Capítulo 109 – Hacia la Tormenta (3)

Jjeok, jejejeok.

Las llamas en el suelo fueron congeladas. Ventisca era originalmente una magia avanzada del 7mo círculo, por lo que el rango de esta Vestisca fue muy reducido. El rango de efecto se mantuvo reducido a un radio de alrededor de 10 metros. Sin embargo, dentro de esos 10 metros, Sylvia había perfectamente reproducido un magia del 7mo círculo.

Incluso el fuego de Muspelheim se vió atrapado en el hielo por un momento.

"Heinz, ¡dos segundos tarde!" En ese momento, Theodore había predicho la situación antes que nadie y se refirió al próximo mago para que lanzara su magia.

Lucha grupal era familiar para los caballeros, pero era difícil mantener sus manos y pies en el lugar correcto sin ningún entrenamiento especial. El único capaz de capturar el tiempo del flujo y a su vez dirigir al grupo era Theodore, que había despertado sus sentidos sobrenaturales.

El Superior de la Torre Blanca, Heinz cumplió con las instrucciones. "Ráfaga, ¡una tormenta! ¡Captura al enemigo!"

Dos segundos más tarde, el gigante de fuego rompió a través de la capa gruesa de hielo, pero ni siquiera pudo disfrutar de una sensación de liberación antes de ser atrapado en una tormenta. Esta era magia de viento del 6to círculo. Vórtice Aprisionador se generó alrededor del gigante y lo atrapó. De acuerdo a los registros, los grandes monstruos como el cíclope de alto rango no podían escapar del Vórtice Aprisionador. No, eran generalmente atrapados en ese vórtice y despedazados por las cuchillas de viento.

Sin embargo, eso no fue suficiente para detener a Laevateinn.

¡Kururung! ¡Kwarurung!

Hubo un estruendoso rugido desde el interior del vórtice, y la tormenta comenzó a quemarse mientras el gigante golpeaba el viento con sus dos puños. Hubieron descargas de viento aleatorias debido a las ondas de choque así como relámpagos ocasionales. Era la manifestación de un poder ineficaz. La potencia de fuego, que ya había superado el nivel del maestro, finalmente destruyó el vórtice.

Sin embargo, el gigante de fuego no vio lo que estaba sucediendo en el suelo.

"¡Olson!"

"Tierra, ¡sostén a esa presencia demoníaca en tus brazos!"

El suelo se hundió de repente, y el vertido de tierra y piedras se convirtió en una arma gigantesca. El suelo enterró al gigante de fuego como un tsunami, tragándolo más rápido de lo que sus llamas podrían derretir el suelo. Por supuesto, la presión no era nada más que un agarre de tobillo, y el gigante de fuego finalmente se arrastró fuera de la tierra.

Theo siguió calmado con otra fría orden, "¡30 metros a las 6 en punto, dos segundos tarde!"

Un enorme iceberg cayó desde el cielo a Laevateinn y sobresalió de su cuerpo sin ningún tipo de errores. El pedazo de hielo era del tamaño de una casa, haciéndolo demasiado grande para que las llamas lo derritieran al instante. En el momento en que el gigante salió, la magia siguiente ya había sido preparada.

"¡Después de tres segundos, Ordu!"

El proyectil de viento explotó contra la cabeza del gigante de fuego varias veces.

"¡46 metros a las 10 en punto, ahora!"

Flechas de hielo cayeron desde arriba y arrancaron las llamas en pedazos.

La cadena de ataques mágicos que nunca terminó. Una vez que la magia de alguien tenía éxito, la magia de otra persona seguía. El inmortal Laevateinn casi no podía moverse.

Los dos elfos vieron la perfecta cadena de ataques y no podían dejar de sentir temor. El poder de cada magia que podría detener el gigante de fuego era impresionante, pero lo mejor era la habilidad de la persona conduciendo este campo de batalla.

Sin Theo, esta situación de estancamiento hubiese colapsado mucho antes.

"... Increible. ¿No esta cerca de una habilidad de premonición? ¿O una habilidad de predicción basada en la experiencia? De cualquier manera, no es una habilidad que alguien a esa edad deba tener."

"Sí, yo lo creo también."

Esta habilidad involucraba una visión que miraba adelante de un par de movimientos, así como el uso de tácticas que concentraba el poder en el lugar correcto.

Theodore estaba estirando su mano cómodamente en un área en la que sólo se podía llegar a través de décadas de lucha. A pesar de esto, él no estaba en absoluto consciente de lo ridículo que sus acciones eran. En su lugar, se centró en ser el apoyo en esta situación, al calcular la distancia y los segundos de los enemigos y aliados.

Maldita sea, ¿ya casi estamos allí? Theodore no tengo tiempo para parpadear. Él secó su sudor y miró a Laevateinn.

Para quienes no lo sabían, podría parecer que estaban dominando, pero ese no era el caso. En medio de tales ataques furiosos, el grupo fue poco a poco empujado hacia atrás. Con una tasa de tres pasos por 10 segundos, se retiraban aproximadamente 5 metros por minuto.

Además, estos ataques cíclicos no se podían mantener por mucho más tiempo. Podría ser peligroso si él no alcanzaba su principal objetivo dentro de los próximos 30 minutos.

Theo recordó el consejo de Gluttony en su cabeza, –A pesar de ser un grimorio, Laevateinn no poseen inteligencia. Actúa instintivamente para su propio propósito, pero sus acciones tienen que cumplirse con las normas. Su debilidad radica en las reglas.

La tercera forma de Laevateinn se trata simplemente de un proceso transitorio de cambio entre la segunda forma y la cuarta forma. Era un proceso de ofrecerlo todo para quemar toda la vida. Es por eso que la tercera era una tormenta de llamas difusa.

Sin embargo, ¿qué pasaría si la segunda forma no fuese capaz de obtener las ofrendas y era constantemente perturbada?

Exactamente 15 minutos más tarde, Laevateinn respondió a esta pregunta.

* * *

No había nadie específico que lo notara a la primera ya que el grupo de personas, que estaban constantemente utilizando ataques mágicos, estaban todos sensibles a cualquier cambio en el objetivo. Después de todo, el objetivo era una llama gigante que podría fundir cualquier metal en un momento.

La llama gigante de repente dejó de luchar y se acurrucó en una bola. Su aspecto era como una crisálida esperando a surgir, por lo que aquellos que lo observaban de repente se sintieron muy alarmados.

Mientras Edwin echó hacia atrás su flecha con cuidado,

Escalofrío. Theodore sintió un terrible escalofrío corriendo por su espalda.

Muerte. Defensa mágica no significaría nada, ya que cada ser en este lugar iba a morir.

Tan pronto como esta realidad apareció en la mente de Theo, él exclamó, "¡Alucard!"

Hubieran muerto si no hubiera sido por el consejo de Gluttony, si Theo no lo hubiese explicado antes en la sala de reuniones, y si Alucard no hubiese estado en este lugar.

"Gentil madre de agua, ¡El-Mare!" Alucard inmediatamente se movió de acuerdo a la voluntad de Theo que había estado cerca de un grito.

También fue gracias a Alucard que previamente escuchó acerca de lo peligroso que era la tercera forma. La falta de ofrendas redujeron el poder considerablemente, pero no era algo que los magos que no habían alcanzado el nivel de maestro podrían soportar.

[¿Me llamaste?] El gobernante elemental de agua se reveló rápidamente. Si no fuera por esta ubicación, habría aparecido una ducha cuando ella fue invocada, y la tierra se hubiera vuelto húmeda. Sin darle una palabra de saludo, Alucard gritó, "¡Protégenos de las poderosas llamas!"

[... Niño del bosque, aceptaré la solicitud de acuerdo con el contrato], una voz inorgánica respondió a la llamada.

Tan pronto como El-Mare habló, un escudo azul envolvió al grupo. Esta era el alma que gobernaba toda el agua. Sólo podía soportar una o dos rondas de la magia del 7mo círculo, Infierno. Así, era inevitable que el grupo recibierá algún tipo de castigo.

Inmediatamente después, un infierno super caliente se desarrolló.

¡¡-------------!!

No hubo ningún sonido. El calor ya había evaporado el aire. Luego hubo un feroz destello de luz que amenazó con quemar sus retinas. Theo soportó las pocas gotas de sangre fluyendo de sus ojos y apenas se las arregló para mirar hacia adelante.

Aparte de la luz, el calor de Muspelheim penetró en el escudo. Era una maravilla que pudiera siquiera respirar. La gobernante elemental era su único salvavidas.

"... Que locura", murmuró Theo ya que apenas se recuperó y vio la escena en frente de él.  El resto del grupo notó la diferencia un par de segundos tarde.

"¿¡············!?"

"¿¡············!?"

Miraron alrededor a donde la luz y la ceniza podría ser vistas. No era hermosa, pero literalmente era un terrible infierno. La vida no podría sobrevivir en este terreno en llamas. El aire, el agua, y todo lo demás necesario para sobrevivir había desaparecido. El resto de la vegetación en el horizonte era el único consuelo. Si lo verde no hubiese entrado en sus ojos, él realmente hubiera pensado que el mundo había sido destruido.

Theodore recobró la calma antes que nadie. Por fin viene.

Como un grimorio que comía grimorios, Gluttony no podía comer un libro que no existía en este mundo.

Por lo tanto, era imposible dominar al gigante de fuego, la segunda forma de Muspelheim. No importa cuántas veces fuese destruido, las llamas infinitas reaparecerían, y los que no eran trascendentes no tenían forma de resistirse. Sin embargo, a partir de la tercera forma en adelante, el cuerpo de Laevateinn era revelado.

Desde donde Theo estaba de pie, tomó un poco más de 20 pasos para llegar al centro del caliente infierno.

"Una perla de luz."

La perla blanca brillaba esplendorosamente. Era el paso que conectaba el mundo material a Muspelheim, la realidad del grimorio que existía para destruir el mundo. Entonces Theodore finalmente captó el cuerpo de Laevateinn y dio un paso adelante.

Chiiik.

"¡Ack!"

Tan pronto como Theo dio un paso, su piel se volvió de color rojo. A pesar de la protección del gobernante elemental de agua y de la defensa mágica del 5to círculo, la carne humana no podía soportar este calor, especialmente si la persona no era un maestro de espada o de magia.

Tal vez Theodore de alguna manera sobreviviría a 10 pasos. Después de eso, su carne ardería, su sangre se secaría, y sus huesos se romperían. Por ese motivo, era la lucha de Theo nada mas de aquí en adelante.

"¡...!"

"¡...!"

Tuvo una conversación silenciosa con su grupo.

Alguien lo vio dar un paso y pensó que debería reconsiderarlo. Alguien le dio protección mágica, a pesar de no tener sentido.

Sylvia trató de alcanzarlo pero fue agarrada por un mago de la Torre Azul, mientras que Edwin inclinó la cabeza en disculpa por no ser capaz de ayudar. Fue debido a que sus poderes se volvieron extremadamente débiles en un espacio donde elementales de alto rango eran ineficaces.

Theo miró a todos ellos antes de mirar de nuevo al frente.

Aún no... Un poco más. Puedo soportarlo...

Él dio un paso y luego otro paso. El calor peló su piel, pero no hasta el punto de que fuese a morir. Su disciplinado cuerpo y mente podrían soportar esta cantidad de dolor. En el quinto paso, su piel roja se despegó, y sus músculos se empezaron a quemar. A continuación, Theodore sacó su carta de triunfo.

¡Wuuong! Una luz esmeralda surgió de la marca en su brazo derecho y envolvió todo su cuerpo.

El tesoro nacional Umbra. El tesoro que le daba a su dueño sus habilidades, incluyendo la Fluidización. Umbra tenía la capacidad de ignorar los ataques físicos, por lo que podría manejar este calor. Así que, después de los primeros cinco pasos, el cuerpo de Theodore se volvió transparente. Sin embargo, no estaba completamente libre del calor.

¡Kuok...! ¡Esto está fuera de las leyes de la física...!

Las llamas de Muspelheim incluso hería a los cuerpos espirituales. Theo tomó siete pasos más, pero el fuerte calor comenzó a destrozar su cuerpo.

Logró dar otros ocho pasos hacia adelante. Sin embargo, para ponerlo en el rango de la lengua de Gluttony, Theo necesitaba dar al menos tres pasos más. Esto significaba que este infierno sería tres veces más fuerte después de esto.

Theodore realmente quería correr lejos ahora, pero apretó los dientes y perseveró.

Vamos.

Si no detenía a Laevateinn aquí, el mundo perecería. Incluso si un trascendente del que él no supiera se mostrara para detener a Laevateinn, Elvenheim todavía sería destruida. No podía evitarlo si nunca hubiera empezado esta operación, pero él no podía perdonarse a sí mismo por escapar cuando estaba tan cerca del final.

Theo tomó un paso más.

Como él pacientemente trató de aguantar el calor que parecía que iba a derretir a través de sus huesos, Theo se quejó con alguien que no estaba allí.

Se quejó del Maestro de la Torre Blanca Orta, quien había declarado que él no participaría en esta misión de subyugación.