Capítulo 2259 – Dispuesto a no admitir su culpa hasta la muerte

Luego, el Maestro del Valle Nubes del Ocaso llevó a Chu Feng, Xu Yiyi y al Anciano Ning Shuang a la entrada del palacio donde el maestro de Li Rui y los demás Ancianos de la Aplicación de la Ley estaban arrodillados.

Debido al hecho de que el Maestro del Valle Nubes del Ocaso se había ido para encontrar a Xu Yiyi y al Anciano Ning Shuang a través de una salida lateral, el maestro de Li Rui y los demás no sabían que Xu Yiyi y el Anciano Ning Shuang estaban presentes de antemano.

Como tal, una vez que vieron a Xu Yiyi y al Anciano Ning Shuang, esos Ancianos de la Aplicación de la Ley revelaron inmediatamente expresiones abatidas. Se sentían como si estuvieran a punto de enfrentar una catástrofe inminente.

Sin embargo, el maestro de Li Rui estaba relativamente tranquilo. Por lo menos, no reveló demasiada conciencia culpable.

A partir de esto, se pudo ver que él era realmente un individuo astuto y circunspecto.

–Jefe Anciano Tuoba, te he venerado y respetado como el Anciano Jefe de la División de Aplicación de la Ley en vano.

–Realmente nunca esperé que, por tu propio rencor personal, invertirías lo correcto y lo incorrecto, en blanco y negro, para planear la muerte de Chu Feng–, Xu Yiyi denunció furiosamente al maestro de Li Rui.

–Xu Yiyi, como discípulo, ¿en verdad te atreves a hablar con el Jefe de la División de Aplicación de la Ley de esa manera? ¡¿Incluso tienes antigüedad en tus ojos?!– Ante la crítica de Xu Yiyi, el maestro de Li Rui se enfureció y comenzó a criticar a Xu Yiyi.

–Anciano Tuoba, ¿todavía vas a fingir?–, Preguntó fríamente el Maestro del Valle Nubes del Ocaso.

–Señor Maestro del Valle, este subordinado es lento, y no entiende lo que he hecho mal–, dijo el maestro de Li Rui con una expresión perpleja.

–Por ahora, no analizaré el hecho de que has ocultado deliberadamente el hecho de que el pequeño amigo Chu Feng es un Espiritista Mundial de Capa Inmortal.

–Tampoco analizaré el hecho de que usaste un método especial para sellar el habla y el poder espiritual del pequeño amigo Chu Feng.

–Sin embargo, sabías claramente que Chu Luyang había ido en contra de la orden del Anciano Su Jingrui primero, y recibió una muerte merecida como tal.

–Sin embargo, todavía trajiste al pequeño amigo Chu Feng aquí y me pediste que ordenara su ejecución. Esto es algo por lo que no puedo dejarte ir–, dijo el Maestro del Valle Nubes del Ocaso de una manera extremadamente furiosa.

– ¿Qué? ¿Chu Luyang fue en contra de las órdenes del Anciano Su primero?

– ¿Qué? ¿El Anciano Su ordenó a Chu Luyang que hiciera algo?

– ¿Exactamente qué está pasando aquí? Señor Maestro del Valle, este subordinado no entiende–, dijo el maestro de Li Rui con una expresión perpleja.

– ¿No entiende? ¿Cómo no pudiste entender? Cuando mi maestro advirtió a Chu Luyang, sus subordinados aquí también estaban presentes. ¿Estás tratando de decir que no te informaron este asunto?–. Xu Yiyi señaló a los Ancianos de la Aplicación de la Ley.

– ¿Qué? En realidad había tal cosa? ¿Por qué no me lo informaron?– El maestro de Li Rui tenía una expresión furiosa cuando se volvió para reprender a sus subordinados con enojo. Actuaba como si realmente no supiera sobre esas cosas.

–Señor Jefe Anciano, realmente no lo sabíamos–. Sin embargo, esos ancianos realmente comenzaron a sacudir la cabeza repetidamente ante el interrogatorio del maestro de Li Rui.

Además, con expresiones confusas, se volvieron hacia Xu Yiyi y le preguntaron: –Yiyi, ¿qué le dijo el Anciano Su a Chu Luyang? ¿Por qué no lo sabemos? Nos has confundido por completo aquí.

– ¡Todos ustedes! ¡¿Todos fingen estar confundidos?!– Al ver que se habían negado a admitir sus faltas, Xu Yiyi estaba tan furiosa que su cuerpo comenzó a temblar.

–No, no pretendemos estar confundidos, realmente no sabemos qué está pasando. Yiyi, por algunas cosas, no debes hacer comentarios irresponsables–, dijeron los Ancianos de la Aplicación de la Ley con expresiones inocentes en sus rostros.

–Bueno, muy bueno. Parece que ya ha planeado esto en privado, y ha decidido negarse a admitir sus fallas–. Justo en ese momento, el Maestro del Valle Nubes del Ocaso se rió a carcajadas. Simplemente, su risa era muy fría.

Era tan fría que hizo que los corazones de los Ancianos de la Aplicación de la Ley temblaran y que sus expresiones cambiaran.

Comenzaron a entrar en pánico, pero a pesar de que sus corazones ya estaban en pánico, aún no modificaron sus comentarios anteriores. A partir de esto, se pudo ver que ya habían decidido con el maestro de Li Rui no estar dispuestos a admitir su culpa hasta la muerte.

Aunque este método fue muy tonto, sintieron que era la única forma de salir de esta situación.

Si se negaban a admitir sus faltas, aún habría una oportunidad para respirar. Sin embargo, si admitieran sus faltas ahora, probablemente recibirían castigos muy severos.

Si bien el maestro de Li Rui podría no ser asesinado, ya que era muy importante e indispensable en el Valle Nubes del Ocaso, el resto de los Ancianos de la Aplicación de la Ley no necesariamente podrían escapar de la muerte.

Esa fue la razón por la cual se atrevieron a fingir como si no supieran nada ante los ojos del Maestro del Valle Nubes del Ocaso. No fue porque fueran atrevidos o audaces. Más bien, estaban luchando por la oportunidad de sobrevivir.

–Señor Maestro del Valle, no nos atreveremos a engañarte. Realmente no sabemos qué sucedió entre el Anciano Su y Chu Luyang–. Esos ancianos de las fuerzas del orden público se arrodillaron y hablaron al unísono.

– ¿Todos deberían saber que engañarme es un delito capital? Sin embargo, he decidido darles una oportunidad a todos.

–Por lo tanto, les preguntaré a todos nuevamente. Cuando el Anciano Su Jingrui le dijo a Chu Luyang que no podía volver a atacar a la Sociedad Mariposa Roja, que sería una ofensa capital si lo hiciera, ¿lo oyeron todos?–, Preguntó el Maestro del Valle Nubes del Ocaso.

–Señor Maestro del Valle, realmente no lo escuchamos–, dijeron los ancianos de las fuerzas del orden mientras temblaban.

Tenían miedo, mucho miedo. Sin embargo, a pesar de que se sentían extremadamente asustados, estaban decididos a insistir en no saber sobre ese asunto.

La razón de esto fue porque ya no había camino de regreso para ellos ahora.

–Señor Maestro del Valle, nuestra División de Aplicación de la Ley siempre ha sido leal y dedicado al Valle Nubes del Ocaso. Nunca te hemos engañado una vez.

–Yiyi, Ning Shaung, ¿exactamente qué tipo de beneficio recibieron ustedes dos de Chu Feng por acusarme erróneamente a mí y a mis subordinados de esta manera?–. Justo en ese momento, el maestro de Li Rui habló con una expresión furiosa.

Este viejo astuto no solo estaba discutiendo, sino que incluso comenzó a hacer falsos contra cargos.

– ¡¿Tú, tú, en realidad estás diciendo que te estamos acusando erróneamente?!–. Al escuchar esas palabras, Xu Yiyi se enfureció aún más. Por lo tanto, miró al Maestro del Valle Nubes del Ocaso y dijo: –Señor Maestro del Valle, por favor defienda la justicia.

–Señor Maestro del Valle, por favor defienda la justicia–, el maestro de Li Rui y los otros Ancianos de la Aplicación de la Ley también se atrevieron a solicitar que el Maestro del Valle Nubes del Ocaso defienda la justicia.

–Muy bien.

–Lo que sucedió exactamente se sabrá una vez que el Anciano Su Jingrui salga de su entrenamiento a puerta cerrada.

–También sabré quién exactamente entre ustedes me ha engañado en ese momento. ¡En cuanto a los que me han engañado, definitivamente no los dejaré ir fácilmente!–. Gritó el Maestro del Valle Nubes del Ocaso con furia.

–Sin embargo, incluso si realmente no supieran que el Anciano Su Jingrui advirtió a Chu Luyang que no se le permitía atacar a la Sociedad Mariposa Roja, sigue siendo verdad que todos han ocultado el hecho de que el pequeño amigo Chu Feng es un Espiritista Mundial Capa Inmortal.

–También es cierto que todos ustedes usaron métodos especiales para sellar el discurso del pequeño amigo Chu Feng, haciéndolo incapaz de hablar. Por lo tanto, usted ha admitido indirectamente los cargos criminales falsos que todos le han presentado–, dijo el Maestro del Valle Nubes del Ocaso.

–Señor Maestro del Valle, nos ha acusado erróneamente. Nunca supe que Chu Feng era un Espiritista Mundial de Capa Inmortal, ni utilicé ningún método especial para que no pudiera hablar–, el maestro de Li Rui todavía no estaba dispuesto a admitir su culpa hasta la muerte.

– ¿Todavía te atreves a rehusar admitir tus fechorías?–. Justo en ese momento, el Maestro del Valle Nubes del Ocaso agitó su manga y directamente tiró al maestro de Li Rui al suelo. Rodó por el suelo durante varios bucles antes de detenerse finalmente.

En ese momento, el maestro de Li Rui estaba sangrando por las siete aberturas en su cabeza. Su tez se había puesto pálida y su aura extremadamente débil. Había sido gravemente herido.

Furioso. El Maestro del Valle Nubes del Ocaso estaba realmente furioso. De lo contrario, no habría herido tanto al maestro de Li Rui.

A pesar de que ya había herido gravemente al maestro de Li Rui, el Maestro del Valle Nubes del Ocaso todavía estaba furioso. Señaló al maestro de Li Rui y dijo: –El testigo está presente, y la evidencia es definitiva. Sin embargo, ¿te atreves a seguir negándote a admitir tus crímenes? Tuoba Shangshui, ¿realmente pensaste que no me atrevería a matarte?

A pesar de que el maestro de Li Rui ya estaba gravemente herido, aún se apresuró a gatear y se arrodilló ante el Maestro del Valle Nubes del Ocaso nuevamente. Se inclinó, pero no se atrevió a decir una palabra más.

Solo su viejo cuerpo temblaba de miedo.