Capítulo 271: ¡Ustedes tres son muy estúpidas!

El cuerpo entero de la Princesa Ling Meng comenzó a temblar. La expresión diabólica de Jun Moxie la había asustado. Tanto es así que ni siquiera se atrevió a llorar.

"De hecho, ¡no trataste de escapar cuando Ye Guhan sufrió heridas graves! ¡De hecho, es muy bueno de tu parte! ¡Eres muy formidable! Su Alteza, usted está muy apegado a él. ¡Estabas dispuesta a hacer mucho por tu Tío Ye! ¡Esto es tan conmovedor! ¡Te admiro mucho!"

Jun Moxie rechinó los dientes y asintió ferozmente. Luego dejó escapar un rugido estremecedor, "¡Ni siquiera pensaste en las otras personas contigo! ¡No pensaste en tus dos buenas hermanas! Te volviste tan emocional que no podrías escapar sin importar nada. ¿Pero crees que te abandonarían y escaparían? Podrías haberles causado un gran daño; de hecho, ¡podrías haberlas matado! ¡Las tres habrían sido asesinadas y convertidas en una pila de carne podrida si la intención de los asaltantes hubiera sido asesinarla en lugar de secuestrarla! ¡Su belleza no hubiera sido de mucha utilidad entonces! Tu muerte no habría sido una tragedia si fueras el objetivo del enemigo. Sin embargo, ¡lograste involucrar a tus dos inocentes hermanas también! ¿Cómo te hubieras sentido si algo les hubiera sucedido?”

"Pero..." La Princesa Ling Meng sintió un presentimiento profundo en su corazón. Ella también se sintió algo avergonzada. Por lo tanto, ella no se atrevió a encontrarse con los ojos de Jun Moxie. Además, ni siquiera se atrevió a mirar a sus hermanas que estaban a su lado.

"¡¿Pero qué?!" La voz y la expresión de Jun Moxie fueron muy severas, "Sin embargo, y cuando Ye Guhan yacía en el suelo... al borde de la muerte. ¿Qué estaba pasando en tu cabeza entonces? ¡Es una lógica confusa!”

"Digamos que Ye Guhan no muere mientras te defiende... Y estás a salvo; entonces no habría habido problemas en esa situación. De hecho, si Ye Guhan hubiera muerto por protegerte, ¡hubiera sido una muerte voluntaria! Pero puso su vida en peligro para que escaparas: ¡tu escape sería el precio de su vida! Pero no solo no escapaste... ¡permaneciste inmóvil! ¡Hubieras hecho que su muerte no tuviera sentido! ¡Hubiera sido en vano! Había cambiado su vida para darte la oportunidad de escapar. ¡Pero hubiera muerto una muerte insatisfecha por ti!”

"¡Mujer estúpida! ¿Pero cómo vas a poder entender? ¡Tu cabeza está llena de tofu! Huh. Eres estúpida... ¡y más allá de la ayuda! ¿Creíste que tu cerebro no es tan malo? Y hasta alardeaste de tu inteligencia. Sentiste que eres algo a lo que no debería menospreciar... ¡Bah!" Sintió deleite y una sensación de logro al intimidarla. Esto era natural, ya que la Princesa había pasado por alto y desdeñaba su existencia.

"¡Y a ti!" Señaló a Dugu Xiaoyi, "El cuchillo que te di, ¿te parece muy divertido atarlo al brazo?... ¿Por qué no lo atas dentro de la entrepierna de tus pantalones? ¿No sabes que la ley del Cuchillo te queda bien? ¿Y usarla con este cuchillo puede dar excelentes resultados? ¿Pero cómo es atarla al brazo un uso? ¿Tu cabeza ha sido pateada por un burro?”

Jun Moxie jadeaba pesadamente, pero continuó regañando: "¿Por qué te resistes a hacerlo? ¿Qué más piensas hacer con eso? ¡Es un cuchillo! ¿Para qué se usa esto? Los cuchillos no se usan como adornos; ni se usan como decoraciones. Los cuchillos se usan para cortar personas; ¡para cortar enemigos y matar! ¿Qué lograrías al atarlo a tu brazo? Lo forjé con tanto esfuerzo. ¿No crees que tu sudor y olor cotidianos podrían corroer este cuchillo desde que lo ataste? ¿Sabes cuánto esfuerzo, tiempo y energía mental y física me llevó a forjar este hermoso cuchillo? ¡Que desperdicio!”

"¡Estúpida! ¡Eres incorregiblemente estúpida también! Si su cabeza está llena de tofu... ¡la tuya debe estar inundada de agua! ¡Alguien tiene que sacudir esa tontería de tu cabeza!" Jun Moxie señaló a Dugu Xiaoyi. Él casi balbuceaba en su cara. La cara de Dugu Xiaoyi se puso pálida mientras hacía un esfuerzo por evadir su saliva.

"Además, su objetivo... ¡no eras tú! La Princesa Ling Meng no estaba dispuesta a escapar. Pero ustedes dos no se apresuraron en el camino para buscar refuerzos. ¡Simplemente la miraste tontamente hasta que llegó el enemigo! ¡Los enemigos eran expertos Xuan Cielo! ¿Entiendes lo que es un Xuan Cielo? Son como mendigos declarando su intención de rebelarse contra el Rey; ¡eso es exactamente lo que son para ellos! El enemigo podría haber roto sus débiles cuerpos con la punta de sus dedos. ¡Podrían haberlas aplastado a ustedes dos al presionar sus dedos! ¡No! ¡Ni siquiera hubiera quedad una pieza de sus cuerpos! Eran como una hormiga tratando de sacudir un árbol. La única alabanza que les puedo dar a ustedes dos es por... ¡haber insultado a esos enemigos nivel Xuan Cielo con sus acciones!"

"¡Eres la segunda mujer estúpida de esta pandilla!" Jun Moxie respiró profundamente cuando llegó a su conclusión.

"¡Y tu! ¿Crees que eres muy inteligente, verdad?" Jun Moxie tampoco iba a dejar a Sun Xiaomei. "No entendieron... ¿pero tu eres estúpida también? ¿tampoco pudiste captarlo? ¿Sabes que deberías haber escapado... y no disfrutar de la vista de la calle? ¿No se suponía que huirías por tu vida? Y esa estúpida ruta de escape que elegiste era algo que solo elegiría una persona sin cerebro. No habrías encontrado muchos caminos serpenteantes por delante. Pero había casas a ambos lados de la carretera. Y habría habido muchos cuya puerta de entrada habría estado conectada a una puerta trasera. Eso te hubiera llevado a un callejón en la parte posterior. Eso hubiera sido más seguro, ¿verdad? ¡Sin embargo, inesperadamente, te precipitaste al camino principal! ¿Crees que tu velocidad es más rápida que la de un experto Xuan Cielo?”

"Sé que tu aspecto no es bueno. Por lo tanto, te comportas de una manera no convencional. Miras los problemas. ¡Miras a las personas y ves las cosas de manera incisiva! Por lo tanto, ¡eres muy arrogante en este aspecto! ¡Pero tu orgullo vale un pedo! ¿Cómo es útil? Nunca te miras a ti misma. Solo escudriñas a los demás; ¡y la mayor parte de eso es falso también! ¿Tienes un cerebro? Xiaoyi no es muy lógica con respecto a estos asuntos y la mente de la Princesa Ling Meng estaba muy confusa. Tú eras la única persona con cabeza clara allí. Entonces, ¿no podrías simplemente noquear a la Princesa y luego huir con ella? Estoy seguro de que podrías haber escapado con facilidad si hubieras noqueado a esa estúpida mujer desde el principio. E incluso Ye Guhan podría haber escapado si lo hubieras hecho. Dime; ¿Estoy en lo cierto o estoy equivocado?”

"¡Nunca creas que puedes entender a los demás sin comprenderte a ti misma primero!" Jun Moxie golpeó la mesa. "¡Y por ningún medio pienses que eres tan lista como para comprender las intenciones de todos! ¿Crees que puedes entender la psicología de un hombre y las debilidades de una mujer? ¡Déjame decirte! Los pensamientos de hombres y mujeres son suyos, y nadie querría que alguien más los controle. ¡Nunca peses la personalidad de otra persona con tu lastimosa sabiduría! ¡De todos modos parece que aún te falta mucho! Incluso un pequeño "cualquiera" puede ser lo suficientemente peligroso como para matar a alguien. ¡Y lo que le pasó a Ye Guhan es un gran ejemplo de eso!”

"Está bien ser estúpido por tu cuenta. Sin embargo, nunca debes involucrar a nadie más en ello. ¡Especialmente a los que están cerca de ti!", Rugió Jun Moxie.

Entonces, Jun Moxie dejó de llover maldiciones. Su saliva estaba en todas partes. Sin embargo, su corazón estaba contento. Había estado regañando a una princesa y a las hijas de grandes familias como si estuviera dando una conferencia a su nieto.

"Pero... es como si dijeras que... estamos en el nivel Xuan Oro... lejos del nivel Xuan Cielo. Además, tuvimos que resolver todo a pesar de la enorme e inconquistable diferencia en nuestras fuerzas. Y solo podemos depender de nosotros mismos. Entonces, ¿cómo podría hacerlo?" Sun Xiaomei resopló mientras señalaba su nariz. Ella había enderezado su cuello y había disparado hacia atrás; algo resentida. Esta pequeña niña no era como la Princesa y Xiaoyi. Ella era muy orgullosa. Por lo tanto, ella respondió.

"¿Crees que la fuerza cae del cielo?" Un sonido de resoplido salió de la nariz de Jun Moxie. "¿No te disfrazas y te adornas todos los días en lugar de entrenar tu fuerza tiránica? ¿Crees que puedes tener una fuerza excepcional cuando te tratas como un florero delicado y protegido? ¿Conoces el costo de convertirte en un verdadero experto? ¡una persona realmente fuerte? Eso es obviamente algo de lo que ustedes jóvenes no se darán cuenta. ¡Uno debe poner toda su vida y su alma para alcanzar incluso el entendimiento más ordinario!"

Jun Moxie sonrió, "Son muy jóvenes, ¡y ya son expertos Xuan Oro! De hecho, incluso pueden ser consideradas como extraordinarios genios entre la generación más joven. Muchas personas considerarán su hazaña de alcanzar el nivel Xuan Oro a una edad tan joven como ¡una notable! Y admito que es verdad. El cultivo Xuan Qi está en contra del orden natural de las cosas. Y caminar este camino problemático significa gastar mucha riqueza y energía. Y la parte más importante es renunciar al mundo. ¡Estarás en conflicto con tu cuerpo todos los días! Sin embargo, ¡estás en la mejor edad durante toda la vida de una mujer! ¡Siempre ha habido muchas mujeres talentosas en existencia! Sin embargo, solo las mujeres que renunciaron a su buen aspecto y juventud y tuvieron éxito en convertirse en expertos sin igual. Son pocas entre todos estos años, ¡desde la antigüedad hasta ahora!”

"¡Digo estas cosas para asegurarme de que no cometas errores estúpidos como lo hiciste hoy! Tu fuerza es débil. ¡Y estoy seguro de que un incidente como el de hoy volverá a suceder! Pero estoy seguro de que nadie quiere que el sacrificio de Ye Guhan pierda su valor. ¿Entiendes mis palabras?"

Jun Moxie tarareó por un momento. Había perdido interés en expresar sus sentimientos. Jun Moxie se acercó a la silla y se inclinó hacia ella. Entonces, él cerró los ojos. Luego dijo con impaciencia: "No discutas la verdad que te digo. ¡Es inutil! Podría ser útil si estás segura de que puedes usar esa lógica de mierda para convencer al enemigo. Si no... entonces cállate. Este joven maestro ha estado trabajando duro durante demasiado tiempo; él necesita descansar."

Las tres mujeres se sonrojaron de ira al principio. Entonces, se dieron cuenta de que las palabras de Jun Moxie eran muy razonables a pesar de que eran extremadamente difíciles de escuchar. No pudieron evitar colgar sus cabezas y reflexionar sobre sus palabras.

Dugu Xiaoyi tamborileó su boca y se giró. Luego resopló y lanzó una mirada altanera. Arrugó la nariz y murmuró: "¡Eres tan irracional! ¡Humph! Cada vez que me irrito... Saco ese cuchillo... parece que te estoy mirando... "

Entonces, de repente, oyeron el sonido de pesados pasos que venían del exterior. Al principio, parecía que un monstruo del tamaño de un elefante estaba pisoteando salvajemente en su dirección. La velocidad de su progreso fue aterradora. No fue terriblemente rápido, fue terriblemente lento.

Las tres mujeres se miraron. Ellas jadearon. Entonces, escucharon una voz llamando desde afuera, "digo Joven Maestro... ¡me hiciste correr sobre mi pierna rota! Pobre de mí... Debí sudar alrededor de 5 kg en este viaje. ¿Qué era tan importante que exigió estos medicamentos con tanta urgencia? Además, ¿por qué era necesario que los trajera personalmente? ¡Merezco un regalo especial para esto! ¡Vamos al Lago Neblina Espiritual esta tarde!”

"Tch Tch... solo piensa en esas mujeres en polvo y delicadas, hermano! ¡Mi boca se desvanece al pensar en ellas! Desearía buscar varias de ellas, y luego probaré su "Si no pagas, no lo haces, pero es un truco". De hecho, el Joven Maestro es un verdadero genio. Este hermanito te admira; él se inclina frente a ti!"

No hace falta decir quién era el recién llegado...

El color de las caras de las mujeres dentro de la habitación cambió a la de la base de una caldera. Era oscuro y aterrador. La cara de las tres mujeres mostraba la misma intención al unísono: ¡asesinato!

¡Fue una intención muy opresiva!

El Joven Maestro de la Familia Tang arrastró su enorme barriga hasta el umbral de la puerta mientras jadeaba. Fue acompañado con los sonidos de quejas y halagos. Luego pasó el gas muy fuerte. Apenas pudo sostener su estómago con sus manos cuando finalmente entró. De repente, se sorprendió al ver a las tres mujeres jóvenes mirándole ferozmente. Se tragó un bocado de saliva y dejo caer si estómago. Luego, miró alrededor del lugar de una manera distraída y dejó escapar un grito espeluznante: "¡AAH!... "

Soltó las medicinas y las derramó en el suelo. Luego, rápidamente se echó a correr y se fue.