Capítulo 127: Esta es una Road Movie

En el lado norte de la capital, en una llanura desierta que estaba lejos de la carretera principal, un carruaje avanzaba raudamente.

En el carruaje estaban sentados Michelle y Benjamín.

Antes de esto, después de salir de la capital, los dos se dirigían hacia el lago Perseo. Pero después de caminar un rato, Michelle notó algo. Su expresión cambió ligeramente. Se arrodilló y puso su oreja en el suelo.

Viendo esto, Benjamín se asustó un poco.

"¿Qué pasa?"

Michelle no dijo nada, pero le hizo un gesto para que se quedara callado, señalándole que no hiciera ruido. Después de eso, se quedó pegada al suelo y frunció el ceño, como si se concentrara en escuchar algo que venía de muy lejos.

¿Qué coño pasa...?

Benjamín sabía lo que Michelle estaba haciendo. Por lo tanto, él no molesto a Michelle, y en vez de eso se quedó a un lado, esperando en silencio los resultados.

Después de cinco minutos.

"Los santos caballeros están en nuestra busca, son enormes en número, puedo oírlos galopar." Michelle se levantó y dijo:" Pero sus movimientos están dispersados, no puedo decir en realidad hacia dónde se dirigen........ Además, muchos de ellos se dirigen hacia la capital".

Al oír esto, Benjamín frunció el ceño.

La habilidad de escuchar el suelo-ya había leído sobre ella antes en alguna parte. Ahora mismo, Michelle podía oír el galope de los caballos de los santos caballeros. Esto significaba que su distancia respecto de los hombres de la Iglesia no era demasiada.

Qué problemático...

El lugar donde se encontraban ahora estaba bastante aislado, pero el lado norte de la capital no era tan grande. Si sus oponentes montaran a caballo -además del tamaño de sus números- eventualmente rastrearían toda el área.

Si los santos caballeros están haciendo una búsqueda generalizada, ¿hasta dónde podrían huir con sus dos piernas?

Tienen que escapar del área antes de que los santos caballeros los encuentren. Si no, la Iglesia los atraparía. El problema ahora era el tiempo.

Benjamín de repente tuvo una idea y lo dijo en voz alta:"¿Por qué no robar unos caballos?".

Michelle miró a Benjamín y levantó una ceja. Tras pensarlo un poco, asintió de acuerdo.

Esto llevó a la escena actual, estando ellos sentados en un carruaje tirado por caballos.

Lo que pretendían era robar dos caballos rápidos. Si los montaban, podían irse lejos, muy lejos. Pero, dos caballos veloces eran difíciles de encontrar - no podían simplemente ir a robar los caballos de los santos caballeros.

Al mismo tiempo, para evitar ser vistos por los santos caballeros, no podían volver a la carretera principal, sólo podían patrullar los alrededores. Si Michelle escuchaba su galope, se daban la vuelta e iban en otra dirección.

Con este método, y mucho esfuerzo, consiguieron finalmente tropezar con un carruaje.

El carruaje era sencillo y bastante deteriorado. Pero al mismo tiempo, el carruaje estaba vacío, aparcado al borde de la carretera, y no llevaba ni una sola persona. Los caballos que estaban atados al carruaje ya estaban aburridos hasta el punto de que soplaban aire por la nariz.

En ese momento, Michelle caminó cuidadosamente hacia el carruaje. Después de asegurarse de que no tenía nada de malo, miró a su alrededor para revisar su entorno, se arrodilló, clavó su oreja en el suelo y escuchó el sonido de los movimientos de los santos caballeros.

Después de un rato, se levantó, frunció el ceño y dijo:" Todos los sonidos han desaparecido. Esos santos caballeros parecen haber regresado a la capital. Pero, no sólo el nuevo grupo de santos caballeros - incluso aquellos que dejaron la capital junto con nosotros, el sonido de sus caballos también ha desaparecido".

Al oír esto, Benjamín sintió que algo estaba terriblemente mal.

Sin motivo alguno, había un carruaje de caballos vacío al borde del camino, los santos caballeros habían regresado a la ciudad, los viajeros no se veían por ningún lado.... si no se hubiera asegurado ya de la naturaleza de este mundo, se habría creído estar en un panorama sobrenatural.

¿Adónde fue la gente? ¿Podría ser que lloviera oro en la capital, haciéndoles cambiar de opinión?

Pensando en esa tontería, miró al suelo alrededor del carruaje.

El suelo estaba sucio y había huellas de cascos por todas partes. Era obvio que los caballos que estaban aquí no eran los únicos que estaban atados a este carruaje. No sólo eso, la parte importante era que en algunas de las huellas, él podía ver una pequeña cruz.

"Hacer patrones en las herraduras es un acto innecesario, sólo la Iglesia haría tal cosa."

Pero las huellas con cruces se detuvieron por aquí. Mirando la dirección, la gente probablemente se dio la vuelta aquí y regresó por su ruta original.

"Por lo que parece, el dueño de este carruaje fue arrastrado de vuelta por los santos caballeros." Después de dilucidarlo, Benjamín llegó a esta conclusión.

Michelle asintió de acuerda.

Pero incluso después de darse cuenta de los orígenes del carruaje, no les ayudó a adivinar cuál era el motivo de la Iglesia. ¿La Iglesia vino a capturar a toda esta gente? ¿Por qué? Si no querían que nadie se fuera, ¿por qué iban a abrir las puertas para dejarlos salir?

Es extraño...

Además, él era a quien la Iglesia quería. Los santos caballeros capturando gente inocente, sin hacer ningún esfuerzo para llevar a cabo una búsqueda adecuada, ¿qué podría significar eso?

Benjamín seguía confundido, pero a Michelle ya no le importaba mucho. Caminó unos pasos por delante, tomó las riendas y abordó el carruaje.

"No importa lo que la Iglesia piense hacer, el carruaje de caballos ya está aquí, no tiene sentido rechazarlo." Miró dentro y se giró:" Sube a bordo, este carruaje de caballos es seguro. Tenemos que alejarnos de la capital lo antes posible".

Así, Benjamín abordó también el carruaje de caballos.

En el carruaje, los dos no se dirigieron directamente al lago Perseo. En cambio, tomaron el camino largo para evitar ser vistos por la Iglesia.

Su camino se dirigía hacia el oeste.

A unos diez kilómetros al oeste de la capital, las llanuras conducían a una zona montañosa. Las montañas no eran altas, la mayoría de ellas eran pequeñas colinas, pero había dos más altas que las demás. Entre ellas, la más conocida era el Monte Norte, que fue una vez la base de operaciones de la pandilla más infame de la tierra: Los Bandidos del Monte Norte.

Los bandidos se habían ido hace mucho tiempo, y su jefe que antes había logrado escapar ya había sido asesinado por Benjamín - con un solo disparo. El Monte Norte debería ser ahora una montaña vacía y abandonada.

Por supuesto, no planeaban esconderse allí. Si iban allí, tenían que desviarse demasiado de su curso, y eso podría llevar a posibilidades más desagradables. Sólo querían tomar prestada la ventaja geográfica que les proporcionaba para escapar de la Iglesia. Después de eso, poco a poco podrían llegar a Pearl Valley.

Usando el paso subterráneo, llegarían al Valle de las Armadas Caídas, entonces podrían escapar del Reino de Helius.

El tiempo pasó lentamente y la capital quedó cada vez más atrás. En el camino, todo se mantuvo en paz. No tuvieron ningún encuentro desafortunado y finalmente la sensación de peligro inminente desapareció poco a poco. Benjamín incluso entró en su propia dimensión de conciencia para seguir trabajando en la reparación de la grieta.

Lentamente, el tiempo transcurrió hasta alcanzar la tarde, la luz del cielo se atenuó gradualmente y los árboles circundantes alargaron sus sombras.

Después de pasar algún tiempo haciendo las reparaciones, Benjamín se sintió mentalmente exhausto y dejó su dimensión de conciencia, listo para descansar.

En el carruaje, miró al entorno que le era totalmente extraño. De repente, se volvió y miró a Michelle.

Afortunadamente, sentados en el carruaje, no tenían nada que hacer. Era hora de que las preguntas en su corazón fueran contestadas.

"Inicialmente, actuaste misteriosamente, como si tuvieras un motivo ulterior. Pero ahora, ¿por qué siento que honestamente quieres ayudarme?" Dijo mientras fruncía el seño