Capítulo 260: Pollito no es un cobarde, tú te negaste a permitir que Pollito te acompañara.

Lin Fan estaba casi a punto de llorar. ¡Maldición! ¡Maldita sea! ¡Este lugar definitivamente no era para humanos!

Empuñando el Hacha Eterna, la blandió con fuerza hacia donde estaban las manos bloqueando. Sin embargo, eran tantos y al mismo tiempo, voluminosos que parecían no tener límites. En este momento todo el laberinto subterráneo parecía estar lleno de estas manos negras.

"Hijo de perra…..trozo de mierda. Me obligaste a hacer esto...." Lin Fan ahora estaba un poco nervioso. Pero frente al peligro, nunca podía titubear. Por el contrario, tenía que mostrarse dominante.

"Espada del Firmamento".

Después de lo sucedido en el Condado Cordillera Verde, Lin Fan había subido el nivel de su Espada de Firmamento y con eso obtuvo su segunda espada.

Y en memoria de ese acontecimiento, Lin Fan había bautizado a esta espada con el nombre 'Espada de la Benevolencia'.

Con el demonio de tres cabezas y seis brazos en su espalda, y la Espada del Firmamento y la Espada de la Benevolencia haciendo gala de una inmensa Voluntad de Espada, cortó fácilmente las manos negras que se acercaban a él.

Lin Fan finalmente se sintió más calmado y menos agobiado.

"¡Pollito, sal ahora mismo!"

"¡¡¡Cuckcuckooooo!!!

En el momento en que Pollito salió, quiso chillar a voz alta varias veces para anunciar su triunfal entrada. Sin embargo, levantó sus alas conmocionado cuando una mano negra pasó repentinamente por allí, apenas rozándolo.

"Pollito, deja de chillar. Es tiempo de trabajar". Había ahora un espacio vacío alrededor de Lin Fan. El demonio celestial sin rostro de tres cabezas y seis brazos estaba protegiendo su espalda mientras despejaba el camino con el Hacha Eterna.

"¡¡Cuck cuck!!!

Pollito miró a su alrededor y abrió sus alas sin plumas, chillando fuertemente. Con sus garras contra el suelo, cobró impulso antes de correr y saltar al aire.

¡'CUCKOO!'!

En un instante, Pollito disparó una luz roja cegadora que iluminó todo el laberinto subterráneo instantáneamente. Esas manos negras, que lo cubrían todo, se distorsionaron continuamente y finalmente desaparecieron por completo bajo esta luz roja.

Lin Fan levantó su mano para cubrir ligeramente sus ojos. Esta luz roja era realmente bastante cegadora.

Lin Fan suspiró con alivio cuando las negras manos desaparecieron mientras la luz roja se disipaba.

"Eres muy hábil, Pollito". Lin Fan no pudo evitar sentirse impresionado de Pollito. Si no hubiese desatado su habilidad, Lin Fan no estaría seguro de poder despejar este lugar por completo.

¡¡¡¡Cuckookookookoo!!!!'' Pollito movió su cabeza de pollo hacia atrás y caminó arrogantemente frente a Lin Fan. De un solo salto, se subió a los hombros de Lin Fan y se frotó contra las mejillas de Lin Fan con su pequeña cabeza de pollo.

"Muy bien, voy a recordar tu gran esfuerzo de hoy." El corazón inicialmente inquieto de Lin Fan se relajó junto con su estado de ánimo.

Y en ese momento, Pollito saltó en la cabeza de Lin Fan y gritó en voz alta una vez más, inclinando la cabeza hacia atrás. Era como si dijera que su estatus había subido de nivel una vez más.

Lin Fan puso sus ojos en blanco. ¡Dios mío! Este Pollito realmente sabía cómo ser arrogante, ¿no?

¡Boom! ¡Boom!

Justo cuando Lin Fan y Pollito se estaban arrogantemente gozando de su gloriosa cacería, una serie de ruidos fuertes resonaron en sus oídos. El dúo hombre y pollo miraron la escena que estaba frente a ellos, luego se miraron el uno al otro y parpadearon a gran velocidad.

Una por una, las cadenas que sostenían al sangriento templo se rompieron. Las marcas de las runas en cada una de los espirales de las cadenas también se debilitaron.

"Pollito, ¿qué diablos hiciste?" Preguntó Lin Fan fríamente.

"¿Cucú? Pollito abrió sus ojos ampliamente mientras sacudía su pequeña cabeza. No tenía ni la más mínima idea.

Lin Fan se tragó su saliva sin hacer ruido y gritó en voz alta.

"¡Pollito! ¡Vámonos de aquí!" Agarrando a Pollito con una de sus manos, Lin Fan corrió hacia la salida. Basándose en su experiencia hasta ahora, sabía lo que estaba sucediendo.

El JEFE estaba en camino.

Por lo general, Lin Fan estaría definitivamente emocionado con la aparición de un monstruo JEFE. Pero para Lin Fan, un JEFE del que no tenía ni idea era la cosa más aterradora del mundo.

¡Maldito Pollito! Estaba bien si sólo destruía las manos negras. ¡Pero por qué tuvo que romper las cadenas y despertar a ese tipo! ¿Acaso esto no nos estaba jodiendo a nosotros?

¡¡¡¡BOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOM!!!!

Sin las cadenas que lo elevaran, el templo comenzó a derrumbarse. Al mismo tiempo, las manchas de sangre en el templo parecían haber adquirido una nueva forma de vida mientras emitían un aura intimidante.

Lin Fan se concentró solamente en salir. Sólo. Unos. Cuantos. Pasos. Más.

Y justo cuando Lin Fan llegó a la salida, una mano gigantesca le dio una bofetada desde el exterior de esta.

Mirando las negras llamas de la gigantesca mano, el corazón de Lin Fan se contrajo. Era el gigante en llamas.

¡BAM!

"Ding....'Cuerpo Eterno Demoniaco' +100.000 puntos de experiencia.'

Aunque no sufrió algún daño, la fuerza de la bofetada hizo que Lin Fan volara hacia atrás.

Para cuando Lin Fan se puso de pie, el gigante en llamas había bloqueado el agujero, dejando una reluciente capa negra sobre él. Ondulando suavemente, la capa negra se convirtió en una pared sólida y selló la única salida de este lugar.

Lin Fan miró a su alrededor. No había otra salida.

"Pollito, estamos jodidos". Lin Fan estaba a punto de gritar. Luego miró a su alrededor desesperadamente. ¡Necesitaba encontrar una forma de salir de este lugar antes de que saliera el Gran JEFE!

Pero cuando no pudo encontrar otra salida, Lin Fan se limpió el sudor de su frente mientras aparecía una mirada de desesperación en su rostro.

"Ahora que lo pienso, una persona como yo es un joven muy valioso. Si hoy muriera aquí, sería una gran pérdida para la secta, para el Continente Dongling, para el mundo entero."

Lin Fan se encontraba en su momento más triste. Sin embargo, sabía que aunque tuviera que morir, no podía irse sin que alguien supiera de él.

Usando su dedo como lápiz, esculpió en el suelo.

Continente Dongling, Año 6385, Secta Gloriosa, Lin Fan, 6º Gran Maestro de la Secta del Santo Demonio en la Montaña Sin Nombre. Con el fin de evitar que ocurra una calamidad en todo el mundo, decidió morir aquí junto con este demonio para asegurar la paz en el mundo".

...

Mirando el grabado en el suelo, Lin Fan asintió satisfecho.

“¡Cuck! ¡Cuck!” Pollito le dio un golpecito a Lin Fan como si estuviera preguntando:¿Y yo qué?

Lin Fan le echó una mirada a Pollito y añadió una frase extra.

"Su mascota, Pollito, yace aquí también".

Lin Fan también hizo un dibujo de Pollito en el suelo.

"¿Estás feliz ahora?" Lin Fan sólo podía recurrir a hacer algo así para calmar el malestar que sentía en su corazón. Aunque no sabía lo que había dentro del templo, tenía que prepararse para el peor resultado posible.

Aunque Pollito no entendía las palabras que estaban escritas, levantó sus alas con alegría cuando miró ese dibujo.

Lin Fan entrecerró sus ojos y miró hacia el templo. En el momento en que entró en contacto con la superficie del suelo, una fuerza imparable irrumpió en todas las direcciones.

¡PIANG!

Todos los azulejos del templo cayeron al suelo a medida que la sangre parecía ganar vida propia. Brillando en una luz roja fantasmal, en el templo se filtró una gran cantidad de sangre.

Lin Fan frunció el ceño, mientras Pollito se estremecía y mantenía sus alas juntas, escondiéndose detrás de Lin Fan.

Arrogante frente a los débiles, cobarde frente a los fuertes... Este era el estilo de vida de Pollito.

El aura que emitía el templo hacía que uno se sintiera realmente tenso. De esto, Lin Fan también entendió que no iba a ser un rival fácil de manejar.

"Pollito, escóndete tú primero". Lin Fan dijo mientras acariciaba a Pollito.

Pollito se esforzó por parecer valiente, como si le dijera a Lin Fan que podía hacerlo.

"No me hagas perder el tiempo, escóndete en algún lado". Lin Fan empujó a Pollito con una de sus piernas. Mirando a Lin Fan, Pollito finalmente se dio la vuelta y se fue con su espalda solitaria.

Se giro para mirar a Lin Fan por última vez, como si dijera: "No es que yo sea un cobarde, tú fuiste el que se negó a permitir que te acompañara...".

Y con esto, Pollito se fue corriendo a algún lugar para esconderse, sacando su pequeña cabeza de vez en cuando para ver cómo estaba el panorama.

...