Capítulo 2320: Príncipe Heredero Sable Diabolico

"¡Boom!" Conquistador, Dragón Serpenteante y Soberano de la Espada castigaron el cielo. Sus ataques destruyeron las estrellas e hicieron temblar la tierra.

Conquistador estaba siendo repetidamente empujado hacia atrás por el esfuerzo combinado de Dragón Serpenteante y Soberano de la Espada. No había duda de que estaba en desventaja a pesar de resistir.

"Hermano Conquistador, no serás capaz de sobrevivir hoy sin un tesoro ancestral". Dragón Serpenteante caminó hacia delante mientras usaba los ocho tesoros.

"Está bien." Conquistador seguía siendo todo sonrisas y respondía despreocupadamente ante el peligro, realmente una muestra admirable por su parte.

"¡Te voy a derribar!" El Soberano de la Espada dio rienda suelta a su intención de espada y a su dao, mostrando cero piedad con un tajo mortal tras otro.

Por otro lado, Dragón Serpenteante no deseaba matar a Conquistador todavía porque quería ver al tipo sacando potencialmente un tesoro ancestral. 

Tenía aliados aquí y si tal cosa ocurriera, pagarían cualquier precio para apoderarse de él por necesidad. Poseer un arma así reforzaría sus cimientos y su reivindicación del sistema.

"¡Retumbar!" La lucha mantuvo el mismo curso con Conquistador a la zaga, herido. Sin embargo, no sacó un arma más fuerte.

Todo el mundo podía decir que en una pelea uno contra uno, Conquistador definitivamente ganaría contra cualquiera de estos dos.

"Incluso si no es un descendiente, debe estar estrechamente relacionado con el Progenitor del Dragón Serpenteante en algunos otros aspectos. Ha heredado algunas habilidades, esto es suficiente para afectar a la Dinastía de los Ocho Brazos". Murmuró un ancestro después de ver a Conquistador usando múltiples artes del progenitor de ese sistema.

De hecho, Dragón Serpenteante estaba furioso y celoso a la vez, ya que su dinastía no tenía ninguna de ellas. Una vez que las alas de Conquistador crecieran lo suficiente, sería un gran golpe para la dinastía.

"¡Boom!" Un ataque combinado finalmente hizo volar a Conquistador mientras vomitaba sangre.

Justo cuando Conquistador perdió la guardia, brilló el destello frío de un sable. Esta intención de sable apareció con la sombra y el flujo del mercurio.

Esto culminó en una hoja que apareció junto al cuello de Conquistador. Esta emboscada llegó demasiado rápido, queriendo acabar con Conquistador.

Pulgadas antes de morir, el cuerpo de Conquistador se volvió etéreo y se extendió casi como una sombra, igual que un dragón rompiendo los grilletes del espacio.

"¡Dragón Salto del Mundo!" El Dragón Serpenteante gritó después de ver esta técnica de movimiento.

"¡Splush!" A pesar de la habilidad de saltar a través del tiempo, Conquistador no evadió completamente el tajo. Le cortó el pecho y dejó tras de sí una herida lo suficientemente profunda como para ver los huesos. La sangre manchó la parte delantera de su túnica.

Todos jadearon al ver la mortal emboscada. Miraron y vieron a un joven materializándose en el aire. Llevaba un largo bastón, bastante alto de estatura pero curvado como un cuchillo de pelar. Parecía frío y duro mientras emitía una oscura energía de sable: la apariencia de un mensajero del inframundo.

"¡Príncipe Heredero del Sable Diabolico!" Gritó alguien.

Al oír este título, otro comentó: "¿Él también está aquí? Los tres jóvenes nobles y el dúo espada-sable están presentes hoy entonces".

Por supuesto, esto no contaba al difunto Milagro.

"¡Sun Yichen!" Aquellos que han luchado contra él antes se tambalearon hacia atrás con miedo.

El príncipe heredero del Sistema Comienzo del Cielo, Sun Yichen, era famoso junto al Soberano de la Espada. Era diferente a sus compañeros. A pesar de pertenecer a un sistema oficial, su conducta era de naturaleza más cuestionable.

Dragón Serpenteante y Soberano de la Espada siempre hacían una buena actuación a pesar de lo que habían hecho en secreto. Este no era el caso de Sable Diabolico. Además de asesino, era moralmente ambiguo. 

Los otros dos también lo han hecho, pero nunca dejarían que su identidad fuera expuesta durante el acto. Mientras tanto, Sable Diabolico acababa de tratar públicamente de emboscar a Conquistador.

Por lo tanto, uno no podía realmente tratarlo como un sucesor del sistema. Su estilo y sus emboscadas infundían miedo, de ahí su título.

"Y yo que pensaba que era otro". Conquistador se rió de Sable Diabolico en vez de mirar su herida.

"No me culpes por esto, alguien más pagó por tu vida de perro". La voz del príncipe heredero era a la vez escalofriante y nefasta.

"El precio debe haber sido algo. Supongo que debería alegrarme de que mi vida valga tanto". Conquistador dijo con indiferencia.

La verdad era que muchos no entendían en absoluto a este príncipe heredero. Comienzo del Cielo ya era muy poderoso con un progenitor que eventualmente ascendió al nivel imperial. En Miriada, eran un sistema de primera categoría, aunque no al mismo nivel que Bermellón. Alguien con una educación tan prestigiosa no debería carecer de dinero. Por desgracia, se convirtió en un sable de alquiler, confundiendo a todos los demás en el proceso.

El grupo de Dragón Serpenteante tenía un entendimiento implícito. Él y el Soberano de la Espada atacaron desde la izquierda y la derecha, creando una enorme ola de llamas.

"¡Dragón que acaba con la Tierra!" Conquistador gritó locamente y se convirtió en un enorme dragón. Destrozó la ola de llamas, sufriendo daños en el proceso.

Justo en este segundo, otro tajo indetectable vino de Sable Diabolico.

Aunque Conquistador estaba usando su técnica de movimiento evasivo, su espalda aún fue cortada con sangre brotando. No había duda de que las técnicas de Sable Diabolico eran más viciosas y aterradoras comparadas con las de los otros dos.

"¡Otra vez!" Conquistador sin miedo corrió hacia adelante una vez más.

"¡Boom!" Chocó con Dragón Serpenteante y Soberano de la Espada, pero Sable Diabolico continuó asomándose en el fondo. Cada emboscada era un tajo vicioso y fatal.

"Ese príncipe heredero es demasiado cruel". Un pez gordo de la última generación sacudió la cabeza y dijo.

En términos de cultivo, no era tan fuerte como sus aliados actuales. Sin embargo, estos otros dos no tenían los legados reales de su sistema y tenían pocas leyes de mérito de los progenitores.

Este no era el caso de él. Él poseía el legado del Ancestro del Comienzo del Cielo. Cada tajo contenía el dao de este progenitor, aumentando su efectividad. Sus leyes de mérito eran superiores a las de los otros dos. Conquistador pudo manejar a los otros dos por un tiempo, pero una vez que el príncipe heredero se unió a la mezcla, más y más heridas se sumaron.

"No creo que Conquistador pueda aguantar mucho más". Todos sentían que su derrota era inevitable.

Capítulo 2321: Espada Invencible

No tardó en llenarse de heridas y manchas de sangre que arruinaban su túnica. La mayoría eran marcas de cortes. No tenía ninguna posibilidad de ganar una vez que el príncipe heredero se uniera. Era demasiado difícil predecir y reaccionar a los ataques de emboscada por lo que se quedó con decenas de cortes.

"¡Whoosh!" Otra emboscada exitosa resultó en una herida profunda en las piernas de Conquistador. Este tajo casi se las cortó. Sin embargo, Conquistador se volvió más fiero como un perro desesperado.

Las explosiones detonaron. No tardó en recibir otra herida grave: un tajo casi lo decapitó, dejándole un corte en el cuello.

"¡Clank!" A continuación, Conquistador detuvo la estocada de Soberano de la Espada, pero el príncipe heredero le atravesó con éxito.

"¡Boom!" Dragón Serpenteante aprovechó esto y le hizo salir volando con la carne maltrecha.

Conquistador tardó mucho en levantarse. Sus heridas le dificultaban mantenerse en pie, por lo que tuvo que utilizar a su Dragón Errante como apoyo.

La multitud muda se miró entre sí, dándose cuenta de que él solo no podría con los otros tres y moriría aquí.

Por desgracia, nadie estaba dispuesto a salvarlo. Algunos le conocían, pero eran sólo conocidos. Además, ni siquiera sus amigos podían salvarle de esos tres. Nadie en la joven generación era rival para ellos.

Además, representaban a tres sistemas. Ayudar ahora significaba enemistarse con esos sistemas. Ni siquiera los buenos amigos intentarían hacer algo tan tonto.

"Sólo le falta un respaldo fuerte". Un viejo maestro suspiró suavemente. Si Conquistador tuviera los mismos antecedentes que los otros tres, sus antepasados le habrían ayudado ahora mismo. El destino de un lobo solitario era desafortunado.

"Parece que el Príncipe Heredero Sable Diabolico es digno de su reputación". La brillante sonrisa no desapareció de la cara de Conquistador.

"Yo también admiro tu valor, es una pena que el precio fuera demasiado alto". Pronunció fríamente el príncipe heredero.

"Está bien, esto no está decidido todavía". Conquistador - ensangrentado, pero aún sintiéndose libre; luchando por mantenerse en pie, pero aún sonriendo de una manera tan carismática y encantadora.

"Lo que es desafortunado es que no tienes todas las leyes de mérito y un tesoro ancestral". Dragón Serpenteante sacudió la cabeza.

"Tu plan es demasiado obvio. No te dejaré tener lo que quieres". Conquistador se rió y sacudió la cabeza.

"Entonces te enviaré fuera". Los ojos de Dragón Serpenteante brillaron con intención asesina.

"No te preocupes, sólo una espada mía. No será doloroso". Añadió el príncipe heredero.

El trío rodeó a su presa con un último movimiento preparado para matarlo.

"Supongo que tener a tantos queriendo matarme es una especie de honor". Dijo Conquistador.

"¡Clank!" El príncipe heredero desenvainó y apuntó con su sable a Conquistador, dejando de atacar desde las sombras.

El ambiente se volvió tenso ya que podrían ser los últimos momentos de Conquistador.

"Se acabó la fiesta". De repente, una voz perezosa rompió el aire solemne.

Todos miraron y vieron a Li Qiye tumbado en otro pico. Ling Ximo había encontrado una silla reclinable desde quién sabe cuándo. Parecia estar tomando el sol en ese lugar y ni siquiera se molesto en mirar al grupo mientras hablaba, todavia medio dormido.

El trío se quedó inmóvil antes de volver a mirarle. En el pasado, no les habría importado, pero recuerden que acababa de suprimir a la Matrona Cazavientos, un Verdadero Dios de octavo nivel. Sus palabras tenían mucho peso ahora.

Incluso si iban a por todas, no se compararían con ella. Esta era una existencia que podría desafiar a un Verdadero Emperador de bajo nivel, y ellos no estaban a este nivel todavía.

"Hermano Li, esta es nuestra disputa personal. Espero que no interfieras". Dragón Serpenteante dijo con una mirada seria.

El Soberano de la Espada tampoco pudo decir nada. Su objetivo, Ximo, estaba allí mismo. Ella poseía las llaves para encontrar la tumba de la espada, pero él fingió no verla. Después de todo, no se atrevería a meterse con Li Qiye antes de estar absolutamente seguro de la victoria.

"¿Y qué? Si te digo que te vayas, hazlo". Respondió Li Qiye.

La multitud sonrió irónicamente ante esta actitud dominante. Parecía estar tratando al trío como seres insignificantes, no era algo que muchos pudieran hacer. Por supuesto, este tipo desafiaba al experto número uno de Miriada. Estos tres jóvenes nobles y el dúo sable-espada no eran suficientes para disuadirle.

"Hermano Li, ¿no estás siendo demasiado irrazonable?" Dragón Serpenteante se molestó. Matar al Conquistador ahora les dejaría descansar tranquilos.

"En efecto, ese es mi estilo". Li Qiye respondió claramente.

El príncipe heredero respondió furiosamente: "¡¿Crees que puedes manejar el antagonismo de nuestros tres sistemas?!"

"¿Sólo tres sistemas?". Li Qiye volvió lentamente su mirada hacia el príncipe heredero: "La intimidación es inútil ya que no pestañearía yendo contra toda la Miríada."

La multitud muda no encontró esto demasiado sorprendente ya que él también lo había hecho en la Corte de los Locos. La alianza representaba virtualmente a toda Miriada.

"Hermano Li, tu interferencia en nuestros asuntos es realmente..." Dragón Serpenteante soltó.

En un abrir y cerrar de ojos, brilló el destello de una espada y después se oyó un ruido metálico. Li Qiye desenvainó despreocupadamente la espada de hierro en la espalda de Ximo, pero con tal velocidad que nadie pudo ver cómo lo hizo ni lo que ocurrió a continuación.

De hecho, el verdadero orden fue un ruido metálico antes del destello de la espada. Su velocidad rompió el orden del propio tiempo.

Al ver el destello, el trío se puso tenso y quiso tomar represalias. Pero ya era demasiado tarde. Sintieron dolor en el hombro. La sangre rezumaba de su herida y manchaba su túnica de rojo.

Li Qiye les había cortado y había devuelto la espada a la vaina antes de que pudieran pensar en vengarse. Se sentó allí, con el aspecto perezoso de siempre.

El trío se asustó mucho e instintivamente retrocedió varios pasos, una acción inútil.

Una vez que el desenlace quedó claro, los espectadores jadearon en respuesta mientras sentían un cosquilleo en la cabeza.

Ni siquiera el trío tuvo oportunidad de defenderse ante Li Qiye. No tenía nada que ver con su cultivo y poder; su velocidad era simplemente insuperable.