Capítulo 212 - Próxima Batalla (3)

A pesar de la clara voz de Theodore, no hubo respuesta. La gente que había estado expresando sus opiniones anteriores se quedaron en silencio, mientras que la expresión de Kurt se convirtió momentáneamente muda de asombro. ¿Una carta del Príncipe Elsid? Por otra parte, ¿el invitado que vino a visitar a Theodore era el mensajero? La sala de reuniones en el palacio real de Meltor estaba en silencio.

No, una carta del Príncipe Elsid en este momento...

Es realmente bueno si es cierto, pero ¿es bueno que el príncipe predijera el momento oportuno? Es extraño.

Quiero preguntarle a Sir Theodore, pero mi posición...

La gente tenía diferentes reacciones. Hubieron algunos que estaban confundidos y no podían aceptar la situación, y otros que se rascaron las orejas porque dudaron de lo que escucharon. También había gente que se volvió roja del entusiasmo, y personas que estaban preocupadas acerca de preguntar la autenticidad de las palabras...

La situación era demasiado perfecta para simplemente aceptarla, pero no se veía bien cuestionar al héroe del reino. Por lo tanto, era natural para ellos permanecer en silencio. Por lo tanto, Kurt III rompió este silencio.

Revisó las palabras de Theodore varias veces antes de hablar, "Capitán de Quattro."

"Sí, su Majestad."

"No quiero dudar de ti, pero el tiempo es demasiado perfecto. ¿Cómo formaste una conexión con el Príncipe Elsid, y quien te trajo esta carta? ¿Puedes explicar primero?"

"Como ordene su Majestad."

Eran dudas válidas, así Theodore hizo una pausa antes de escoger que palabras que decir.

Theodore había pasado un tiempo en el reino Soldun, pero necesitaba explicarlo para que la gente no lo malinterpretara. Iba a hablar sobre el momento en que él había comprado la mansión después de llegar al reino Soldun desde el Archipiélago Pirata.

Theodore organizó sus pensamientos y abrió su boca, "Comenzando por el Archipiélago Pirata, me mudé a la ciudad portuaria, Piris, en el reino Soldun..."

Él no mencionó a Randolph, que lo había acompañado. El corazón de Randolph no pertenecía a Andras, pero el hecho de que el maestro de espada era de Andras podría ser interpretado como algo más.

Sería natural dudar de la información de Theodore si se enteraban que Randolph lo había acompañado durante más de un año. Iba a ser naturalizado cuando se escapara del imperio, por lo que no había necesidad de revelar la identidad de Randolph ahora mismo.

La vida de Theodore en Piris...

La llegada de la familia Baek y el entrenamiento con Baek Jongmyung...

El inesperado encuentro con el Príncipe de la Corona Elsid...

Y la conexión de Theodore con el muchacho llamado Baek Dongil.

Era una larga historia, pero no era difícil para que la gente entendiera. Hubo gente que empezó a sudar nerviosamente cuando se enteraron del entrenamiento con Baek Jongmyung, y otros que mostraron compasión por las circunstancias de Baek Dongil.

Sin embargo, una cosa era la misma. Al final de la historia de Theodore, la gente se exhaló al mismo tiempo, "Hoo..."

Era una vista ridícula, pero nadie sonrió.  Kurt III entendió las circunstancias y habló con una voz que llevaba un desconocido peso, "Es una convincente explicación. Es por eso que envió una carta a nosotros a través del muchacho llamado Baek Dongil."

"Sí, su Majestad."

"Este momento es tan perfecto que se puede decir que los cielos están ayudando a Meltor. Si el muchacho hubiese llegado tres días más tarde, él habría perdido la oportunidad", Kurt estaba hablando consigo mismo.  Sin embargo, luego miró a Theodore con los ojos hundidos y tendió una mano.

Kurt podía escuchar la carta, pero él quería leerla.

"Muéstrame la carta enviada por el príncipe de la corona."

"Sí, su Majestad."

Theodore utilizó una simple magia de viento a la solicitud de Kurt. Hubo una suave brisa, y la carta saltó un par de metros. La carta entró en las manos del rey, y la gente miraba en silencio. Los ojos color púrpura de Kurt escanearon la carta lentamente desde la parte superior a la parte inferior.

Leyó el contenido con una extraña expresión en sus ojos antes de murmurar, "... Qué interesante. El Príncipe de la corona Elsid era un muchacho vulnerable cuando lo vi por última vez. ¿Ahora quiere hablar de un nuevo monarca? Realmente es una trama audaz y temeraria."

El ministro de asuntos exteriores preguntó cuidadosamente, "Su Majestad, ¿te importa si te pregunto sobre el contenido?"

"Por supuesto." Kurt asintió con una sonrisa y levantó la cabeza de la carta. "El contenido fundamental es una petición de nuestro apoyo. Él también escribió el tamaño de las tropas que Lairon envió, un mapa de la zona donde una batalla se espera que ocurra, y la ruta a utilizar para entrar en secreto."

"¡Ohh...! ¡Eso significa que...!"

"Esto significa que la familia real está tolerando la participación de Meltor en la guerra civil de Soldun. Hay un sello real al final de la carta, así que no hay necesidad de preocuparse acerca de cualquier acusacione de interferencia."

Era como él dijo. La justificación para intervenir en los conflictos internacionales era una cuestión de importancia, y era más que estrictamente aplicado a los más fuertes poderes como Andras y Meltor. Sin justificación, había una posibilidad de que todo el Continente Central se uniera en una guerra contra los poderes del norte.

Sin embargo, la situación se revirtió con esta carta.

A diferencia de Andras, Meltor había recibido el permiso para mover un gran número de tropas en el reino de Soldun. El reino Lairon sólo sería capaz de enviar apoyo encubierto, por lo que el balance se inclinaría para el lado de la comitiva real.

Kurt estaba emocionado por el contenido de la carta y creó una agenda. "El príncipe Elsid ha presentado dos caminos de entrada. Está la ruta terrestre que pasa a través del desierto Sipoto en las afueras de Kargas y también el mar, la ruta que va por la costa este de las aguas hacia Piris. Vamos a discutir el método que va a ser más eficiente."

Sus palabras fueron dichas a la ligera, pero había un peso para ellos. Dependiendo de su elección de la entrada, el momento de la llegada de las tropas y de su estrategia, la eficiencia varía mucho. La mejor manera es llegar lo más rápidamente y en secreto como sea posible.

La ruta de acceso donde se podía mover a un mayor número de tropas también sería ventajoso. El nivel de los soldados era importante, pero la superioridad de los números no era algo que podía ser ignorado en la guerra.

Sin embargo, hubo una persona que puso un freno a los pensamientos de Kurt.

"Lo siento, su Majestad. Pero tal vez no se pueda usar la ruta del mar este año."

"¿Blundell?"

El Maestro de la Torre Azul, Blundell dijo con una triste expresión en su rostro, "El viento del sur es muy intenso en la zona oriental de las aguas en este período. Se espera que tomará tres veces más y más personal de lo habitual para llegar a Piris desde el norte."

"Tres veces... Maestro de la Torre Blanca, ¿la invención de la torre blanca se puede usar?"

"Si hacemos uso de los globos, el tiempo puede ser reducido a dos veces. Sin embargo, más reducción no es posible."

"Dos o tres veces ese tiempo es demasiado lento", Kurt gruñó y sacudió la cabeza cuando se dio cuenta de que era inútil.

No había ningún punto de acosar a su pueblo acerca de las cosas que no podían ser cambiadas. De todos modos, algo malo iba a aparecer cuando algo bueno ocurría. La carta de Elsid había llegado a tiempo, pero ahora los caminos estaban causando problemas.

Luego, justo cuando Kurt estaba a punto de dar seguimiento a la ruta de mar...

"Disculpe, su Majestad. Tengo algo que decir."

"¿Algo? Adelante, capitán de Quattro."

Theodore hizo una sutil expresión cuando miró a Blundell antes de hablar, "Yo podría tener una forma. Entonces podríamos llegar más rápido que de costumbre."

"... ¿Qué?"

"¿Es eso cierto?"

Los ojos de la gente presente se ampliaron con sorpresa. Mientras tanto, Theodore continuó hablando, "En el pasado, recibí la bendición del dragón del mar de Aquilo. Esa bendición se puede utilizar para superar el viento."

"¡E-es cierto...!"

"¡Ciertamente, un dragón del mar gobierna sobre el agua!"

"¡Entonces, las razones para no ser capaz de utilizar la ruta de mar se ha ido!"

Como su asombro y emoción creció, una persona dio su opinión sin pensar, "Sir Theodore, ¿que tal si eres acompañado por el dragón del mar? ¿Su poder no será de gran ayuda?"

Sin embargo, Theodore sonrió amargamente y sacudió la cabeza. "Ella no va a ir. Ella no tiene ningún interés en participar en cualquier otra cosa y va a ayudar a Austen. Si queremos su ayuda, tenemos que pagar un precio correspondiente o renunciar a la alianza con Austen."

"E-eso es correcto. Lo siento por mencionarlo."

Era demasiado tratar de usar el poder del dragón. A primera vista, serían capaces de aplastar a todos los soldados en la guerra civil, las tropas del reino Lairon y las sombras de Andras, si ellos fueran acompañados por Aquilo.

Sin embargo, se trataba de una ley que la codicia podría causar un desastre. La gente abandonó sus tontos pensamientos y se centró en la siguiente agenda. Obviamente, sólo había una cosa restante.

"Entonces, a partir de ahora, vamos a hablar de quien va a ser enviado al reino Soldun."

La reunión continuó por un largo tiempo.

* * *

Theodore había llegado a la reunión alrededor del mediodía y sólo se fue en el medio de la noche, cuando las estrellas y la luna brillaban.

Ni siquiera había sido capaz de tener una comida adecuada. Simples sándwiches habían colocado delante de todo el mundo, pero apenas habían comido. Fue debido a que la mayoría de la gente no podía expresar sus opiniones correctamente, mientras que comían sándwiches. Había sido lo mismo para Theodore, quien había hecho de la reunión como era.

"... Hah, estoy cansado."

Sin embargo, incluso después de terminar la reunión, no regresó a su dormitorio. En su lugar, caminó con un andar cansado para encontrar a alguien. Fue alrededor de la medianoche, por lo que la persona podría estar dormida. Sin embargo, él estaba convencido de que no era el caso.

Como era de esperar, su confianza estaba en lo correcto.

"... ¿Theodore?"

Era el lugar donde la delegación de Elvenheim se estaba quedando. En el exuberante jardín, ella estaba caminando como un hada. La luz de la luna brillaba en el cabello verde de Ellenoa. Ella era la amada hija de la Madre de la Naturaleza, y brotes germinaban bajo sus pies, llenando este lugar con vitalidad.

Theodore se olvidó de sus palabras mientras él la miraba. Él estaba acostumbrado a ver la belleza, pero Ellenoa era una excepción a su sentido común.

Ellenoa estaba preocupada por él de pie todavía, así que a toda prisa se acercó y colocó una mano sobre su frente. "Theodore, ¿te sientes bien? Tu tez se ve mal."

"N-No, estoy bien."

"Me alegro de verte, pero... ¿qué es tan urgente que viniste tan tarde en la noche?"

Theodore se tomó un momento para pensar después de escuchar sus palabras. Se había olvidado de sus palabras debido a sus imprevistos pensamientos. Las palabras que había pensado durante su camino a aquí ahora estaban dispersas. Entonces Theodore de alguna manera las juntó y abrió su boca, "Ellenoa."

"Sí."

"Tengo que participar en una importante labor a partir de mañana. Tal vez no voy a ser capaz de verte de nuevo antes de volver a Elvenheim. Así que, ya es tarde, pero vine a verte hoy."

"Ah..." Ellenoa estaba consternada de que ella no sería capaz de verlo, luego ella se sonrojó con sus últimas palabras.  Fue a causa de la atmósfera y el hecho de que él había venido a verla tarde en la noche.

Theodore no confirmó o negó ese pensamiento positivo cuando la miró con una expresión seria. "He pensado mucho acerca de ello."

"... Sí." En contraste, Ellenoa bajó su rostro con una roja expresión.

"Es como Ellenoa dijo. No sé si mi respuesta ahora es debido a la sinceridad o un sentido de responsabilidad. No he venido a verte antes porque yo no podía contestarte, pero he pensado que sería cobarde irme sin decir nada."

Entonces Theodore enganchó su dedo meñique alrededor del dedo meñique de Ellenoa. Incluso los elfos no conocían la cultura de los seres humanos eran conscientes de que esto significaba una promesa. Ellenoa levantó la cabeza con los ojos muy abiertos y Theodore respondió a la mirada.

"Por favor, espera un poco."

"..."

"Tengo que ir al árbol del mundo de nuevo. Es por Mitra, Myrdal, y varias otras razones. Pero no voy a usar eso como una excusa."

"... ¿Entonces?"

Como sentía su tembloroso dedo y escuchó su voz temblorosa, Theodore juró firmemente tanto a él como para ella, "En ese día, voy a darte una respuesta en la rama del árbol del mundo que caminamos juntos."

Con esto, los preparativos estaban terminados.