⚠️ Traducción hecha por fans. Sin derechos sobre el contenido original.
Capítulo 153: Lección de Magia
Augustine, Fuerte afinidad elemento Tierra. Domina los hechizos, lanza de tierra, bola de fuego, muralla de tierra, armadura de roca.
Varys, fuerte energía espiritual. Domina los hechizos: bola de fuego, bola de agua, cuchilla de viento, lanza de tierra, Rompehielos y otras habilidades a nivel principiante.
Hannah, sin particularidades. Hechizos dominados: lavado de cara, refrigeración, horneado de alta temperatura.
-Frank, no puede pronunciar correctamente los hechizos debido a su fuerte acento sureño. El único hechizo que conoce es Agua de Vida.
“…”
Benjamín finalmente entendió lo que la jefa quiso decir cuando dijo “no tengas demasiadas expectativas” cuando esta presento a los veinte magos. Benjamín quedo llevándose las manos a su frente y permaneció en silencio por un buen rato.
¿No tengas demasiadas expectativas? En lugar de eso deberías de haberme dicho, ¡No tengas expectativas!
Era más que evidente por sus aspectos, que no tendrían mucho poder mágico. Sin embargo, no importa lo mucho que Benjamín los mirase, ¡jamás se imaginó que su nivel sería tan bajo!
Aparte de ser pocos, la mayoría no sabía ni tres hechizos, y todos ellos eran de nivel principiante. Eras excepcional para ellos si podías lanar uno o dos hechizos de nivel principiante.
¡NO era de extrañar…! ¡No es que nunca pensaran en abrirse paso a través de la puerta!¡La verdad era que su destreza de combate no podía equipararse a la de un guardia normal!
- En realidad, no teníamos más medios. – La voz de la jefa sonaba llena de impotencia, Intercambiamos hechizos unos con otros y nos enseñamos como lanzarlos. Sin embargo, todos nos convertimos en magos por casualidad. No sabíamos mucho y tampoco sabíamos cómo enseñar a los demás.
Benjamín permaneció en silencio por bastante tiempo, pero después de aceptar este hecho, agito su cabeza y sonrió: - Esta bien, debe de haber un camino.
La jefa parecía confundida, ¿Por dónde?
Benjamín no contesto inmediatamente. En lugar de ello, decidió meter un poco de suspense en su respuesta: - Lo veras mañana. Convoca a todos para una reunión para mañana. Tengo un anuncio importante para ti.
En estos momentos, era hasta bueno que sus habilidades fueran débiles. Esto en otras palabras, una habilidad débil significaba que había un mayor margen para mejorar, y, por lo tanto, ¡tendrían un mayor potencial futuro para la magia! Si desde el principio, fueran fuertes, no habría necesidad de que Benjamín estuviese aquí.
- … Muy bien. – La jefa asintió a pesar de seguir viéndose estupefacta.
Ya era tarde por la noche, Benjamín salió de la sastrería para volver a la taberna. La casa de Augustine estaba conectada a la taberna por la parte de atrás. Este arreglo un cuarto de invitados para Benjamín. Benjamín se acostó en su cama, mas no durmió.
Ahora, él había entrado a su espacio de Conciencia junto al Sistema, para descubrir el mejor método de cultivo para los magos normales.
Benjamín sabia claramente que el problema principal de estos magos no era la falta de hechizos, pues entre todos habían más de veinte magos en el grupo, y si querían podían formar una enciclopedia de hechizos de nivel principiante si todos ellos intercambiaban sus hechizos entre sí. Su mayor problema es que no tenían ni idea de cómo entrenar su energía espiritual y su afinidad con los elementos. Por lo tanto, aun si conocían los hechizos, eran incapaces de aprenderlos.
Esa era la mayor desventaja para los magos autodidactas.
Benjamín se basó en la información obtenida de “Artes divinos 101” sobre la zona de oración y la cresta de luz sagrada que leyó a escondidas cuando descubrió la magia por primera vez. Encontró su propio camino en la cultivación de esa manera. A día de hoy, seguía agradecido con “Artes Divinos 101” porque sin él, nunca sería capaz de resumir un método de “Meditación” para estos magos.
- Aunque no leí los detalles de esas partes, aun así, tú los memorizaste, ¿verdad? Pregunto Benjamín mientras sostenía la cuenta que era similar a un huevo de pescado en su mano. Era imposible para Benjamín dejar de intentar pellizcarlos mientras seguía hablando: -Parecía haber muchas maneras distintas de entrenar la energía espiritual y a afinidad con los elementos descritos en “Artes Divinos 101”.
-Si… dijo el Sistema débilmente, perdiendo ya toda fe en la humanidad.
Benjamín era capaz de adoptar las formas de entrenar las artes divinas en entrenamiento mágico debido al descubrimiento de que las Artes Divinas y la magia, eran esencialmente lo mismo. No había duda alguna de que los métodos de cultivo de las artes divinas eran muchísimo más avanzadas que los métodos que poseen los magos a día de hoy, debido a los largos años de pillaje y desarrollo de la Iglesia.
A través de la recapitulación del Sistema y la meticulosa selección de Benjamín, encontraron el método de meditación más adecuado para el grupo de magos.
Ellos utilizarían los elementos mágicos dispersos en el ambiente, absorbiéndolos a través de su cerbero de una manera especial antes de liberarlos y ampliar su energía espiritual y su afinidad con los elementos afines.
Los otros métodos fueron descartados bien por su ineficiencia o por la falta de instrumentos externos de ayuda. Las circunstancias actuales era bastantes duras; sería imposible obtener ayuda externa.
Una vez decidido el método, Benjamín tomo un cuaderno y anoto los pasos generales y los puntos principales. Se preparó para dársela a la gente al día siguiente.
A lo largo del proceso, sintió que lo que estaba haciendo era similar a preparar una clase.
Por ello, Benjamín no estaba seguro si debía de reír o de llorar.
Paso una hora y media para completar la “primera lección”.
Después de eso, medito un rato antes de meterse bajo las sabanas y quedarse dormido.
Al día siguiente.
Se levantó temprano en la mañana y fue a la sastrería. La jefa uso un instrumento mágico de aspecto parecido a la de una canica para notificar a los otros magos ocultos en la ciudad sobre la reunión.
Cuando Benjamín vio este instrumento mágico, no pudo evitar recordar el Ojo de Dios de la Iglesia. La jefa le comento que esta herramienta también fue producto de Andrew.
Benjamín quedo asombrado por ello. Su nivel de artesanía estaba al mismo rango de los estándares de la iglesia.
Pronto, entraron al pasadizo secreto y llegaron una vez más al almacén subterráneo. Como la jefa había avisado a los demás de antemano, el ambiente hoy era diferente al de la última vez. Todos ellos estaban equipados con bolígrafos y papeles, el carpintero incluso preparó una gran cantidad de taburetes para sentarse durante la clase.
Se sentaron en filas, con sus papeles o cuadernos en sus rodillas, con sus bolígrafos en mano, Una vez Benjamín apareció por el pasadizo, lo miraron con una cara tan seria que Benjamín quedo ligeramente sorprendido por la escena.
- Escuchamos que nos enseñaras un camino para volvernos más fuertes hoy, ¿Es eso cierto? – Una joven chica sentada en primera fila levanto su mano entusiasmadamente y le pregunto apenas Benjamín entro al almacén. Su voz estaba llena de expectación.
Benjamín asintió, aunque la situación le pareció un poco incomoda.
Inmediatamente, todas las veinte personas se pararon y le dieron una ovación de pie.
-…
Benjamín nunca había recibido tal recibimiento, ni en el mundo anterior ni en este. Estaba más acostumbrado a ser el tipo promedio que hablaba con un PowerPoint detrás de él. Así, quedo indefenso ante los sonoros aplausos de la multitud, como si se sintiera impactado por tal adulación.
- uh…no había necesidad de algo como esto, Solo siéntense, está bien. - Dijo mientras se aclaraba la garganta y se rascaba la cabeza. Preparo su próxima oración en su mente antes de continuar. – No hay necesidad de agradecerme. Solo esperaba que una vez que todos se volviesen más poderosos, pensáramos una manera para traspasar junto la Puerta de los Cruzados y dejar este reino controlado por la iglesia, ¿Tengo razón en ello?
Incluyendo a los que tenían más de cuarenta años entre la multitud, la más de veinte personas quienes estaban sentadas en sus taburetes, asintieron animadamente como si fuesen pollitos picoteando arroz.
- ¡Así es! Maestro Benjamín. – Un hombre de unos veinte años de edad quien estaba sentado en la fila de en medio clamo con excitación: - ¡Una vez nos hagamos más fuertes, no habrá necesidad de seguir temiendo a la gente de la iglesia!
Maestro… ¿Benjamín? Si benjamín hubiese estado bebiendo algo cuando escucho eso, probablemente habría escupido a todos los presentes en la sala. Realmente no podía adaptarse a la situación
Pero, aun así, se sentía muy bien
Benjamín observo la escena ante él y no pudo evitar sonreír por la extraña sensación que tenía. Así, agito su rostro aun sonriendo y dejo de sentirse menos ansioso por su primera lección.
- Esta bien, bien, no es tarea fácil ser más fuerte que la Iglesia. – Espero a que la multitud se calmase antes de continuar. – Comprendí brevemente su situación actual, Aunque sabéis como usar la magia, si somos técnicos con las definiciones, no sois más que aprendices y no magos.
Todos estaban prestando sima atención a Benjamín. Algunos incluso empezaron a tomar notas a pesar de que Benjamín no tenía ni idea de que podía sacarse en claro de su discurso. Tal vez fueron ignorantes por demasiado tiempo, y aunque tenían fuertes deseos de conocimiento, nadie estaba allí para responder a sus preguntas. Probablemente por eso se veían tan desesperados cuando Benjamín se mostró ante ellos.
Apenas Benjamín comprendió esto, se lamento
El abrió el plan de estudios que preparo anoche y continúo hablando. – Sé que debéis de estar ansiosos por saber cómo fortalecer sus habilidades mágicas. Pero antes de eso, primero debéis de entender la naturaleza de la magia.
La magia no es un regalo de Dios, ni es el poder de los demonios. Lo más importante, no es el poder dejado por Caín en el mundo. La magia te pertenece a ti, nos pertenece a todos en esta habitación. La magia es una serie de efectos especiales, como ataques, curaciones y protecciones, que consigues recitando hechizos que pueden controlar los elementos mágicos que nos rodean. Definitivamente no es lo que la Iglesia llama el “poder del Diablo” o “El signo de los caídos”. Por lo tanto, no necesitan sentirse incomodos acerca de su identidad como magos. Es nuestro instinto natural, al igual que algunas personas nacen físicamente fuertes, o con una voz grave. Es natural.
- A continuación, aprendamos más sobre los elementos mágicos…
Las más de veinte personas en esta habitación miraron a Benjamín perplejos. Sin embargo, había una luz subyacente en su mirada.
Esta espectacular lección de teoría mágica, basada en teorías ateas como ideología rectora, se desarrolló por primera en este desconocido almacén subterráneo.
Probablemente, esta fue la primera en su tipo en este mundo.
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