Capítulo 42 — Difícil Asignación (2)

Como la sombra acompaña a la luz, los oscuros callejones también estaban dentro de los limites la brillante Ciudad Dorada. La calle de los esclavos era uno de esos callejones ocultos. Una multitud de esclavistas estaban subastando a sus esclavos justo cuando Sungchul entró en la sucia plaza. Pasó por las subastas y miró por el rabillo de sus ojos las caras de los esclavos.

Rostros familiares con el pelo negro. Formaban parte de la convocatoria a gran escala que los había traído al Otro Mundo. Sus ojos, carentes de intelecto, miraban a sus potenciales dueños con una mirada vacía, sin emociones. Sungchul dejó la aburrida casa de subastas.

Cuando Sungchul dejó la casa de subastas, una calle llena de matones, mendigos y prostitutas se abrió ante él. Buscó una tienda en particular y se dirigió hacia ella. Era una posada glamorosa con un cartel que decía: "Palacio de los Placeres". Christian estaba pasando un tiempo alegre rodeado de varias bellezas en una habitación dentro del Palacio de los Placeres.

— ¡Oh, Dios mío! ¿Mira quién es? ¡Es Sir Guerrero!

Christian, que estaba completamente borracho, saludó a Sungchul con una sonrisa resuelta en su rostro.

— Ha llegado en el momento oportuno. Por favor, siéntese aquí. ¡Hay bellezas para todos!

Empezó a regañar a las mujeres con ira falsa en su voz.

¿Qué están haciendo? ¡Cuidad de Sir Guerrero!

— Que se vayan todos.

Sungchul respondió brevemente, pero con fuerza. Christian juzgó con tacto que Sungchul no estaba de buen humor. Se apresuró a despachar a las chicas, y luego balbuceó con una actitud diferente mientras movía su mano protésica.

— Con respecto al libro del profesor Altugius... lo estoy investigando, a través de alguien conocedor al lado de Logotete.

— Ya completé ese asunto.

Sungchul levantó un vaso de alcohol sobre la mesa, y luego frunció el ceño.

— ¿No está a tu gusto?

— Ya ni siquiera puedo decir el número de escupitajos diferentes mezclados con la bebida. Parece que este establecimiento mezcla el alcohol sobrante, así que a menos que tengas agallas de acero, mantente alejado de las bebidas.

— Yo—yo lo tendré en cuenta.

— Y vine a aprender sobre otro tema.

Sungchul quería escuchar información detallada sobre la persona llamada Leonard Sanctum. Cuando se enteró por primera vez de Leonard, Leonard había sido un problema secundario, pero rápidamente se había convertido en su principal preocupación. Christian, que había estado deprimido, se revitalizó como si tuviera confianza en el tema.

— Ah, Leonard Sanctum. Sé mucho sobre ese hijo de puta.

Christian anuncio con franqueza empezando desde la conclusión.

— Ese bastardo es sospechoso de ser un seguidor de la Calamidad

— ¿Seguidor de la Calamidad?

Los ojos de Sungchul se iluminaron.

— Eso es correcto. Tiene al profesor Fregius de la escuela de Piromancia apoyándole, y Fregius ya es conocido públicamente como seguidor de la Calamidad.

— Quiero oír más.

Hacía bastante tiempo que Sungchul tenía un enemigo en la Academia de Airfruit. Ya era hora de que se metiera en sintonía con los asuntos de la escuela. Christian explicó la situación actual dentro de la Academia de Airfruit exactamente como había oído hablar de ella.

Según Christian, el rápido declive de la Academia Airfruit comenzó con la muerte del director Magnius hace tres años. Cuando el director de la escuela desapareció, Fregius y Robert Danton, ambos directores de las escuelas de Piromancia y Criomancia, así como las fuerzas más poderosas de la escuela, comenzaron a luchar para llenar la vacante.

Si un bando hubiera podido oprimir por completo al otro, habría terminado con algunos pequeños incidentes, pero era como si un tigre se hubiera enfrentado a un dragón; ambos estaban parejos. El tiempo continuó pasando a medida que su lucha crecía en una interminable rivalidad, y durante este tiempo, la capacidad de la escuela para funcionar había caído al borde del precipicio. Los rumores de que la escuela estaba llena de seguidores de la Calamidad también surgieron alrededor de la misma época. Y otro rumor, uno que decía que los seguidores de la Calamidad habían matado al director, también empezó a circular, y el verdadero asesino nunca fue encontrado.

— ... Leonard Sanctum es el principal discípulo de ese Fregius. Originalmente estaba bajo Altugius, pero después de ser expulsado bajo circunstancias dudosas, comenzó a seguir a Fregius. Como Fregius es el cabecilla del culto que reside dentro de la academia, sólo podría suceder que Leonard también debe ser un seguidor de la Calamidad.

— Ya veo"

Comprendió lo esencial de todo esto. Y de cuál era el porqué de la atmósfera de Airfruit. Él suprimió el impulso de vomitar por la simple repulsión que sentía.

— Ah. Hay otra cosa más.

Christian evaluó cuidadosamente la reacción de Sungchul.

— Escúpelo.

— No está confirmado, pero dicen que el profesor Altugius tiene una gran deuda con el profesor Fregius.

— ¿Deuda?

— Eso es correcto. No sé la razón, pero el rumor es que es una deuda astronómica. Dicen que es por eso que el profesor Altugius no puede oponerse al profesor Fregius. Bueno, al final sigue siendo sólo un rumor.

— Ya veo.

Tenía todo lo que quería. Sungchul finalmente se levantó de su asiento.

En la mesa, había una gran pila de monedas de oro que Sungchul sacó. Tomó una y lo examinó. Moneda sin acuñación — Moneda no marcada. Miró la moneda con desinterés antes de salir de la habitación.

— Disculpe, Sir Guerrero. ¿No tienes más órdenes?

— Haz una lista de todos los sospechosos de ser seguidores de la Calamidad en Airfruit.

— Seguidores de la Calamidad... Es una petición difícil, pero este Christian dedicará todo su esfuerzo a esta tarea, Sir Guerrero.

Sungchul sostuvo una gema como pago, y Christian la recibió felizmente con ambas manos.

— Envía a la ardilla si pasa algo.

— ¡Entiendo!

Al salir de la habitación, las luces decadentes se veían deslumbrantes, pero lo que realmente le molestaba no eran las luces, sino la situación que se avecinaba. No podía ver un camino fácil para obtener el conocimiento detrás de la Cosmomancia. Para poder gastar todo su esfuerzo en desentrañar un problema tan difícil, necesitaría resolver rápidamente el problema con los Seguidores de la Calamidad. Especialmente Leonard y su conspirador. Sin embargo, podría alcanzar un resultado indeseable si se acercara a esta situación precipitadamente. Los Seguidores del Culto eran un grupo vil, semejante a un reptil con muchas cabezas. Si quería golpear, necesitaba cortar todas las cabezas de una vez. De lo contrario, había una posibilidad de que pudiera ser mordido por los colmillos venenosos de una cabeza restante.

“Los conocidos seguidores de la Calamidad son Leonard y Fregius, pero seguramente habrá más de ellos escondidos en la escuela. Una persona influyente debe estar dirigiendo la secta."

Sungchul era el segador de los seguidores de la Calamidad. Sabía los métodos exactos de su enemigo. La primera regla férrea para tratar con los seguidores de la Calamidad era sospechar de todos. Altugius mismo podría ser un seguidor. Sungchul sabía que no debía dudar ni siquiera en tales circunstancias.

— ...

Al mismo tiempo, varios magos se habían reunido dentro de la Casa de los Recuerdos para realizar un ritual. La persona en el centro de la formación mágica era Sarasa Xero. Su cuerpo no estaba cubierto con la gruesa túnica de siempre, sino sólo con un ligero y delgado camisón. Ella estaba permitiendo que los hechizos que cantaban los magos se filtraran lentamente en su cuerpo.

—  ....

Altugius veía a su nieta con preocupación. Sarasa, que yacía allí con los ojos cerrados, sintió la mirada de su abuelo y le guiñó. A medida que el hechizo que la rodeaba se hacía aún más fuerte, no podía resistirse a arrugar sus delicadas cejas y apretar los ojos. Altugius frunció profundamente sus propias cejas. Un hombre que estaba de pie junto a él dijo en voz baja.

—  No necesitas preocuparte tanto. Habrá un breve momento de dolor, pero la hermosura de su nieta será preservada por toda la eternidad.

Se veía claramente la imagen de un cráneo dibujado en su túnica. Era un nigromante y conocía los métodos para detener la descomposición de los muertos. Ofrecía sus servicios a cambio de una pequeña fortuna o regalos. Hasta ahora, la aparición de Sarasa había sido mantenida por su artesanía mágica.

—  Mm.… no parece que el pago es un poco pequeño?

Como un fantasma, el nigromante sabía que el pago era insuficiente por el peso de la bolsa de monedas. Altugius sintió un sudor frío que le caía por la columna.

—  Veamos... Te faltan tres monedas enteras. ¿Puedo preguntar cuál es la razón de esto?

—  Te daré lo que me falta la próxima vez que nos encontremos.

La respuesta del nigromante fue apática. Miró insensiblemente a Altugius como si estuviera mirando un cadáver, y respondió sin escrúpulos.

— Si no recuerdo mal, esto pasó una vez antes. Confié en la reputación del profesor y pasé por alto el asunto, pero si el problema sigue apareciendo, sugiero que busque a otros nigromantes.

Desafortunadamente, los otros nigromantes no ayudarían a Altugius. Eso fue porque todos ellos estaban afiliados con la estrella en ascenso, la Academia Mágica Logotete. Estaría peleándose con los afiliados de Logotete... no.… todos los nigromantes de toda la Ciudad Dorada si las cosas se fueran en mal camino con este hombre.

—  Trataré de preparar la cantidad que falta lo antes posible.

A pesar de su propio orgullo, Altugius bajó la cabeza ante un nigromante de una escuela rival. El nigromante miró al inclinado Altugius con desinterés y luego asintió con una expresión insatisfecha.

—  Esta es la última vez. Si sigue así, nos dejará en una posición difícil.

El ritual continuó como se esperaba. La magia de la preservación sobre el cuerpo de Sarasa recobró su vigor original, y su apariencia conservaría su forma original por un corto periodo de tiempo. Sin embargo, esta sería la última vez. Altugius necesitaba dinero. Mucho dinero. Sólo había una forma de ganar una suma global en poco tiempo. Buscó a un hombre que nunca quiso volver a ver. La figura con una máscara de cuervo vestida con la túnica inmaculada del juez blanco.

El hombre, estaba mirando por una ventana al sol con las manos en la espalda, sintió que Altugius se le acercaba y se giró para hablar con voz suave.

—  ¿Finalmente decidiste salvar la escuela?

La identidad del hombre era el inquisidor hereje Magnimus Maxima. Era el hombre que había sido enviado a investigar los rumores de herejía que rodeaban a la Academia Airfruit y era conocido por recurrir a cualquier método para erradicar la herejía.

—  ...

—  ¿Vas a la escuela de Alquimia?

Bertelgia salió del bolsillo de su pecho y habló. Sungchul asintió y dijo.

—  Pasaré el tiempo en la escuela de Alquimia por los momentos.

Leonard Sanctum estaba obligado a esperarlo en la escuela de Cosmomancia para buscar pelea con él. Sungchul no evitaría tal lucha, pero tampoco había razón para que creara más problemas a través del conflicto. No sería demasiado tarde para actuar después de que la información sobre los Seguidores de la calamidad hubiera sido reunida.

—  ¡Buena elección!

Bertelgia dentro de su bolsillo tembló un poco, ella respondió radiantemente.

—  Ayer, me di cuenta de que tus hechizos se veían terriblemente débiles debido a tu falta de poder mágico, y pensé que era necesario entrenar tu poder mágico pasando mucho tiempo en la escuela de Alquimia.

—  Dudo que suba tanto.

Había logrado elevar su poder mágico desde el umbral de 130 a través del trabajo manual, conocido como síntesis, pero su tasa de crecimiento se había desplomado tras romper los 100. El crecimiento ineficaz era contrario a lo que él buscaba.

—  El crecimiento sintetizando es demasiado lento comparado con la cantidad de esfuerzo requerido.

—  Eso es lo que diría un mal estudiante.

Bertelgia respondió inmediatamente.

—  Hay niveles innatos para todos los objetos alquímicos, ¿sabes? Tu tasa de crecimiento es basura cuando sigues haciendo objetos alquímicos de bajo grado, pero conseguirás un crecimiento más rápido con objetos de alto nivel.

—  ¿De verdad?

—  ¡Sí! La desventaja es que los ingredientes son difíciles de conseguir... y también caros... pero...

Sungchul no podía obtener ingredientes que eran difíciles de encontrar, pero el costo no era un problema. Decidió intentar sintetizar con su mano mezclas alquímicas de alto nivel que Bertelgia había mencionado cuando regresó a la escuela de alquimia. Sin embargo, presenció algo completamente inesperado cuando llegó al lugar.

—  ....

La carpa de la escuela de Alquimia había desaparecido.