Capítulo 175-1 – Primera prueba. Poder. (1)

Las dos enormes Bestias Celestiales avanzaron lentamente hasta el frente de ambos jóvenes antes de detenerse. Se veían casi exactamente iguales, la longitud de su cuerpo era de unos siete metros de largo, cubiertos por completo con una gruesa capa de escamas azul helado. Por el contrario, su altura era de solo un metro y medio de altura, con todo su cuerpo cerca del suelo, mostrando una marcada diferencia entre su altura y su longitud.

Zhou Weiqing no reconoció a esa Bestia Celestial, pero parecía un enorme pangolín. Sus ojos brillaron con luz fría, y por el aura, ambas eran Bestias Celestiales de la Etapa Zong de Nivel Superior.

Tenía que ser conocido, que la tarea de Zhou Weiqing y Gu Yingbing no era derrotar a esas Bestias Celestiales, sino abrumarlas con su aura. Para un Maestro de Joyas Celestiales ordinario, tal vez podrían derrotar a una Bestia celestial de igual nivel, o tal vez incluso mayor. Sin embargo, para poder utilizar su aura para abrumar a una Bestia Celestial, ¡Tenían que estar en un nivel de cultivo mucho más alto! Sin embargo, estas dos bestias celestiales en frente de ellos… ni hablar de Zhou Weiqing, ¡Incluso Gu Yingbing estaba en un nivel de cultivo inferior! Después de todo, él acababa de llegar a la Etapa de Nueve Joyas. ¡Esta prueba realmente sería altamente dependiente de sus líneas de sangre ahora!

Las dos enormes Bestias Celestiales eran extremadamente obedientes, sus ojos estaban fijos en el Señor de la Montaña Celestial de Nieve, ​​como si esperaran alguna instrucción. Por lo que parecía, estaban increíblemente bien educados y honestos.

Xue AoTian dijo pasivamente: “Ambos pueden comenzar ahora. El tiempo otorgado es de cinco minutos. Si en ese momento, cualquiera de ustedes no ha logrado abrumarlos, cuenta como un fracaso.”

Cuando Xue AoTian dio el comando para comenzar, Gu Yingbing fue el primero en actuar. La luz roja-dorada surgió alrededor de su cuerpo, y sus ojos también se tornaron de color dorado brillante. Al mismo tiempo, una poderosa aura surgió de él, la aterradora presencia envolvió a la enorme Bestia Celestial, que parecía un pangolín, frente a él.

El cuerpo de la Bestia Celestial tembló ligeramente, y pareció vacilar un poco antes de retroceder unos pasos. Sus cuatro extremidades se doblaron, y cayó al suelo, su cuerpo todavía temblaba. Él tuvo éxito… había sido abrumado.

La luz dorada se oscureció lentamente, y Gu Yingbing puso sus manos detrás de su espalda en una posición relajada, como si nada hubiera pasado.

En cuestión de unas pocas respiraciones, había superado con éxito a una poderosa Bestia Celestial que vivía en las profundidades de la Montaña Celestial de la Nieve. Uno podría imaginar cuán poderosa era su aura.

En verdad, con el linaje de Gu Yingbing y su nivel actual de cultivo, normalmente no sería capaz de abrumar a una poderosa Bestia Celestial a tal velocidad. Sin embargo, se encontraba en un estado bastante inestable durante las últimas horas, con todo el odio hacia Zhou Weiqing que se acumulaba en él. Esta vez, primero quería darle un golpe rápido a Zhou Weiqing, y había estallado con un impulso de poder masivo al principio, teniendo éxito en un instante.

Tan pronto como Gu Yingbing tuvo éxito, naturalmente dirigió su mirada a Zhou Weiqing a un lado, esperando ver si realmente podía tener éxito.

Mientras lo hacía, sus ojos brillaban naturalmente con un evidente desdén y desprecio.

En comparación con la deslumbrante actuación de Gu Yingbing y su impresionante presencia y aura, la actuación de Zhou Weiqing fue muy diferente. De hecho, dio unos pasos adelante justo delante de la poderosa Bestia Celestial, colocando su palma sobre su enorme frente. La débil niebla gris alrededor de su cuerpo comenzó a brillar más, girando a su alrededor, aunque su cuerpo no tenía otros cambios obvios, ni parecía liberar su aura en lo absoluto.

Gu Yingbing sonrió fríamente. Había estado esperando todo este tiempo para que Zhou Weiqing tomara medidas. Esta primera Bestia Celestial se encontraba en el Etapa Zong de Nivel Superior, y con ese insignificante nivel de cultivo, ¿Cómo podría abrumarlo? Aun así, ¿Por qué no lanzó ese Estado de Cambio Demoníaco? Si lo usaba, al menos podría tener alguna posibilidad de éxito.

Justo cuando Gu Yingbing estaba sintiéndose un poco curioso acerca de eso, de repente, la enorme Bestia Celestial frente a Zhou Weiqing colapsó en el suelo. ¡También era un éxito para él! Aunque su cuerpo no estaba temblando, en realidad se había derrumbado encogiéndose en el suelo.

Gu Yingbing inconscientemente dirigió su mirada hacia Xue AoTian, ​​y de hecho vio una ligera sorpresa en la cara de su maestro.

En cierto modo, se podría decir que esa forma de abrumar a una Bestia celestial no tenía ningún uso en combate real. Después de todo, en cualquier pelea normal, las Bestias Celestiales nunca se pararían allí obedientemente, permitiéndote abrumarlo lentamente. Al mismo tiempo, los Maestros de Joyas Celestiales generalmente no gastarían su Energía Celestial en fortalecer su aura y presión. A pesar de todo eso, no cabe duda de que era una hazaña sorprendentemente impresionante para Zhou Weiqing, un simple Maestro de seis Joyas Celestiales, poder abrumar con éxito a una Bestia Celestial de nueve Joyas.  Aún más, ¡No le había tomado mucho más tiempo que a Gu Yingbing!

En la escena, había seis personas en total. De ellos, tres se encontraban en la Etapa Emperador Celestial y uno en la Etapa Dios Celestial. En todo el mundo, eso ya se consideraba la cúspide del poder. Sin embargo, de las cuatro potencias, de alguna manera, ninguno de ellos pudo descifrar cómo Zhou Weiqing realmente logró abrumar a la Bestia Celestial. De hecho, ni uno solo. Incluso el Señor de la Montaña ​​no fue capaz de descubrirlo. Solo Long Shiya podía adivinar vagamente cómo él logró hacerlo, pero aún no estaba seguro.

A pesar de que parecía haber logrado abrumar a esa Bestia Celestial de nueve Joyas, Zhou Weiqing todavía no emitía ningún aura o presencia poderosa. Era realmente una sensación extraña. ¿Cómo se las arregló para lograr eso?

De hecho, cuando él colocó la palma de la mano sobre la enorme ceja del pangolín, sus ojos se habían vuelto sutilmente púrpuras. Sin embargo, su espalda estaba enfrentando al grupo, y los otros no lo vieron. En cuanto a la Bestia Celestial, en el instante siguiente sintió una presencia extraña que emanaba de la palma, un aura llena de desesperación.

Frío helado, desesperación, oscuridad, tristeza, inmovilidad mortal.

Incontables emociones negativas invadieron la mente del pangolín. Una Bestia Celestial de la Etapa Zong ya tenía algo de inteligencia, pero no era rival para las Bestias Celestiales de la Etapa Rey Celestial o superiores. Tan pronto como se llenó con esas poderosas emociones negativas, su único sentimiento fue que solo podía rendirse o morir.

En esta primera ronda, Zhou Weiqing realmente había recurrido al engaño hábil. No quería revelar sus verdaderos poderes demasiado rápido. Lo que hizo era en realidad muy simple: esconder la Habilidad Devorar del Atributo Demoníaco dentro de su palma, pero no liberarla realmente. Como tal, ninguno de los otros pudo detectarlo, pero la sensación y el aura de ella aún se emitía a través de su mano hacia la cabeza de la Bestia Celestial, incluso si todavía no había tomado acción.

A medida que su nivel de cultivo había crecido, y su cuerpo había pasado por la evolución dos veces, la Habilidad Devorar también había mejorado drásticamente. Podría decirse que estaba llena de muchos usos milagrosos diferentes, y realmente estaba a la altura de su nombre como la Habilidad más fuerte de todo el Atributo Demoníaco, capaz de mejorar infinitamente. Lo que era más importante, a la Bestia Celestial se le habían dado instrucciones estrictas de no defenderse, y su estrategia de usar Devorar oculto había sido directa, pero milagrosamente efectiva.

Tan pronto como Zhou Weiqing terminó de abrumar a la Bestia Celestial frente a él, ni siquiera miró a Gu Yingbing. En cambio, retrocedió unos pasos, parado allí en una posición tranquila y relajada.

Cuando las dos Bestias Celestiales se pusieron de pie una vez más, la que enfrentó a Gu Yingbing no tuvo muchos cambios, solo un atisbo de miedo en sus ojos. Sin embargo, la que enfrentó a Zhou Weiqing tenía la cabeza baja, sin siquiera atreverse a mirarlo. Estaba arraigado en su mente que incluso si solo lo mirara, lo devoraría totalmente.