La familia Huang.

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Solo había dos personas en el gran salón del clan: Huang Yunchong y Huang Qianjun.

Cuando Huang Qianjun terminó de contarle a su padre todo lo que había sucedido ese día, no pudo evitar sentirse nervioso.

Huang Yunchong se sumió en un largo silencio. Luego, estalló en carcajadas.

Su risa satisfecha y encantada salió directamente de su corazón y resonó por toda la sala durante bastante tiempo.

Huang Qianjun se relajó al instante. Solo entonces se atrevió a preguntar: “Padre, ¿crees que lo hice bien?”.

Huang Yunchong se acercó a él y le dio un fuerte golpe en el hombro. “¿”Bien”? No lo hiciste bien, ¡no podrías haberlo hecho mejor! ¡Tienes agallas, chico! ¡Estoy sorprendido!”.

Huang Qianjun se frotó el hombro dolorido y sonrió. “Padre, solo llevo dos días siguiendo a Su Yi, pero tenías razón; ya he aprendido mucho. Siento que antes estaba desperdiciando mi vida”.

“Eso significa que has elegido a la persona adecuada a quien seguir”. Huang Yunchong no pudo evitar suspirar. “Su Yi es un talento oculto, pero tarde o temprano revelará su verdadero brillo y ascenderá a lo celestial. Si lo sigues, ¡alcanzarás la prominencia junto con él!”.

“Padre, no había pensado en nada de eso”, dijo Huang Qianjun avergonzado. “Solo creo que cuando paso tiempo con el hermano Su, a menudo siento que mis horizontes se amplían”.

Huang Qianjun se echó a reír. “¡Hijo mío, tener esa actitud es lo mejor! Los halagos ciegos solo harán que te tenga en menos estima y tú solo te rebajarás. ¡Tratarlo con sinceridad es la mejor política!”.

No podía evitar estar encantado.

Como cabeza de la familia Huang, ¿cómo podía pasar por alto la fuerza de la red de Su Yi o sus métodos trascendentales?

Sus logros en medicina hacían suspirar de admiración incluso al famoso Wu Guangbin.

Su habilidad con la espada convenció incluso a Wang Tianyang para llamarlo “gran maestro”.

¡E incluso sabía cómo exorcizar fantasmas!

A todo eso hay que añadir las poderosas figuras que lo respaldaban: Fu Shan y la marquesa de Jade Espiritual, entre otros...

¡Su Yi era como un dragón oculto! ¡Que su hijo sirviera a su lado era una bendición!

“No tienes que preocuparte por el asesinato de Wen Jieyuan. Entre Nie Beihu y Fu Shan, es imposible que Wen Changqing descubra la implicación de Su Yi”. Huang Yunchong sonrió. “Al contrario, es muy posible que la muerte de Wu Ruoqiu y su conexión con la Puerta del Portador de la Muerte impliquen a la familia Wen. Si es así, será un verdadero dolor de cabeza tanto para Wen Changqing como para el jefe de la familia Wen Changjing”.

Huang Qianjun no pudo evitar preguntar: “Padre, ¿has oído hablar de la Puerta del Portador de la Muerte?”.

Su padre hizo una pausa, como si intentara recordar algo. “Fue hace unos cien años. La Puerta del Portador de la Muerte era la facción herética más importante de la Gran Zhou, con un gran número de discípulos repartidos por toda la nación.

Sacrificaron innumerables vidas inocentes en nombre del cultivo de sus artes heréticas, provocando la ira tanto de los dioses como de los hombres. Eran universalmente despreciados.

Al final, la familia imperial del Gran Zhou envió a un grupo de inmortales terrenales de nuestra tierra santa número uno, la Secta de la Espada del Dragón Oculto, para que unieran sus fuerzas con la nobleza y los erradicaran. Tardaron tres años, pero al final, la Puerta del Portador de la Muerte cayó y desapareció en el aire.

Ese incidente se llamó “la tribulación del Portador de la Muerte”.

“Desde ese día, la Puerta del Portador de la Muerte dejó de existir. Aunque numerosos malhechores sobrevivieron y se dispersaron por todo el imperio, les resulta difícil reunirse de forma significativa.

“Hoy en día, me temo que pocas personas han oído hablar de ellos”.

Huang Qianjun finalmente lo entendió. “¿Estás diciendo que Wu Ruoqiu era un superviviente de la Tribulación del Portador de la Muerte? ¿O tal vez uno de los discípulos que quedaron?”.

“Lo más probable es que sí”. Huang Yunchong asintió y luego se rió con frialdad. “La Puerta del Portador de la Muerte lleva más de cien años desaparecida. No hay forma de saber cómo esta facción herética recuperó su vitalidad.

Pero hay una cosa que puedo afirmar con certeza: los supervivientes solo se atreven a actuar bajo el amparo de la oscuridad y a puerta cerrada, escondiéndose como ratas por miedo a ser descubiertos. Si los encontraran, todos se unirían contra ellos”.

Hizo una pausa y continuó: “Si Wen Changqing realmente conoce a Wu Ruoqiu desde hace años, eso equivale a confabularse con los supervivientes de la Puerta del Portador de la Muerte. ¡Un delito así es suficiente para atraer la desgracia sobre toda la familia Wen!”.

Los ojos de Huang Qianjun brillaron y se frotó las manos con alegría. “Padre, cuando Fu Shan se entere de esto, ¿aprovechará la oportunidad para dar una lección a la familia Wen?”.

Huang Yunchong se quedó en silencio durante un momento y luego negó con la cabeza. “En el pasado, un descubrimiento así habría supuesto un golpe enorme para la familia Wen, pero ahora es diferente”.

“¿Por qué?”.

“¡Porque la familia Wen está a punto de tener entre sus filas a un “discípulo del Gran Maestro”!”. A pesar de sí mismo, la voz de Huang Yunchong reveló un toque de envidia.

Ni siquiera él podría haber imaginado que Wen Lingzhao se ganaría el favor de Zhu Guqing tan poco tiempo después de entrar en la Academia del Origen Celestial, ¡y mucho menos que se convertiría en su discípulo!

Un estatus tan elevado era suficiente para intimidar incluso al señor de la ciudad.

Olas de emoción recorrieron el corazón de Huang Qianjun, y no podía calmarse.

¡Por fin comprendía lo importante que era realmente el título de “discípulo del Gran Maestro”!

......

La mansión del señor de la ciudad.

Cuando escuchó el informe de Nie Beihu, el erudito señor de la ciudad, Fu Shan, no pudo evitar asentir.

“Has manejado bien este incidente. Wen Changqing y su hijo sabían lo de Wu Ruoqiu, pero lo mantuvieron en secreto. ¡Han atraído la desgracia sobre toda su familia!”, dijo Fu Shan con una risa fría.

Por supuesto, él también conocía la depravada organización “la Puerta del Portador de la Muerte”.

“Señor de la ciudad, ¿aprovechamos esta oportunidad para poner a la familia Wen en su lugar?”, susurró Nie Beihu con los ojos brillantes.

“No es el momento adecuado”, respondió Fu Shan, sacudiendo la cabeza. “El joven señor Su ya se ha deshecho de Wu Ruoqiu, lo que significa que no tenemos testigos. Además, acaba de surgir un gran maestro de entre sus filas. Pase lo que pase, debemos tratarlos con respeto. No podemos actuar de forma imprudente”.

Hizo una pausa y preguntó: “¿Qué ha dicho el joven señor Su al respecto?”.

Nie Biehu se quedó paralizado. “En realidad, no ha dicho nada al respecto.

Fu Shan murmuró: “No podemos tomar este asunto en nuestras manos. Nuestro siguiente paso es simplemente buscar Gusanos Ghoul por toda la ciudad, eso es todo. Recuerda: una vez que hayas completado tu investigación, debes informar al joven señor Su.

“Sí, señor “asintió Nie Beihu.

“Bien, hay algo más”. Fu Shan recordó algo de repente. Sacó una invitación con letras doradas en relieve que claramente había preparado con antelación y se la entregó a Nie Beihu. “Esta es una invitación al Banquete de la Puerta del Dragón. Por favor, encuentra el momento para entregársela al joven señor Su”.

Nie Beihu la aceptó, pero no pudo evitar decir: “Señor, dada la actitud del joven lord Su, me temo que no querrá participar en una competición de este tipo”.

Fu Shan sonrió y negó con la cabeza. “¿Quién dice que le pido que participe? Le he invitado como invitado VIP. Podrá ver y comentar las habilidades marciales de los jóvenes junto a nosotros”.

Nie Beihu lo entendió al instante: ¡el señor de la ciudad Fu Shan planeaba usar esto como una oportunidad para tender puentes entre él y Su Yi!

De repente, un guardia se acercó e informó: “Señor de la ciudad, ¿el jefe de la familia Wen Changjing y el segundo anciano Wen Changqing han venido a solicitar una audiencia”.

“Que pasen”, dijo Fu Shan con indiferencia, y luego se rió. “Comandante Nie, ¿por qué no adivina por qué están aquí?”.

Nie Beihu también se rió y respondió sin dudar: “Sin duda han venido para absolverse de cualquier relación con la Puerta del Portador de la Muerte. Al fin y al cabo, si la acusación se mantiene, el desastre podría llegar en cualquier momento”.

Fu Shan asintió con aprobación. “Aparte de eso, lo más probable es que soliciten nuestro apoyo para llevar a Wu Ruoqiu ante la justicia. Después de todo, no pueden permitir que la muerte del hijo de Wen Changqing quede impune”.

Como era de esperar, cuando Wen Changjing y Wen Changqing llegaron y anunciaron sus intenciones, todo fue exactamente como Fu Shan había previsto.

Fu Shan ya había tomado una decisión hacía tiempo. Restauraría su reputación y cooperaría con ellos en sus esfuerzos por capturar a Wu Ruoqiu.

Esa noche, tanto la Vieja Guardia del señor de la ciudad como los guardias de la familia Wen entraron en acción, registrando la ciudad en busca de cualquier cosa sospechosa.

Esto provocó un gran revuelo en toda la ciudad y atrajo una enorme atención.

Pero nada de esto tenía que ver con Su Yi.

Sopló una brisa nocturna y la luz de la luna era tan clara como el agua.

Su Yi se encontraba en el patio y, tras practicar varias veces la técnica de refinamiento corporal del pino y la grulla, levantó Filo Mortal y comenzó a practicar sus artes con la espada.

¡Zas! ¡Zas! ¡Zas!

Su figura alta y delgada se volvió de repente etérea, como la de un Inmortal. Su espada se movía con él, dejando estelas de luz que se dispersaban como estrellas fugaces y chispas que volaban al cruzarse.

Era rápido como un rayo, una sombra fugaz.

El tranquilo cielo nocturno se ondulaba como el agua, como si la espada larga estuviera cortando la propia luz de la luna. Bajo su suave resplandor, una sombra indistinta aparecía y desaparecía, como una llama titilante.

¡Rápido! ¡Demasiado rápido!

Las espadas ilusorias se superponían y la luz de las espadas se desplazaba con gracia. Incluso el propio Su Yi parecía fugaz y etéreo, difícil de discernir.

Esto era el “Sutra de la Espada Gozosa”.

¡Al tomar posesión total de tu espíritu heroico, podías exhalar un viento alegre!

La esencia de este sutra era volverse libre y sin ataduras como el viento, sin restricciones y en todas partes a la vez, sin altura que no pudieras alcanzar ni lugar al que no pudieras ir.

El Sutra de la Espada Gozosa solo incluía seis movimientos.

“Tirar de las galaxias”, “Arrancar soles y lunas”, “Dividir montañas y mares”, “Cortar la melancolía”, “Demarcar la pureza” y “Vagar por las diez direcciones”.

La noche anterior, Su Yi había utilizado “Tirar de las galaxias” para matar a más de cien gusanos ghoul de un solo golpe.

Este era uno de los estilos de espada definitivos que Su Yi había creado en su vida pasada. Su poder absoluto y la profundidad de su Gran Dao eran suficientes para situarlo cerca de la cima, ¡incluso entre los estilos de espada del Reino Imperial!

Desgraciadamente, debido a los límites de su cultivo, el Su Yi actual solo podía practicar las posturas y los movimientos de los sutras de la espada. No podía comprender su esencia ni sus profundidades.

Sin su esencia, sin el Gran Dao ni las verdades profundas, era, en el mejor de los casos, un arte de la espada del Dao Marcial.

En el mundo del cultivo, las técnicas secretas del Dao Marcial podían dividirse según el siguiente principio básico:

Las artes eran inferiores a las leyes, y las leyes eran inferiores al Dao.

Cuando se trataba de “artes mágicas”, la “magia” era lo primero y el “arte” lo segundo.

Pero en la “magia taoísta”, el “Dao” tenía prioridad sobre la “magia”.

Los Cuatro Reinos del Dao Marcial representaban un desprendimiento gradual de la mortalidad, y las artes marciales que podían utilizar sus expertos aún no se habían liberado por completo de lo mundano. Al fin y al cabo, no eran más que “artes” o “técnicas”.

Las técnicas del Dao Marcial se clasificaban según su poder. Había cuatro clasificaciones: amarillo, profundo, tierra y celestial.

El grado amarillo era el más bajo, mientras que el celestial era el más alto.

Cada grado se subdividía a su vez en alto, medio y bajo.

Por lo general, los cultivadores del Reino de la Circulación de la Sangre podían practicar, como mucho, artes marciales de grado amarillo.

De esto se podía deducir que los cultivadores de la acumulación de Qi, el horno interior y Anāsrava correspondían a los grados profundo, tierra y celestial, respectivamente.

Incluso si le lanzaras un arte marcial de grado profundo a un cultivador del reino de la circulación de la sangre, con su cultivo, le costaría mucho tiempo darse cuenta de todo su poder.

En resumen, cuando se trataba de artes marciales, las de grado superior no siempre eran mejores. Tenían que adaptarse a tu cultivo actual.

Por supuesto, siempre había habido un puñado de genios monstruosos que rompían estas reglas y superaban los límites de su cultivo para dominar técnicas de nivel superior.

Por ejemplo, el Sutra de la Espada Gozosa que practicaba Su Yi. Aunque solo se consideraba un “arte”, si realmente intentabas evaluarlo, ¡descubrías que estaba muy por encima de las técnicas ordinarias!