Capítulo 32 - Admisión (1)

—¿Quieres aprender magia?

Christian miró a Sungchul sorprendido. Sungchul asintió mientras sacaba un poco de pimienta roja y pasta de soja de la olla de barro que había tomado del almacenamiento. Luego mezcló un cucharón entero de salsa en la olla hirviendo.

—Quiero aprender magia. Usando la identidad de un novato.

—Yo... yo... ya veo.

Christian se instó a mostrarse de entendido; sabía que figuras infames como Sungchul no apreciaban que le hicieran preguntas. También se dio cuenta de que esta era una oportunidad única que se le había presentado para demostrar su valía.

—Hay muchos gremios y academias de magia dentro de Ciudad Dorada, pero no hay muchos lugares que se puedan comparar con la Academia de Magia de Airfruit.

—He oído hablar de la Academia de Magia de Airfruit.

Y mate a muchos de sus ex alumnos.

Sungchul agregó un poco de pasta de soja al agua hirviendo que contenía algunos de los pececillos del río, luego probó el condimento con una cuchara.

“Mmm. Es bueno."

También había recogido las verduras de una granja cercana y las había añadido a la olla que estaba en el fuego. Junto a ella había una caldera de piedra, que desprendía un aroma apetitoso mientras se calentaba por las llamas. Christian estaba un poco sorprendido mientras veía a Sungchul cocinar.

"Me pregunto qué clase de persona es. Llenando un precioso Almacenamiento del Alma con comida... ingredientes preciosos y raros que no se encuentran fácilmente en ninguna parte."

El Almacenamiento del Alma era un almacenamiento personal que se ganaba a través de un contrato de alma; cualquier artículo podía entrar y salir de él en cualquier momento. Sin embargo, como con la mayoría de los contratos de alma, obtener el almacenamiento de alma era una tarea difícil y requería una suma enorme de dinero. La variedad más común, Almacenamiento de alma (común), tenía 10 huecos y cuesta tanto como una propiedad situada en el centro de la ciudad. No era necesario explicar lo valioso que era un espacio de almacenamiento. Sin embargo, este hombre misterioso estaba usando un almacenamiento tan valioso para almacenar comida. No había visto ni oído que alguien hiciera lo mismo. Dejó a Christian sin habla.

Sungchul sacó otro consumible de su almacenamiento del alma - una botella de vino esmeralda y una copa de chupitos. Se sirvió un trago y tiro la botella entera a la olla.

—¡Kha!

Dejó un solo vaso de chupito y mezcló vigorosamente el estofado hirviendo con el arroz esponjoso que había preparado en la caldera de piedra sin antes probarlo.

"...."

Sungchul cerró los ojos, enamorado del sabor de su propia cocina.

[La puntuación de esta comida es... 24 puntos.]

Era una puntuación por debajo de la media, pero no le importaba. No sabía cómo funcionaba el sistema de puntuación de la Clase Chef, pero a menudo daba una baja puntuación a las cocinas coreanas tradicionales. Especialmente algo como los camarones encurtidos, nunca recibieron una puntuación superior a 10, por muy sabrosamente los hubiera preparado.

"No sé en qué gustos se basa el sistema de puntuación de la Clase Chef, pero él o ella tiene las preferencias de un niño ".

Limpió su tazón de arroz junto con la bebida destilada en su botella verde antes de hablar con Christian que había estado distanciándose.

—He oído que es difícil entrar en Airfruit. ¿Es eso cierto?

—Sí... Es un poco difícil ser admitido. Tienes que ser joven y vestirte apropiadamente. También, ellos sopesan la recomendación del referido bastante.

—¿Y el examen?

—Hacen un examen, pero no vale mucho.

—¿Es eso cierto?

Sungchul no era joven, y estaba muy mal vestido. Tampoco tenía a nadie que le diera una recomendación.

—¿No hay otro lugar? Quiero un lugar en el que sea fácil entrar que enseñe mucha magia, y que también garantice un rápido crecimiento.

Cuando Sungchul preguntó de nuevo, Christian respondió confiadamente.

—No hay en ninguna parte de Ciudad Dorada un lugar que se compare a Airfruit. Es muy fácil mentir sobre su edad, y su apariencia podría ser resuelta dándole a su cabello un buen peinado. Lo más importante es la recomendación, pero estoy preparado para encontrar a alguien para ti.

Christian sacó una gema de su ropa y sonrió. La gema era la misma que Sungchul le había dado como señal de confianza.

—Con una joya de esta calidad, debería ser pan comido preparar una recomendación. Estoy personalmente familiarizado con un profesor encargado de las admisiones. Intentaré sonsacarle con esta joya.

Christian declaró con una sonrisa confiada.

Después de oír su discurso, Sungchul sacó otra pequeña bolsa. Se oía un agradable sonido de chinchineante desde dentro.

Christian miró brevemente dentro de la bolsa y tragó en voz alta por su contenido. Estaba lleno de monedas de oro con una pureza del 99,9%.

—Úsalo.

—Esto es demasiado. Una sola gema será suficiente, pero este tipo de fortuna...

Sungchul se levantó de su asiento.

—Iré a Ciudad Dorada primero. ¿Para cuándo puedo esperar los resultados?

—Con todo esto, debería poder hacerlo en poco tiempo. Prepararé un informe esta noche.

—¿Oh sí? Estaré debajo de la Torre del Reloj cuando se ponga el sol. Dame un informe de progreso entonces.

—Entiendo.

—Lava los platos también. Asegúrate de fregar las ollas."

Sungchul dejó sus platos vacíos con Christian y luego se dirigió hacia la ciudad que estaba completamente iluminada con luces doradas.

—...

Ciudad Dorada

Era una ciudad independiente, libre del dominio de cualquier facción externa, y era también un punto de encuentro para los aventureros, lo que significaba que era el punto de partida ideal para todos los novatos convocados para comenzar su viaje. En la Ciudad Dorada se estaba celebrando un festival en honor a los recién graduados del Palacio de Convocatoria que han superado todas las pruebas. Los pocos que entraron en la ciudad fueron recibidos en la entrada por una multitud acogedora.

—¡Por las nuevas sangres de Otro Mundo!

—Por aquí., les damos la bienvenida a Otro Mundo.

Las mujeres que llevaban guirnaldas con hermosas sonrisas en sus rostros guiaron a los convocados hacia la plaza. Los convocados, totalmente ajenos al proceso, fueron conducidos de las manos por la gente de la ciudad a la plaza para recibir una sorprendente gran acogida en medio de un público.

Se proporcionó comida y alcohol a los convocados mientras se interpretaba una música y bailes llamativos en varios lugares de la plaza. La gente llamaba a esto la Celebración de los Inicios. Celebró el momento memorable en que las plántulas llegarían del mundo moderno para superar las pruebas del Palacio De Convocatoria y darían sus primeros pasos hacia el Otro Mundo. A este evento asistieron no sólo los ciudadanos de la Ciudad Dorada, sino también personas de todas las clases, incluyendo: aventureros, clérigos y hasta figuras que poseían suficiente poder e influencia para sacudir al Otro Mundo.

El objetivo obvio era la bienvenida de los novatos convocados para felicitarlos de todo corazón, pero la verdadera razón era observarlos y reclutarlos. Dimitri Mediov, el favorito del poderoso Imperio Humano situado en el centro del continente, vino con ese propósito en mente. Observó perezosamente a los convocados quienes estaban socializando raudamente mientras comían y bebían de todo corazón.

—¿Cómo está? ¿Alguien que valga la pena?

Un hombre de mediana edad con una bata llamativa se sentó junto a Dimitri y entabló una conversación. Se llamaba Armuk Bakr. Era el Almirante de la enorme Flota de Batalla Aliada "Tormenta", que era una de las tres fuerzas más poderosas de las regiones del norte. Dos individuos, cada uno con la reputación suficiente como para dejar a los demás sin aliento, se habían reunido aquí. Varias personas habían centrado su atención en ellos y muchos susurros habían empezado a tejer fantasías sobre el propósito de estos personajes gigantescos al venir aquí, pero la gente en la que todo esto giraba alrededor no les daba ninguna importancia.

—Meh, no veo a nadie útil.

Dimitri agitó su copa de vino mientras fruncía el ceño.

—¿No lo sabías? El Palacio de Convocatoria dejó de escupir piedras preciosas desde que los' preseleccionados' se convirtieron en práctica común

Armuk asintió de acuerdo con la retórica de Dimitri, pero además señaló a alguien. Era Jungshik Chun.

—Resulta que de la Plaza Blanche se consiguió sacar algo decente. Es una raza rara que tiene el sentido de la batalla, la habilidad y el espíritu de lucha.

—¿Y qué? Ya lo ha tomado el Reino Antiguo. Probablemente se lo llevarán después de que acabe el festival para comer algo de polvo con ellos en ese palacio desgastado.

—Probablemente tenga razón, ¿pero sabías...?

Armuk irrumpió en una sonrisa sabionda e intento probar suerte. Dimitri inclinó su copa con indiferencia, pero las últimas palabras de Armuk habían conseguido despertar su curiosidad.

—Dicen que los monumentos de los Siete Héroes han desaparecido. No sólo uno, sino tres de ellos.

—Eso no puede ser verdad. ¿No se determinó que los memoriales restantes eran imposibles de completar después de numerosos intentos realizados durante varios miles de años?

El cuerpo de Dimitri tembló ante sus recuerdos del juicio de Vestiare.

—Fue traumático investigar la locura de esa mujer. Ninguna persona cuerda pudo haberlo superado. Yup. De ninguna manera.

Sin embargo, Armuk parecía estar diciendo la verdad.

—Ese solía ser el caso.

Hablaba claramente en pasado.

—...

Dimitri miró fijamente al suelo vacío antes de tomar un trago de su copa de vino.

—¿Es eso realmente cierto?

—¿Por qué iba a mentir?

Los ojos de Dimitri se volvieron hacia los novatos convocados, que ahora estaban allí parados disfrutando del festival.

—Entonces, ¿estás diciendo que entre los convocados reunidos aquí, hay tres individuos que lograron obtener los grimorios secretos de los Siete Héroes? Alguien que incluso se las arregló para ver la horrible pesadilla de Vestiare...

—Podría ser sólo uno. No podemos ignorar la posibilidad de que sea un regresor.

—Un regresor...

Como los otros en el poder, Dimitri no pensaba muy bien de los regresores. Era una regla infalible de la realidad que aquellos que fracasaron una vez, volverían a fracasar de nuevo. Armuk observó sus expresiones y continuó hablando.

—Y.… hay otro rumor, que dice que uno de los novatos convocados no visitó la Ciudad Dorada y en lugar de eso decidió desaparecer en las Tierras Desérticas del Este. Este también tuvo un resultado relativamente bueno en el Palacio de Convocatoria. ¿No es un patrón típico de los regresores?

—No puede ser un regresor. Los Siete Héroes no son tan generosos como para aceptar a esos patéticos bastardos que ya han fracasado una vez. Aunque fuera un regresor, no podría haber ido lejos. Los cazadores de la orden religiosa no lo dejarían en paz.

Dimitri levemente agitó la cabeza y miró a una mujer. Era una mujer asiática muy hermosa. Llamó a un sirviente para hallar su nombre.

—Dice que se llama Sunghae Bae. Una sobrina de un alto caballero de la Orden de los Caballeros de Sangre de Hierro.

Sus labios se rizaron formando una sonrisa después de escuchar el nombre de la Orden de los Caballeros de Sangre de Hierro.

—La Orden de los Caballeros de la Sangre de Hierro? Creí que ya habían caído. Supongo que consiguieron reunir algo de dinero para engrasar el Palacio de Convocatoria.

Perdió el interés y miró a otra persona.

—¿Qué es eso? ¿Trata de verse como una especie de vagabundo?

Había visto a un hombre desaliñado vestido con ropa militar sudada y un par de pantalones vaqueros. Dimitri le señaló e hizo una broma.

—Ese tipo parece que hubiera estado dando vueltas por el Palacio de Convocatoria él solo durante los últimos 10 años. Mira su ropa.

—Ahora que lo miro, su ropa me resulta familiar. Espera un poco.

De repente, Armuk apretó su puño. Apareció una llama azul y giró alrededor de sus puños antes de que apareciera un libro. Volteó las páginas, hojeándolas pacientemente antes de dar un pequeño suspiro.

—No es un don nadie, pero su nombre es aún más inquietante.

—¿Cómo se llama?

—Es un nombre que no debo pronunciar en voz alta. Tiene el mismo nombre que el enemigo del mundo.

—¡Ja! Es un nombre aterrador, pero su aspecto no parece coincidir con él. Y su físico tampoco se vea muy impresionante

—Podría ser simplemente alguien con el mismo nombre. Hay muchos coreanos con Kim como nombre de pila.

—¿Vamos a “ver” a nuestro hombre? ¿Tiene las estadísticas del enemigo del mundo?

Los ojos de Dimitri se iluminaron.

Varias runas mágicas en miniatura aparecieron dentro de sus ojos mientras giraban como una rueda antes de transmitirle la información que él quería delante de él.

[Kim Sungchul Estadísticas & Clase]

[Estado]

Fuerza 24 Destreza 25

Resistencia 26 Poder mágico 32

Intuición 25 Resistencia mágica 21

Resolución 18 Carisma 18

Suerte 18

[clase]

Clase Principal - Mago (Común)

Sub Clase - Alquimista (Raro)

Una risa con tono burlón salió de la boca de Dimitri.

—Sólo su nombre es Kim Sungchul. No hay forma de que ese tipo venga a este lugar. Toda la fuerza militar de Otro Mundo sería desplegada si apareciera.

El hombre de la camiseta gastada, tomaba sorbos de alcohol con una expresión en blanco, no mostraba ninguna señal de estar al tanto de los poderosos hombres que lo estaban observando.

Una vez terminado el festival, esperó a su invitado bajo la enorme torre del reloj que llevaba el tiempo de la ciudad. No necesito esperar mucho tiempo.

—Sir Guerrero.

Christian Ashwood. El hombre, había cambiado su túnica de piel de perro a una túnica negra brillante, llegó con el rostro ruborizado de la vergüenza.

—¿Los resultados?

—He asegurado su admisión. Aunque costo la mitad de tu oro. Sin embargo...

Sus palabras se quedaron en el aire, haciendo que Sungchul explotara severamente.

—Habla

—Hay un mal rumor que se extiende por la academia.

—¿Qué clase de rumor?

Christian tragó profundamente antes de responder.

—Los seguidores de la Calamidad. La gente dice que están activos en la academia. Hizo mi trabajo más fácil por eso, pero...

—Los seguidores de la Calamidad...

Sungchul repitió el nombre como si lo estuviera saboreando.

Los magos vendrían naturalmente a estudiar la fuente de la magia, a la que llamaban Sabiduría. Si esta búsqueda de la sabiduría se detuviera en un punto razonable, sería beneficioso tanto para los magos mismos como para el Otro Mundo en su conjunto. Pero había algunos que sacrificaban todo por su investigación: la fortuna, la carne y hasta sus vidas. Los Magos no muertos, como los liches, fueron ejemplos excelentes de esto. Sin embargo, había quienes iban más allá de este punto: ellos eran los partidarios de la Calamidad.

Estos fanáticos creían que la clave de los verdaderos secretos de la magia estaba en las Calamidades de voluntad divina. Los magos que Sungchul casualmente masacraba eran estos mismos seguidores de Calamidad. Christian luchó por continuar su historia mientras mostraba una expresión llena de dolor.

—Esta era mi escuela... pero puede que ya no sea adecuada para ir. Muertes y maldiciones, traiciones y conspiraciones siniestras asolan cualquier lugar en el que los seguidores de Calamidad estén activos.

Fue en ese momento que trató de observar cuidadosamente la cara de Sungchul. Inesperadamente, Sungchul sonreía.

—Eso me sentaría bien.