrenamiento en las murallas de la ciudad de Favargo, los tanzianos volvieron a saquear la población fronteriza del Imperio Hass, quienes sólo podían formar una organización de autodefensa y resistir a los tanzianos. Luchando contra ellos sin tener otra opción.
La razón por la que los tanzianos sólo luchaban por sus cosas y nunca lastimaban a una persona era que tenían disciplina estricta, durante el curso del saqueo; Sólo tomaron lo que era absolutamente esencial, no permitiendo que nadie lesionara la vida de una persona de Favargo. Por lo tanto, cada saqueo no causó víctimas. Esta fue también la razón por la cual el Imperio Hass no había enviado tropas para atacar Tanzya.
Después que medio mes de entrenamiento había pasado, la habilidad de muchos oficiales y hombres hizo un salto cuantitativo adelante, sus manos comenzaron a picar, porque el ex-comandante tenía miedo de las víctimas y recibir la culpa por parte de la Reina, no se atrevió a enviar tropas, haciendo que los soldados que luchan contra la fuerza declinen.
Y después de que Aiwa tomó el puesto de comandante, comenzó a entrenarlos amargamente, haciendo que secretamente regañara a Aiwa en sus corazones, pero poco a poco, después de ver su fuerza de combate aumentar, sus corazones admiraban a este nuevo oficial.
Como resultado, su confianza aumento debido a Aiwa, el pensamiento de algunos oficiales de luchar por el mérito de primera clase nació, por lo tanto, un general de cien hombres llamado Samo dirigió un escuadrón de tropas para robar un baluarte de Tanzya. Sin embargo, sufrieron una emboscada de los tanzianos en su camino de regreso.
Aiwa llevó a algunas tropas a salvar a Samo que seguía sufriendo más de la mitad de las bajas y regresó. Él había enviado previamente una orden, sin su orden, nadie era permitido actuar ciegamente sin pensar; Los violadores recibirían un fuerte castigo. El oficial Samo pensó que el ataque de esta vez aumentaría sus meritos, pero no esperaba que Aiwa lo hiciera golpear por una vara cien veces, esos golpes hicieron que su carne se lacerara.
Desde entonces, la disciplina dentro del ejército se hizo más firme, nadie se atrevió a considerar la orden de Aiwa como una broma.
Después de un mes de entrenamiento terminado, la competencia también comenzó. Aiwa personalmente miró las peleas. La mayoría de ellos eran eventos deportivos, la caballería tenía tiro al arco ecuestre, esperando para asesinar a caballo, la infantería comparó sus enseñanzas de espada y puntería, la batalla con el lucio de asesinato también fue popular convirtiéndose en el principal evento deportivo de la infantería.
Especialmente dentro del tiro al arco ecuestre, un gran número de expertos que podían disparar con gran precisión fueron pescados. Aiwa le preguntó al chambelán a su lado:
- En comparación con antes, ¿han progresado?
- ¡No es lo mismo! ¡No se pueden comparar!
- Si este ejército lucha de nuevo con los tanzianos, ¿cuáles son las probabilidades de éxito?
- ¡Si usamos nuestra actual fuerza militar para atacar a los tanzianos, entonces seguro que sería como pasar un cuchillo caliente a través de la mantequilla, barriendo todo lo que tenemos ante nosotros!
Aiwa hizo una ligera sonrisa, había visto la fuerza de esos tanzianos con sus propios ojos, cuando rescató a Samo, el oponente era simplemente el rango de un jefe, esas lanzas rotondas y la lluvia de flechas de madera ya habían hecho que Aiwa ampliara su alcance. Según su juicio, estos soldados la fuerza de combate actual era todavía insuficiente para luchar contra los tanzianos.
Porque él sabía que los tanzianos sólo mataban como último recurso, sólo para salvar sus vidas ellos abiertamente matarían. Si la contraparte no tenía la habilidad, este acto era imposible de hacer. Durante esa primera pelea, incluso sin tener en cuenta sus vidas, el soldado de Favargo no podía ni siquiera herir a un solo tanziano. Este punto fue más claro en el corazón de Aiwa.
Por lo tanto, una vez más transmitió la orden de que sin su orden nadie se le permitió salir a pelear.
Sin embargo, las tropas guarnecidas en Favargo ya no eran como barro blando, si un tanziano las veía, seguramente se sorprenderían.
Aiwa no pensó en salir inmediatamente a pelear, sino que pidió a la Reina que enviara tropas como refuerzo, también mencionando especialmente enviar al suboficial Federer, que estaba muy familiarizado con esta región. Tuvo que dejar que el joven Federer se humillara nuevamente, derribar su actitud desmedida.
Después de una semana, Federer realmente llegó a la ciudad de Favargo bajo las órdenes de la Reina llevando 2000 tropas con él. En calidad de comandante supremo de estas tropas, era inevitable que Federer actuara de manera alta y poderosa frente a Aiwa.
- Aiwa, ¿no tienes ninguna habilidad? ¿Cómo? Acaba de llegar a Favargo y tan rápidamente ¿pidió la ayuda de la Reina? La contraparte son sólo unas pocas mujeres, que a la vez te hacen asustar tanto, jeje, ¡Esto realmente no es digno de la generación posterior del General!
- Suboficial Federer, mis esperanzas descansan en ti, he sufrido el hostigamiento de esos tanzianos aquí todos los días, sobre todo escuché que sus soldados gritan que si pudieran hervir y comer a mi buen amigo Federer, aumentaría su vitalidad, son muy agresivos, por lo tanto solicité especialmente a la reina que enviara a su grupo para humillar a los tanzianos!
- Aiwa, no te preocupes, no necesito ni siquiera la menor parte de tu ayuda de soldados, voy a hacer que el grupo de Tanzya esclavos de sexo y obedientemente te laman el pie, ¡espera y ve!
- Has venido a ayudar a Favargo, en calidad de oficial superior de esta región, ¿cómo no puedo ayudarte? Si la Reina sabía que yo estaba mirando con las manos dobladas, ¿entonces no me está pidiendo que me castiguen?
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