Capitulo 98 – Gran Bosque (0)

"¿Mitra?" Theodore parecía dudoso, pero aceptó la semilla para Mitra.

La semilla brillaba con una luz azul. Si esto fuera realmente una semilla de Yggdrasil, el árbol sagrado del mundo que estaba en el centro de Elvenheim, el valor de ella sería invaluable. Sin embargo, Ellenoa dijo que le diera esta semilla a Mitra.

Por desgracia, era dudoso que una respuesta viniera sólo por pensar en ello. Así que, en lugar de preocuparse, Theo decidió pedirle a la persona sentada delante de él: "Sir Edwin, ¿sabe usted el significado de esta semilla?"

"¿Qué quieres decir?"

"¿Cuál es la eficacia de la semilla... o por qué Ellenoa me dijo que se lo diera a Mitra?"

Edwin ponderó por un momento antes de asentir y responder a las preguntas: "No puedo conocer plenamente su voluntad, pero te diré lo que sé."

Su explicación se remonta a la época del nacimiento de Yggdrasil y Elvenheim. Había sido hace alrededor de 300 años, que no fue mucho tiempo teniendo en cuenta la longevidad de los elfos. Los elfos se habían reunido de todo el continente para hacer un nuevo hogar en las montañas del norte. Usando el poder de los elfos, entonces crearon un árbol del mundo. Desde entonces, Elvenheim, el reino de los elfos, comenzó.

Aunque incompleto, pero Yggdrasil era todavía un árbol del mundo. Al igual que su nombre, Yggdrasil defendió a Elvenheim con su poder. Sus hojas caídas limpiaron el suelo, mientras que sus raíces se extendieron a la superficie para crear un ecosistema natural. Por eso los elfos fueron capaces de asegurar una zona segura en las grandes montañas del norte, donde vivían todos los tipos de criaturas.

Los elfos de Elvenheim estaban agradecidos y admiraban el árbol del mundo como el árbol de los padres.

"El árbol de los padres ayudó a los elfos a prosperar. La savia ayudó con la concepción debido a su vitalidad, y las ramas se convirtieron en las armas de los guerreros, mientras que los pétalos y las frutas tenían el poder de curar a los enfermos y heridos."

"Tal vez..."

"Sí, tu pensamiento es correcto."

Theo había notado que muchas pociones y especialidades sólo podían hacerse en Elvenheim.

Esto era debido al árbol del mundo, Yggdrasil. Puesto que las pociones y las especialidades eran un subproducto del árbol del mundo, nunca podrían ser reproducidos por la tecnología humana. Fue la razón por la que Elvenheim tenía la ventaja absoluta en el comercio.

Sin embargo, Theo siguió esperando a pesar de su sorpresa. Era porque la explicación sobre la eficacia de la semilla todavía no había aparecido. Edwin hizo una pausa y finalmente sacó el siguiente tema. "El árbol del mundo produce muchas frutas en 100 años, pero sólo unas pocas semillas. Yo soy uno de los que han recibido la semilla."

"¿Sir Edwin?"

"Sí, según los viejos refranes, se dice que la semilla del árbol de los padres germina las habilidades ocultas dentro del ser que la toma. Lo tomé y me puse en el camino de un guardián."

¡Potencial de germinación!

Fue de hecho un subproducto del árbol del mundo. Theodore se maravilló de esas palabras antes de mirar hacia abajo a la semilla. Según la explicación de Edwin, la semilla no sería de gran ayuda para Theo. Era una cosa si daba un talento que no existía, pero no era significativo ya que su talento innato era pequeño.

Su talento innato era mucho más pequeño que el de Mitra. Madre Tierra...

En contraste con el dios, Dmitra, que era más grande que una montaña, el potencial de un ser humano no era nada. Nadie lo hubiera imaginado basándose en la pequeña Mitra saltando de rodillas ahora mismo.

[¿Wuong?] Mitra se dio cuenta de su mirada e hizo un sonido de interrogación.

"Ahora, esto es un regalo." Theo le entregó la semilla a ella sin vacilar. Mitra miró fijamente a la semilla por un momento antes de saltar sobre su palma. Al principio, ella quería morder la semilla, pero luego miró a Theo.

[¡Deo! ¿¡Me lo como!?]

"¿Comer?"

[¡Ti!]

Mitra estaba babeando, así que parecía que le pareció muy apetecible. Tal vez había algo que sólo los elementales podían sentir. Para él, sólo parecía una perla con una buena fragancia.

Theodore asintió con la cabeza, causando que Mitra se riera y levantara la semilla por encima de su cabeza.

[¡Aam-!] Abrió la boca y se tragó la semilla de una sola vez.

Gulp

*     *     *

El corazón del gran bosque norteño, Elvenheim, estaba en el mismo continente que Meltor. Se tardaría un mes con los vagones expresos para viajar de Maná-vil al gran bosque. Además, el transporte como los vagones perdería su funcionalidad dentro de los grandes bosques.

Por esa razón, se programó un mínimo de 100 días para que llegaran a Elvenheim. Sin embargo, la sala de salida de la delegación estaba extrañamente vacía.

"... Viniste", Orta, el hombre de pie en el centro de la habitación, murmuró tan pronto como la puerta se cerró. Detrás de él estaba Edwin que tuvo una larga charla con Theodore.

Theo se quedó al lado de Orta, quien le preguntó: "¿Están acabados los preparativos?"

"Sí."

"Entonces nos vamos. Es un largo viaje, así que tenemos que apresurarnos."

Sin importar el estatus, Theodore y el Maestro de la Torre Blanca tenían la misma autoridad en esta misión. Orta obtuvo su consentimiento y se trasladó al centro del círculo, mientras que Sylvia corrió hacia el lado de Theo. Sin embargo, antes de que Sylvia pudiera decir 'Hola', algo salió repentinamente de los brazos de Theo.

"¿Kya?" Sylvia cogió a Mitra reflexivamente. Tenía excelentes reflejos para un mago.

[¡Hoing!] Mitra movió sus manos alrededor como si estuviera diciendo hola. Se asomó a Sylvia y se rio. Sylvia colocó Mitra en su mano y sintió una extraña sensación de incongruencia.

Mientras acariciaba el pelo de Mitra, murmuró con una expresión sorprendida: "... ¿Un brote?"

Fue como dijo Sylvia. Un brote de hierba verde se asomaba desde el pelo de Mitra

Sylvia miró a Theo por la respuesta, pero sólo sonrió misteriosamente. Theo y Edwin eran los únicos que sabían que el brote había crecido después de que Mitra se comiera la semilla del árbol del mundo. Mitra se sorprendió, pero tampoco sabía lo que era.

Bueno, lo sabré si se lo pregunto a Ellenoa directamente. No era algo en lo que Theo debería pensar mientras se apresuraban.

Habiendo experimentado la teletransportación antes, Theo esperó tranquilamente a que se activara la magia espacial. Según el Maestro de la Torre Blanca, los teletransportaría cerca de la frontera. La distancia que estaban cruzando les causaría una gran cantidad de mareos y efectos secundarios.

El momento en que Theodore había termiado de prepararse...

"Teletransportación Masiva." Al mismo tiempo, cuando se dijeron las palabras, el círculo mágico bajo el grupo se iluminó. El círculo mágico de transferencia de espacio, que era el símbolo de la Torre Blanca, se tragó al elfo y a los nueve embajadores.

¡Ah! El espacio tridimensional se dobló en una línea.

El doblez desenfrenado del espacio no era algo que se podría percibir con sentidos humanos. Además, no sólo terminó con mareos. El asunto no se resolvió con cerrar los ojos, pero fue varias veces mejor que ser lo suficientemente estúpido como para mirar.

Afortunadamente, la sensación distorsionada pronto terminó.

"¡Keuk!"

"Huuuu..."

"Umm."

Al llegar al destino, todo el mundo calmó sus mareos a su manera. Algunos inhalaron profundamente, mientras que otros se mordieron el labio. Sin embargo, hubieron algunos que miraron a su alrededor sin un solo tropiezo, y Theo fue uno de ellos. El único efecto secundario que tuvo fue un ligero dolor de cabeza, así que miró a su alrededor con cuidado.

En ese momento, gotas de luz flotaban en el interior oscuro.

"Este lugar es una instalación subterránea cerca de la frontera. Es un lugar donde no podemos quedarnos mucho tiempo. Siganme en orden", Orta dio instrucciones mientras caminaba por la habitación con pasos familiares.

Después de subir numerosos escalones, vio un tablón de madera bloqueando la puerta. Sin importar si se trataba de un objeto mágico, Orta lo empujó con la mano y no dijo una palabra.

Kkiiiik. Simultáneamente, la luz cayó desde el techo.

¿Fue debido a la magia de luz...? Curiosamente, nadie cubrió sus ojos ni gimió de dolor. A medida que las nueve personas subían, Orta cerró el tablón de madera detrás de ellos. Vertió arena en la parte superior, sin dejar rastros de que nada estuviera allí.

Sólo entonces Theo empezó a mirar alrededor. "... Este lugar."

No había obstáculos que se vieran en el horizonte. Un desierto abierto era todo lo que llenaba los ojos de las 10 personas. La arena roja que soplaba en el viento era el único punto culminante de este desierto.

¿Es este desierto la Meseta Roja?

Esta era la frontera norte de Meltor, la Meseta Roja. Era una tierra roja que parecía rechazar toda la vida.

¿Por qué las criaturas fuertes del gran bosque del norte no cruzaron la frontera de Meltor? La razón de eso se puede encontrar en la Meseta Roja. Esta era una tierra estéril de varios cientos de kilómetros donde sólo llovía una vez cada dos años. El número de criaturas hambrientas que murieron aquí era demasiado numeroso para contar.

Por lo tanto, muchos preparativos eran necesarios para superar este páramo. Se requiría mucha comida, agua y suministros para resistir los ataques de las criaturas no-muertas para atravesar cientos de kilómetros.

Todo el mundo sabía este hecho, así que una persona hizo una pregunta. "¿Maestro de Torre?"

"¿Hmm?"

"¿Dónde están los carruajes que vamos a montar?"

Las otras ocho personas también miraron Orta.

Ya que era un mago de la torre blanca, pensaron que habría preparado carruajes o vagones de ráfagas. Los maestros podían usar elementales superiores, pero incluso Edwin tenía limitaciones. No tenía la capacidad de llevar el equipaje de nueve personas.

Sin embargo, no importa a dónde veían, no podían encontrar carros o vagones de ráfagas.

"Es molesto de explicar. Todos ustedes lleven estos anillos."

Orta sacó una caja y repartió anillos uno por uno.

Los anillos eran de plata y no tenían ningún patrón decorativo, pero el grupo se puso los anillos según lo instruido por el Maestro de la Torre Blanca. Edwin dudó por un momento, pero eventualmente lo puso en su dedo índice también.

Orta los vio ponérselos con un mirada tranquila. "Entonces vayamos. Si tengo que decirles una cosa, es sólo que se queden quietos.

"¿...?" Los demás tenían expresiones desconcertadas.

"En lugar de explicar, es más rápido mostrárselos directamente", el Maestro de la Torre Blanca pronunció palabras extrañas antes de dar un paso, y luego otro paso.

Sus pasos parecían estancados. Sus piernas obviamente se movían, pero no se alejó del grupo. ¿Les estaba enseñando un truco? Algunos empezaron a sospechar que el Maestro de la Torre Blanca estaba un poco tocado en la cabeza.

Sin embargo, hubo quienes se dieron cuenta de las anomalías. Theodore era extremadamente sensible a las sensaciones sobrenaturales y al ' mundo cambiante ', por lo que fue el más rápido entre ellos. Incluso la expresión de Edwin se convirtió en una de shock, ya que entendía que el paisaje alrededor de ellos había cambiado hábilmente.

Las nubes por encima sus cabezas desaparecieron en la distancia, mientras que las nubes en el horizonte se movían por encima de ellos. Sí, el paisaje cambió cada vez que dio un paso.

... ¿¡Cómo podemos movernos tan lejos en un solo paso!?

¿Era un tipo de magia espacial? El grupo centrado en Orta estaba saltando cientos de metros, o tal vez unos pocos kilómetros, todos a la vez. No se notó inmediatamente debido a que las cuatro direcciones eran un páramo, pero el resto del grupo pronto comprendió.

"¿¡D-distorsión espacial!? ¿Es con cada paso?"

"¡Imposible...!"

"Aunque sea el Maestro de la Torre Blanca, esto..."

Como Orta había instruido, el resto de ellos no se movió, pero el grupo se sorprendió mientras miraban el cielo constantemente cambiante. Se movían muy rápidamente a través de la famosa Meseta Roja. De hecho, no había necesidad de carruajes.

Los vagones de ráfaga eran lentos en comparación con mover cientos de metros en un abrir y cerrar de ojos.

El Maestro de la Torre Blanca Orta, que estaba en el tope de la magia espacial, declaró sin rodeos: "Llegaremos al gran bosque a medida que el sol se ponga.  Prepárense para parar y establecer el campamento."