Al llegar a los novecientos metros, dos aspirantes se rindieron.

A los 1,2 kilómetros, otros diez abandonaron.

Al llegar al kilómetro 1,6, Zhong Xuhao fue uno de los siguientes dieciséis en rendirse.

Al llegar al kilómetro 1,8, Liu Mang se unió a los siguientes veinticuatro que abandonaron el camino.

......

“¡Dos kilómetros!”.

Con los dientes apretados, Bai Yunfei dio otro paso para llegar a la zona necesaria para convertirse en estudiante de la escuela interior.

“Wh... whew...”. Su mano derecha cayó sobre la plataforma con las armas espirituales de bajo nivel. Incluso ahora, Bai Yunfei jadeaba por el esfuerzo.

“¡Por fin, lo conseguí! ¡Por fin soy un estudiante de la escuela interna!”. Bai Yunfei gritó dentro de su cabeza. La presión había sido casi insoportable. Bai Yunfei ya sabía que no era tan talentoso como los demás, por lo que sus preocupaciones se habían intensificado. Este viaje de dos kilómetros había sido duro, pero fue más fácil de lo que había esperado. En cualquier caso, ahora tenía derecho a unirse a la escuela interna. Ese solo hecho era suficiente para quitarse un peso de encima.

“Hermano Bai, ¿estás bien?”, preguntó una voz preocupada a su lado. Al levantar la vista, Bai Yunfei vio el rostro impasible de Ye Zhiqiu mirándolo. A un lado, Xi Yan y Mo Xiaoxuan se encontraban en un estado similar al de Bai Yunfei, con la respiración entrecortada.

“Estoy... bien. No es nada que no pueda soportar”. Bai Yunfei hizo un gesto con la mano. En comparación con antes, su rostro ya tenía mucho mejor aspecto. No sabía si era una ilusión, pero después de alcanzar la marca de los dos kilómetros, la presión que lo oprimía era mucho menor que antes.

Al levantar la vista, Bai Yunfei se dio cuenta de repente de que solo quedaban veintiocho personas en pie.

“De miles de personas, solo noventa y seis lograron entrar en la escuela, y de noventa y seis, solo sesenta y ocho lograron llegar a la escuela exterior, mientras que veintiocho lograron entrar en la escuela interior”. Bai Yunfei logró esbozar una sonrisa. La entrada a la Escuela de Artesanía había sido muy reducida; el hecho de que él fuera uno de los veintiocho que lo habían conseguido ya era bastante difícil. Eso por sí solo era una gran demostración de fuerza.

Al ver cómo varios otros habían logrado sofocar la presión y se dirigían impacientes hacia la selección del nivel inferior, Bai Yunfei respiró hondo. Levantándose, Bai Yunfei se acercó con temor a una espada de color azul oscuro.

Ataque: 524

Requisito de mejora: 81 puntos de alma

El equipo heredado de bajo nivel estaba al mismo nivel que el equipo de nivel bajo de la tierra. Para las sectas más pequeñas y similares, un objeto como este sería sin duda considerado un tesoro. Hoy, los estudiantes que eran capaces de unirse a la escuela interna de la Escuela de Artesanía los recibirían como regalo de bienvenida, y además estarían al alcance de la mano...

Bai Yunfei dejó la espada y miró a los demás. Ellos también estaban mirando las armas espirituales, pero él habló de todos modos: “Entremos más. Cuanto más adentrados estemos, más fuertes serán las armas espirituales...”.

Si era sincero consigo mismo, Bai Yunfei no creía realmente que pudiera llegar a la marca de los tres kilómetros y convertirse en discípulo del director o del maestro, pero por el bien de conseguir un arma ofensiva superpoderosa o un arma defensiva fuerte, haría todo lo posible por llegar tan lejos como le llevaran sus pies.

Ye Zhiqiu asintió con la cabeza: “Sí, sigamos entonces...”.

Al ver que Ye Zhiqiu podía caminar sin problemas, Bai Yunfei sintió un poco de envidia: “Quizás él... sea el que se convierta en discípulo del primer anciano o del maestro”.

...

A los 2,6 kilómetros, otros cinco abandonaron.

A los 3,1 kilómetros, Mo Xiaoxuan y Xi Yan se encontraban entre la docena que se detuvo allí. Parecía que el deseo de hacerse con un arma espiritual de nivel medio había sido suficiente para mantenerlos en pie hasta ese momento, pero una vez alcanzado ese hito, su voluntad para continuar no fue suficiente...

Lo más inesperado fue que Bai Yunfei, que parecía estar a punto de colapsar, ¡logró alcanzar la marca de los 3,5 kilómetros!

Ataque: 832

Requisito de mejora: 90 puntos de alma

Tenía las manos apoyadas sobre una lanza dorada, pero se resistía a cogerla. Se dio la vuelta y miró más adelante: a poco menos de dos kilómetros delante de él, se veía una plataforma brillante que sostenía una selección de armamentos espirituales. Esta plataforma solo medía unos metros en su punto más ancho.

Cuando levantó la vista, el brillo de algo llamó la atención de Bai Yunfei, haciéndole iluminarse; a solo doscientos metros de distancia, había un brazalete dorado colocado sobre la plataforma. Con la luz de las piedras brillantes, el brazalete se iluminaba aún más.

“¡Un brazalete! ¡Tengo que conseguirlo!”. Los ojos de Bai Yunfei se iluminaron al ver el objeto. Desde el comienzo de su viaje, los armamentos del alma de tipo defensivo habían sido los más difíciles de encontrar. Por lo tanto, ver uno ahora hacía que todos los demás armamentos del alma que había encontrado palidecieran en comparación; hoy estaba tan feliz como podía estarlo. Ahora que este brazalete estaba frente a él, Bai Yunfei estaba decidido a obtenerlo.

Trescientos metros atrás, Bai Yunfei había hecho que Ye Zhiqiu siguiera adelante, ya que él mismo caminaba a un ritmo más lento. En ese momento, solo seis personas luchaban por avanzar. Varios cientos de metros más adelante, Ye Zhiqiu ya había llegado a la zona de los cuatro kilómetros. Inesperadamente, junto a Ye Zhiqiu había un joven de piel clara. Bai Yunfei recordaba vagamente que se llamaba Tian Yuhang, el único que quedaba con el “mejor” talento en la afinidad con el fuego.

Exhalando, Bai Yunfei hizo circular su fuerza espiritual una vez más para que el calor del elemento fuego se extendiera por su cuerpo. Evaporando el sudor que se acumulaba en su piel, Bai Yunfei impulsó la fuerza espiritual hacia sus piernas para poder seguir caminando.

Con cada paso, daba otro paso. Uno a uno, Bai Yunfei caminaba...

Quedaban ciento cincuenta metros.

Ciento veinte...

Ahora cien metros...

Si se tratara de una situación normal, Bai Yunfei podría haber utilizado los Pasos de la Ola para recorrer una distancia tan corta, pero como no era así, le llevó varios minutos recorrer la misma distancia. Cada paso que daba se retrasaba con respecto al anterior, con un tiempo cada vez mayor entre ellos. Ahora tenía la espalda encorvada y parecía como si llevara una roca de seiscientos kilos a cuestas. Incluso su sentido de la realidad comenzaba a distorsionarse; su entorno empezaba a difuminarse y sus ojos solo podían fijarse en el brazalete dorado oscuro que tenía delante.

“¡Puedo hacerlo! Puedo... ¡Lo haré!”.

Su mente seguía resonando con gritos de ánimo, e incluso los labios de Bai Yunfei empezaban a sangrar por el esfuerzo de apretar los dientes. Su rostro se contraía ligeramente a medida que su estado de ánimo comenzaba a afectarlo.

¡No fracasaría allí!

Era muy consciente de su situación, pero a pesar de estar al límite de sus fuerzas, su mente se negaba a rendirse con una pasión ardiente.

¡Se negaba a experimentar el “fracaso”!

Desde que había despertado su fuerza espiritual y obtenido la ayuda de Ge Yiyun, de la Escuela del Destino, Bai Yunfei había podido embarcarse en el camino de un cultivador del alma. En solo medio año, había pasado de ser un plebeyo común a un alma elemental en fase avanzada. Combinado con la técnica de mejora de equipo para crear piezas de equipo aún más fuertes, Bai Yunfei estaba tan orgulloso de sus logros que rozaba la arrogancia. Pero aún así...

¿qué genio podría decir que había hecho lo mismo que él?

Desde que se enteró de la existencia de la Escuela de Artesanía, decidió que nada le vendría mejor que unirse a ella. No importaba lo lejos que tuviera que ir, todo era para poder hacerse tan fuerte como había prometido al comienzo de su historia.

De hecho, desde el comienzo de los exámenes para ingresar en la Escuela de Artesanía, Bai Yunfei se había visto acosado por una sensación de decepción. Frente a la falsa ilusión del “talento”, Bai Yunfei había dependido completamente de la ayuda de la Técnica de Mejora. Cuando miraba a Ye Zhiqiu, su igual, y a Tian Yuhang, alguien incluso más débil que él, Bai Yunfei no se acercaba ni de lejos a su nivel de talento para la “artesanía”. Ese pensamiento lo había atormentado constantemente, sin falta.

Tal y como estaban las cosas, avanzar más en la cueva sería extremadamente difícil para él, si no imposible. Sabía que ahora no podría ganarse el derecho a ser discípulo, así que tendría que reprimir su decepción y conformarse con lo segundo mejor. Mientras pudiera caminar un poco más, podría obtener un armamento espiritual aún más poderoso. Un armamento de alto nivel era imposible, pero podría conseguir ese brazalete a solo doscientos metros delante de él.

Aunque el brazalete estaba ahora a la vista, sus piernas se negaban a obedecer a su mente. Estaban como de piedra y levantarlas era increíblemente difícil. Sentía el cuerpo como si estuviera envuelto en algún tipo de líquido viscoso que le impedía avanzar.

“¡Diez pasos! ¡Solo necesito diez pasos más! ¡No puedo rendirme aquí, no puedo!”.