Capítulo 133: La legendaria maldición

"Después de la escena que el joven maestro Jun ha causado aquí, los otros príncipes no se atreverán a molestarlo y la Familia Jun será capaz de continuar pacíficamente." Parece que todo este plan fue arreglado por Jun Zhantian. Pero esta situación también ha dado lugar a un problema adicional, un gran problema." Fang Bowen frunció el ceño.

"Por favor, explique, profesor." La cara del Segundo Príncipe ya empezaba a parecer más sombría, y parecía que ya había hecho su propia suposición.

“Su Alteza lo dijo usted mismo.” Fang Bowen suspiró en voz alta: "Pronto, todo el mundo sabrá que Su Alteza y Jun Moxie han tenido una discusión pública, y que Su Alteza fue humillado públicamente por la arrogancia del joven maestro Jun. Si algún daño llega al joven maestro Jun en este momento... entonces, Su Alteza será indudablemente la primera en ser sospechosa por ello. Creo firmemente que los enemigos de Su Alteza no se perderán esta oportunidad de incriminarlo".

“¿Qué es esta tontería?” el Segundo Príncipe estaba repentinamente furioso: "A pesar de toda la humillación que he enfrentado hoy, ¿todavía tendré que protegerlo?"

"Todo depende de su elección Su Alteza, si Su Alteza no tiene miedo de la ira de Jun Zhantian, entonces simplemente puede ignorar esta posibilidad". Fang Bowen dijo lentamente.

"..." El Segundo Príncipe permaneció en silencio.

[¿No tiene miedo? Eso es un eufemismo.... Así muchos hombres perdieron la vida el otro día.... La última vez que Jun Zhantian perdió su temperamento, eliminó casi un tercio de la corte imperial. Si él perdió su temperamento en mí…. No puedo darle una razón para saquear mi palacio....].

¡Maldita sea ese hijo de perra!” el Segundo Príncipe se sintió perjudicado hasta el punto de morir. ¡Este hombre se estaba convirtiendo en una legendaria maldición para él! No había sido más que una mala suerte para el príncipe; primero había insultado al segundo príncipe, y luego Jun Moxie también había insultado a Lady Yue'er, y también había hecho de ella un enemigo público...

Una delicada silueta miraba al Segundo Príncipe desde la parte superior del pabellón Ni Chang mientras el Segundo Príncipe continuaba caminando a lo largo del camino. "Si ese es el caso, entonces deberías haber pensado dos veces antes de arreglar esta reunión. Jun Moxie me humilló públicamente hoy y ni siquiera trataste de detenerlo. Si soy tan mala para tu reputación, ¿entonces por qué trataste de perseguirme para empezar? Yo soy Yue'er, ¿cómo pudiste dejar que esto me suceda?"

Una luz de plata astuta brilló en sus ojos mientras Lady Yue'er se mordía los labios: "Si no haces nada ya que tienes miedo del poder militar de Jun Zhantian, entonces tomaré este asunto en mis propias manos. No permitiré que Jun Moxie se salga con esto; ¡él morirá sin un entierro apropiado!"

A medida que la noche se volvía cada vez más oscura, Lady Yue'er abrió su mano y soltó una paloma. La paloma revoloteó sus alas unas cuantas veces, y luego voló en el aire.

Alrededor de una esquina oscura distante, una figura vestida de negro comenzó a correr a la velocidad del rayo y aterrizó rápidamente en un tejado cercano. El hombre soltó una red de color oscuro y la abrió en el aire, y la red de color oscuro se fundió gradualmente en el cielo oscuro. La paloma que acababa de despegar del pabellón Ni Chang cayó dentro de la red.

El hombre vestido negro recogió el cuerpo de la paloma y rápidamente se retiró en las sombras...

El pelotón del Segundo Príncipe llegó a su residencia por la noche.

Otra paloma negra fue liberada en el cielo nocturno, que rápidamente desapareció también. Cheng Decao estaba junto a la ventana con una sonrisa en su rostro y murmuró: "Jun Moxie, no me importa el poder de su familia, ya que usted me ha insultado hoy, no permitiré que exista; todo el mundo pensará que has sido asesinado por uno de los príncipes... ¿quién sospechará de mí?, lo que es más, ni siquiera tengo la fuerza para hacerte daño, ¿verdad? Ha ha ha…”

¡Este genio auto-proclamado fue un completo loco para sacar un trato contra el sicario Jun Moxie!

Jun Moxie no había perdido ningún detalle hasta ahora, y ya había colocado a sus sabuesos alrededor de la residencia del Segundo Príncipe.

¡Todo funcionaba de acuerdo con el plan de Jun Moxie hasta ahora!

Jun Moxie se veía un poco deprimido sentado dentro de su palanquín tambaleante. Estaba tan acostumbrado a viajar por sus propios pies, que sentarse dentro de su palanquín no era más que una tortura para él.

[Este tipo de cosas no son buenas para los sicarios. Tanto rebotar y balancearse puede hacer la vida de alguien miserable; ¿por qué algunas personas consideran viajar en estos palanquines un símbolo de estatus? Si tuviera algún tipo de condición basada en el corazón, entonces tantos balbuceos ya me hubieran enviado directamente a las puertas del infierno.]

A pesar de que Jun Moxie estaba tratando de luchar contra el impulso de salir del palanquín hasta llegar a la Residencia Jun, la velocidad extraordinariamente lenta y el constante balanceo de su paseo era más de lo que podía tolerar. Incapaz de soportarlo, el joven maestro Jun estaba casi a punto de abrir la boca y ordenar a sus sirvientes que se detuvieran, cuando oyó repentinamente un sonido «whoosh», y un pequeño objeto blanco saltó a su palanquín, hooo ', y frotó su cuerpo contra los brazos de Jun Moxie. Jun Moxie reaccionó rápidamente, y agarró al animal desconocido por su cuello, y lo recogió. Mientras miraba al pequeño animal, se dio cuenta de que estaba sosteniendo a la Bestia Alto Xuan Qi de Dugu Xiaoyi; el cachorro pantera alas plateadas.

Jun Moxie miró atentamente las pequeñas extremidades de la pequeña criatura de una manera extraña ... [¿Cómo podría algo tan pequeño ser tan rápido? ¿Y qué tan pronto se convertirá en un adulto? ¡Yo subestimé este animal... él es verdaderamente digno de ser llamado una bestia de alto nivel Xuan Qi!]

El cachorro pantera no podía moverse, ya que estaba suspendido en el aire de las pieles del cuello, y por lo tanto abrió la boca para quejarse, mientras que sus miembros caían impotentes. Su bello par de ojos miraban a Jun Moxie con una mirada confusa en ellos, incapaz de entender por qué un hombre al que tanto le gustaba lo trataría de una manera tan cruda.

Jun Moxie inmediatamente evaluó que Dugu Xiaoyi debería estar en algún lugar de los alrededores; ¿de qué otra manera esta joven bestia Xuan sería capaz de oler su olor?

Extendió el dedo y metió la minúscula nariz de la diminuta criatura, y susurró ferozmente: “Por favor, no me sigas, si sigues siguiéndome, tu dueña me causará muchos problemas porque toda su familia vendrá después de mí. ¿Sabes en cuántos problemas estaré entonces? Por favor, detén esto, por favor." Su intención inicial era asustar al animal, pero no tenía ni idea de por qué había terminado mendigando con piedad.

A pesar de que la pantera alas de hierro era una bestia de alto nivel Xuan, que todavía estaba acostumbrada a estar alrededor de los seres humanos. Pero aún no era capaz de interpretar el significado de las palabras de Jun Moxie, y tensó su cuello mientras miraba a Jun Moxie con una mirada aún más desconcertada en sus ojos ahora. Jun Moxie soltó al diminuto cachorro, que repentinamente tarareó dos veces, y miró a Jun Moxie con una alegre mirada en los ojos.

Inesperadamente, el pequeño cachorro saltó y aterrizó directamente en los brazos de Jun Moxie; tomó dos respiraciones profundas y arqueó su diminuto cuello unas cuantas veces hasta que encontró un lugar cómodo para descansar la cabeza sobre el pecho de Jun Moxie. Luego, abrió su rosada boca, bostezó y sus hermosos ojos lentamente comenzaron a entrecerrase mientras él lentamente se quedaba dormido...

[Bien, él no puede ser culpado por esto... Soy un hombre grande con un pecho grande, ¡y los pechos grandes son generalmente bastante cómodos para dormir! ¡Pero ahora estoy en muchos problemas!]

"Pequeño Blanco, ¿dónde estás pequeño blanco? Pequeño blanco..." oyó un sonido crujiente, y pudo darse cuenta de que la fuente estaba lo suficientemente ansiosa como para romperse a llorar en cualquier momento. Dugu Xiaoyi había estado tratando a este joven cachorro como su bebé, y desde que la joven Bestia Xuan había desaparecido de repente, su mente estaba obviamente en un estado de completo caos.

Jun Moxie suspiró ante su destino; incluso si esto parecía como un cuento del destino de algún folclore, era más como... ¡Atracción desafortunada en sus ojos!

Una voz fría hizo eco frente al palanquín: “Pido a la gente de dentro que salga amablemente.” Esta voz fría y aburrida pertenecía a Ye Guhan.

Era un experto Xuan Cielo, así que obviamente había sido capaz de detectar al cachorro mientras saltaba al palanquín de Jun Moxie después de saltar de los brazos de Dugu Xiaoyi. Aunque la bestia era muy pequeña en tamaño, el experto Xuan Cielo estaba seguro de que estaba dentro del palanquín.

Después de un rato, la voz de Jun Moxie sonó perezosamente desde dentro del palanquín: "Realmente... Hay tanta gente dentro de la Ciudad Tianxiang, ¿pero este joven maestro está destinado a chocar constantemente contigo?"

Ambos, de repente, hablaron al unísono después de oír su voz: "¡Jun Moxie!"

Aunque hablaron al mismo tiempo, pero lo hicieron para expresar emociones completamente diferentes.

Mientras que la voz de Ye Guhan estaba llena de desprecio e ira, el sonido de Dugu Xiaoyi estaba lleno de una sensación de alegría.

Anteriormente, Dugu Xiao Yi había seguido con entusiasmo a la Princesa Ling Meng al palacio imperial, y se había quedado allí varios días sin regresar a la residencia de la Familia Dugu. Pero si la hija mayor de la casa permanece lejos de la familia durante tanto tiempo sin previo aviso, entonces la familia está obligada a preocuparse, por lo que Dugu Xiaoyi se despidió de la princesa Ling Meng, y partió para la casa de su familia. A pesar de que la princesa deseaba retenerla en el palacio con una intención pura en su corazón, era lo suficientemente inteligente como para entender que podría ser incorrecto.

La princesa estaba bastante enojada al saber que el joven maestro Jun también estaba en los alrededores en el momento en que Dugu Xiao Yi debía irse para su residencia. Incapaz de detener a la hija mayor de la Familia Dugu, le había pedido a Ye Guhan que la acompañara de regreso a su residencia como precaución contra cualquier persona con malas intenciones.

¿Quién habría sabido que la pequeña bestia Xuan de Dugu Xiaoyi, de repente, capturaría el olor familiar de un hombre que le gustaba, y saltaría de sus brazos, y aterrizaría dentro de un palanquín sin dejar un solo rastro detrás de él, dejando su propietario ansioso y preocupado hasta el punto de morir?

Escuchando la voz de Jun Moxie desde dentro del palanquín le explicó claramente la situación: [No es de extrañar que Pequeño Blanco reaccionara así... Recuerdo que, realmente le gustó Jun Moxie el último hombre que conocio... así que no es muy sorprendente que persiga al joven maestro Jun.]

Jun Moxie saltó impotente de su palanquín con el cachorro Bestia Xuan en sus brazos. Dugu Xiaoyi vio su rostro, y se quedó sin palabras en lugar de saludarlo alegremente.

Observando a su Pequeño Blanco descansando pacíficamente en sus brazos, y poco dispuesto a abrir los ojos para ver el rostro de su maestro, la hizo sentir un poco envidiosa, ya que claramente indicaba que la joven criatura se sentía muy tranquila y cómoda, casi como si estuviera en el lugar más cómodo del planeta. Pero al ver el cansado rostro de Jun Moxie despertó una sensación de tristeza en su corazón...

Estos sentimientos eran bastante extraños y nuevos para la hija mayor de la Damilia Dugu, y permaneció en silencio durante largo tiempo, incapaz de reaccionar ante la situación; que era una cosa muy rara dada su carácter.