Capitulo 138: La aldea junto al lago Perseo

-¿Voy en la dirección correcta?

Benjamín dejo de caminar una vez llego a un pueblito bullicioso y le hizo una pregunta al Sistema.

Se enteró de que la Iglesia no lo estaba buscando activamente por la información suministrada por Howl- Por eso se quedó un par de días más en el valle, ayudando a Nina y al resto a cuidar el campo de papas antes de partir.

El tiempo apremiaba, era mejor no perderlo holgazaneando.

Por supuesto, su Energía Espiritual no estaba lo suficientemente recuperada como para partir de inmediato, ya que en el camino se podían encontrar fácilmente infinidad de peligros. Tomo sus precauciones y le pregunto a Howl como llegar al pueblo más cercano para comprar unas armas antes de salir.

No podía usar su magia temporalmente, pero si tiene un arma de fuego, al menos podría defenderse.

La respuesta de Howl le dejo una grata sorpresa. Le dijo a Benjamín que había una cueva escondida debajo del Monte Norte. El líder de la banda de ladrones del Monte Norte deseaba adquirir grandes cantidades de armas de juego y munición, y las guardaba dentro de la cueva. Después de que la Iglesia aniquilo a los ladrones, estos objetos fueron dejados atrás en la cueva.

En cuanto a Howl, él no sabe disparar de un arma de juego y no tenía interés en aprender. Por lo tanto, le dijo la ubicación exacta de la cueva a Benjamín.

La ubicación de la cueva no estaba demasiado alejada del Monte Norte, ya que solo le llevo medio día rastrearla. Allí  descubrió las armas antes mencionadas.

No había demasiado, pero era más que suficiente.

Benjamín estaba agradecido por ser resuministrado con algunas habilidades de combate. Después de obtener las pistolas, se dirigió al bosque del otro extremo del valle y activo la interfaz de tiro. Consiguio cazar algunos siervos e incluso a un oso,  quienes regalo al trio como agradecimiento.

El trio estaba muy feliz por recibir el regalo, pero rápidamente su humor se desinflo al enterarse de la decisión tomada por Benjamín

Durante su partida, incluso llegaron a ir a la entrada del valle para despedirse de Benjamín.

-¿De verdad te vas?- Sandy se estaba familiarizando con Benjamín después de conocerlo por estos días. Ella se enfurruño: -Tus habilidades para disparar son increíbles. Si te quedaras con nosotros, nadie pasaría hambre.

Benjamín soltó una carcajada y se arrodillo ante ella,  -Pero tengo cosas más importantes que hacer.

Sandy asintió aunque no lo comprendía del todo.

Ta no dijo nada más, solo se escondió detrás de Nina, intentando secarse las lágrimas en secreto.

-Por favor, no estés triste, nunca puedes saberlo…Quizás nos volvamos a ver en el futuro.- Benjamín se sentía impotente, solo podía pensar en cómo consolarla.

Nina le dio una palmadita en la cabeza a Sandy y se volvió hacia Benjamín.

-¿Por qué pierdes el tiempo? Solo vete si quieres irte, el viento está muy fuerte, ¿Qué pasa si nos enfermamos por esto? ¿Eres bastante más mayor que nosotras y no tienes suficiente sentido común?

-…

Respiro hondo, se levantó y se dirigió hacia el lago Perseo.

Michelle ya le había comentado en detalle sobre el camino subterráneo desde el Lago de Perseo hasta el Valle de las Armadas Caídas[1]. Había dejado que el Sistema recordase eso. Benjamín podría usar este pasadizo para alcanzar rápidamente las fronteras del Reino de Helius para ir al extranjero.

Benjamín no estaba seguro como era todo fuera de las fronteras del reino. Lo que si sabía era que la magia dentro del Reino estaba en un estado desolador.

No importaba si la Iglesia renunciara o no a perseguir a Benjamín. La Iglesia siempre será la Iglesia, mientras que un Mago será toda su vida un Mago. Si se quedaba dentro del reino, lo máximo que podría ascender, era convertirse en algo parecido a lo que son los magos de la Academia del Silencio, viviendo entre las sombres. A menos que poseyera un poder lo suficientemente grande como para derrocar a la Iglesia, no tendría sentido quedarse aquí.

Ahora bien, si se fuera al extranjero, las cosas podrían ser diferentes.

Por lo menos, fuera de Helius, la magia no estaba prohibida, La influencia de la iglesia podría ser grande, más aun así era difícil expandirse por el mundo. Eso era igual que en su mundo anterior, donde el lema de “Expulsemos a los manchúes, regeneremos China, comenzó en Honolulu, Hawái”.

También recordó que las últimas palabras antes de la “muerte” de Michelle fueron: “Si quieres sobrevivir, ve a Ferelden y busca allí a una persona llamada Morris. Él es mi maestro…”

NO deseaba decir que era para continuar la última voluntad de Michelle, sino más bien, sentía curiosidad por el maestro de Michelle.

Para una persona ser capaz de atraer a un Santo caballero y convertirlo en un mago, además de enseñarle a alguien como, Michelle, ¿Qué clase de persona seria este tal Morris? Benjamín sintió que si realmente quería escapar de aquí, tendría que ir a conocer a esta persona.

Por supuesto, todo esto bajo es supuesto de que tendría éxito en huir del Reino de Helius. ¿Y qué tal si se encontrara con algún accidente en la carretera o hiciera algún movimiento en falso? Entonces toda su planificación sería en vano.

Al igual que ahora, después de unos cinco días a pie, Benjamín siguió la dirección dada por el Sistema y llego a una aldea cerca del lago de Perseo; incluso se las arregló para matar a unos lobos que lo atacaron en el camino.

Sin embargo, no pudo evitar tener una extraña sensación al juzgar al “pueblo”.

¿No hay demasiada gente por aquí?

Casas construidas en varias formas y tamaños, multitudes caminando en todas direcciones, calles llenas de numerosos sonidos, hechas en ladrillo. También había todo tipo de caras entre la multitud, t se podía observar que no faltaba gente rica entre ella. No parecía encajar en el perfil de un “pueblo”.

Y por eso hizo esa misma pregunta al Sistema.

El Sistema respondió con toda seguridad: -Esta es la mejor ruta a seguir después de pasar por la recopilación de datos de más de mil mapas, el posicionamiento automático de la IA y el cálculo sofisticado del Sistema. No puede haber ningún error. Después de este pueblo, nos encontraremos con el lago de Perseo.

-…Esta bien

Ya que el Sistema esta tan seguro de sí mismo no puede equivocarse.

Este pueblo llamado “Pearl/Perla” era en realidad todo lo contrario a lo que era un pueblo en el Reino de Helius. Este pueblo de aquí era un lugar muy pintoresco y el turismo atrajo un gran desarrollo comercial. Sin embargo, a juzgar por la situación actual, Benjamín estimo que todo esto podría deberse a la “plaga”.

Muchos de los que escaparon de la capital, buscaron refugio aquí, eso explica la población.

Benjamín levanto su mirada y se rasco la cara mientras pensaba en ello.

Era de noche, no había luz del día. Si pasara del pueblo y siguiera por su camino, sería muy probable que fuera atacado por animales salvajes. Además, la comida seca que Nina le empaco ya se había terminado. Ya no tenía más suministros de comida.

¿Y si no hubiese nada en el pasadizo secreto y el camino era demasiado extenso? Si solo necesitara agua, podría soportar su dolor de cabeza para invocar unos finos pedazos de hielo para calmar su sed. Pero con la comida, no puede hacer nada,

Realmente tenía que pensar alguna solución.

La posibilidad de ser reconocido era muy baja, ya que el efecto de las hierbas que Michelle le hizo comer aún no se había desvanecido completamente, además su pelo estaba muy enredado después de la larga caminada. El aspecto actual de Benjamín, aunque ya no parecía un albino, tampoco parecía ser un noble.

Pues bien, no debería de haber nadie que pudiera reconocerlo, independiente de su identidad como Benjamín Lithur o como el albino en fuga.  Después de dudar por un instante,  se unió a la multitud y se dirigió a una panadería no tan llena.

Su intención era preguntarle si podía usar la piel de lobo que había matado en su viaje para cambiarla por condimentos secos. Sin embargo, en el momento en que mostro la piel de los lobos, el tendero cambio su expresión por el de una mirada de desinterés.

-Eres el cazador con las peores artesanías que he visto en mi vida.

Al final, Benjamín cambio cuatro trozos de piel de lobo, por la mitad de un poco de pan seco y se le pidió que abandonara la panadería. Herido por tal evento, delante de la panadería, se quedó mirando el pan que no era más grande que la palma de su mano mientras lloraba por dentro. ¿Quién hubiese pensado que un día iba a tener que esforzarse por apenas comer?

Mientras luchaba por  pensar en algún plan, escucho una voz familiar.

-…Quiero volver a la capital imperial. ¿Aún no ha terminado la plaga? ¿Por qué insistió padre en que me quedase en un lugar como este?

Después de confirmarlo con el Sistema, Benjamín no tenía duda alguna de que esta voz pertenecía a Dick Fulner.

¿El llego hasta aquí?

De hecho, la mayoría de los que huyeron de la capital eran campesinos. Los nobles quienes tenían mejor acceso a la información decidieron quedarse. Los fulner eran en su mayor parte, nobles de la capital, ¿Por qué vinieron a refugiarse aquí?

Habiendo dicho eso…

Espontáneamente, una idea entro en la cabeza de Benjamín, quien ahora, dejo salir una sonrisa malvada.

[1] Se me olvido que nombre le puse a este Valle XD, díganme en comentarios si se acuerdan.