Capítulo 130: El Desafortunado Tian Guang.

Al amanecer, mientras el mundo despertaba y los primeros rayos de sol brillaban en la tierra. Una gran carroza jalada por cinco grandes caballos dejó Ciudad Valle Lluvioso, continuando su viaje por el camino hacia la Ciudad Imperial del Reino Cielo Carmesí luego de una noche de descanso...

¡Splash!

En la carroza, mientras Duan Ling Tian pesaba la plata en sus manos, una brillante sonrisa apareció en su rostro. —¡Nunca imagine que conseguir dinero era tan fácil!

Actualmente, ¡la cantidad de plata que tenía consigo superaba el millón!

—Tian, ¿de dónde sacaste toda esta plata? —Li Rou frunció el sueño con una expresión interrogativa. Solo había visto a Xiong Quan entregarle toda esta plata a Duan Ling Tian, pero no sabía que había pasado o de dónde venía toda esta plata...

–Tía Rou, seguro chantajeó al Clan Tian de Ciudad Valle Lluvioso y así consiguió todo este dinero. —Li Fei cubrió su boca mientras reía dulcemente.

Aunque no sabía que había pasado exactamente la noche pasada, cuando Xiong Quan le entregó la plata a Duan Ling Tian y menciono al Clan Tian, no le fue difícil relacionar los dos incidentes.

Cuando Li Rou se enteró de los acontecimientos, no pudo evitar sacudir su cabeza y reír. —Ese Tian Guang fue por lana, pero volvió trasquilado... pero Tian, ¿quién exactamente es Xiong Quan y por qué te ha reconocido como su Señor?

Viendo que Xiong Quan fue capaz de asustar a todo el Clan Tian, Li Rou llegó a la conclusión de que Xiong Quan no era una persona ordinaria.

Las cejas de Duan Ling Tian se fruncieron un poco mientras lentamente explicaba, —Madre, él fue capturado por unas personas para usarlo como un esclavo y por casualidad lo salve, así que me reconoció como su Señor.

—¿En verdad lo capturaron para ser un esclavo a pesar de lo fuerte que es? —Li Rou estaba intrigada y al mismo tiempo entendió porque Xiong Quan usaba una máscara; resultó ser que la usaba como una manera de ocultar su marca de esclavitud.

—Fue envenenado antes de ser capturado y solo podía usar el poder del Quinto Nivel del Reino Templado de Cuerpo. Lo salve y luego lo ayude a disipar el veneno. Hmm, ahora mismo tiene el poder de un artista marcial en el Reino Alma Naciente. —Duan Ling Tian se recostó en las piernas de Ke Er y comió las uvas que ella le daba mientras decía holgazanamente.

—¿Reino Alma Naciente? —En ese momento, no solo Li Rou, sino que incluso Li Fei quedó sin palabras... Aunque Li Fei sabía que el poder de Xiong Quan era formidable, nunca se había imaginado que era tan fuerte...

¡Reino Alma Naciente!

Un cultivo de ese nivel era comparable al de los Ancianos Supremos de los tres grandes clanes de Ciudad Aurora, y le causó una profunda conmoción...

Solo Ke Er no estaba sorprendida y se mantuvo calmada mientras les quitaba la piel a las uvas y las ponía dentro de la boca de Duan Ling Tian una por una.

En su corazón, no había nada que el Joven Maestro que ella adoraba no pudiera hacer.

—No es de extrañar que pudieras resolver el problema con la Familia Fang de Ciudad Briza Fresca tan fácilmente. —Li Rou finalmente entendió algunas cosas, y las preguntas que guardaba en su corazón fueron respondidas.

—Nunca imagine que Xiong Quan era un artista marcial en el Reino Alma Naciente. —Li Fei solo regresó a la normalidad luego de un largo tiempo.

—¿Acaso no es solo un artista marcial en el Reino Alma Naciente? ¿Por qué están tan sorprendidas? —Duan Ling Tian observó a Li Fei antes de decir lentamente, —Pequeña Fei, mientras cultives seriamente la Técnica de la Estrella Galáctica, alcanzar el Reino Alma Naciente en cinco años no te será un problema.

Solo ahora Li Fei recordó que la Técnica de la Estrella Galáctica que ella cultivaba era una técnica de cultivo muy poderosa que podía llegar al Reino Emperador Marcial... Además, con la ayuda de las extremadamente puras píldoras medicinales que Duan Ling Tian refinaba, ¡su cultivo aumentaría a una velocidad extremadamente veloz!

—Tian, ¿podemos confiar en Xiong Quan? —A diferencia de Li Fei, Li Rou pensó un poco más las cosas, y su hermoso rostro tenía una expresión seria con un tinte de preocupación.

En su opinión, tener a un experto de tu lado no era muy diferente a una espada de doble filo.

—Madre, no te preocupes. Ya he considerado eso. —Duan Ling Tian sonrió levemente. Naturalmente sabía porque su madre estaba preocupada, y no era otra cosa que temor por una posible traición de Xiong Quan.

Sin embargo, la vida de Xiong Quan ahora estaba en sus manos, y en todo el mundo, solo él era capaz de curar el veneno que le dio a Xiong Quan. Ese veneno estaba fabricado a partir de una fórmula especial del Emperador Marcial del Renacimiento, ¡que al momento de morir era un Alquimista Real!

Cuando el grupo de Duan Ling Tian se fue, el Clan Tian estaba envuelto en una atmosfera depresiva... ¡El Patriarca había muerto!

—¡Padre! –Cuando Tian Guang despertó y se dio cuenta que su hermanito había desaparecido, recibió un duro golpe. Ahora, el escuchar que su padre había sido asesinado hizo que diera un grito lleno de dolor, y estas dos noticias fueron tan duras para él que terminó desmayándose nuevamente. Su padre estaba muerto, ¡y eso significaba que ahora el Clan Tian estaba en una peligrosa situación!

Luego de unos días, Tian Guang que se había recuperado con gran dificultad, fue llevado al Pabellón de Castigo por unos discípulos del Clan Tian y recibió 100 golpes de tablones como castigo frente a todo el Clan Tian.

Al momento de desmayarse del dolor, escuchó la voz del Gran Anciano. —Tian Guang trajo una calamidad sobre nuestro Clan Tian. Según las instrucciones dadas por los dos Ancianos Protectores, ¡ha recibido un castigo ejemplar! En el futuro, si alguien comete los mismos errores, recibirá la pena de muerte tal como se encuentra estipulado en las reglas del Clan...

Cuando recuperó la consciencia, ¡Tian Guang estaba muy desanimado y sus ojos estaban llenos de arrepentimiento!

Nunca imaginó que sus acciones en esa noche lo harían caer en tal situación. Si los Cielos le dieran la oportunidad de regresar a esa noche, incluso si tuviera que tirar a la basura su orgullo e inclinarse diez veces ante ese joven de ropas violetas, aún así le rogaría perdón a ese pequeño demonio.

Ahora no tenía nada, y mucho menos orgullo.

—Tian Guang, el Gran Anciano solicita tu presencia en el Salón de Audiencias. —Justo en ese momento, una voz llegó a los oídos de Tian Guang y su rostro palideció.

Luego de llegar al Salón de Audiencias, Tian Guang directamente se arrodilló frente al Gran Anciano y abrazó las piernas del Gran Anciano mientras lloraba. —Gran Anciano, reconozco mis errores, en verdad los reconozco... No me castigue, ¡no me castigue más!... por favor, por favor, ¡se lo ruego!

El Gran Anciano del Clan Tian frunció el ceño y su expresión se oscureció mientras miraba a las tres personas que se encontraban allí. Dijo, avergonzado, —Por favor disculpen esta escena, estimados invitados.

A continuación, su rostro cambió mientras le daba una patada a Tian Guang, —Tian Guang, ¡hoy no te traje aquí para castigarte! Además de los dos Ancianos Protectores, solo tu conoces la apariencia de ese joven de ropas violetas con el que te encontraste el otro día. Bien, describe en detalle su apariencia a los tres estimados invitados.

Cuando Tian Guang escuchó que no había sido llamado para ser castigado, finalmente se calmó, y solo en ese momento notó que había otras tres personas en el Salón de Audiencias... Un anciano, un hombre de mediana edad y un joven de unos veinte años.

—Ustedes... ¿qué relación tienen con ese pequeño demonio que va vestido de violeta? —Tian Guang preguntó, en forma algo nerviosa. Estaba asustado de que esas personas estuvieran conectadas a ese joven; pensaba que estaban aquí por órdenes de él. Si ese fuese el caso, ¡entonces su patética vida probablemente llegaría a su fin!

—Es un enemigo irreconciliable de nosotros, ¡y la razón por la que estamos aquí es precisamente porque lo estamos persiguiendo con el fin de asesinarlo! —El joven de veinte años dijo, con una voz llena de odio y crueldad.

Escuchar eso hizo que los ojos de Tian Guang se iluminaran, tras lo cual parecía haber recordado algo mientras la luz en sus ojos se apagaba. —Es inútil, hay un artista marcial en el Reino Núcleo de Origen protegiéndolo; incluso mi padre, el Patriarca, fue asesinado por él...

—¿Reino Núcleo de Origen? —El joven rio burlonamente. —Solo es un artista marcial en el Reino Núcleo de Origen, ¿qué hay que temer? Esta persona al lado mío es el Gran Anciano de nuestro Clan Yu, una existencia en el Reino Alma Naciente. ¡Un mero artista marcial en el Reino Núcleo de Origen es solo una mosca en los ojos del Gran Anciano!

—¿Reino Alma Naciente? —Tian Guang no tenía palabras.

Las pupilas del Gran Anciano del Clan Tian se achicaron, y solo reaccionó un momento después. —¿Clan Yu? ¿Reino Alma Naciente? Ustedes... Ustedes no serán del Clan Yu de la Ciudad Provincial de la Provincia Golondrina de Montaña, ¿cierto?

La expresión de Tian Guang se volvió a iluminar, como el estrellado cielo en la noche, ¡mientras miraba al joven como su salvador!

—Sí, somos del Clan Yu. Este es el Gran Anciano de nuestro Clan Yu, y este es mi padre, el Segundo Anciano del Clan Yu. –El joven levantó su cabeza arrogantemente mientras disfrutaba las miradas llenas de reverencia por parte de los dos miembros del Clan Tian.

—Así que se trata del Gran Anciano, Segundo Anciano y el Joven Maestro del Clan Yu. Por favor perdonen a este servidor por no haberlos recibido correctamente... Tian Guang, Apresúrate y ve a la cocina para que preparen un gran banquete. ¡Quiero honrar como se debe a nuestros invitados! —El Gran Anciano del Clan Tian, Tian Lin, miró a Tian Guang mientras le daba órdenes.

—Sí, de inmediato. —Mientras Tian Guang rápidamente se levantaba, sus ojos se movieron agitadamente...

—Padre, ¡alguien va a vengarse por ti pronto! ¿Y que si hay un artista marcial en el Reino Núcleo de Origen junto a ese pequeño demonio? Un experto del Clan Yu en el Reino Alma Naciente ha aparecido para asesinarlo y, además, ¡se trata del Gran Anciano del Clan Yu! ¡Ese pequeño demonio va a sufrir una miserable muerte! Por fin podrás descansar en paz...

—Esperen. —Justo en ese momento, el Gran Anciano del Clan Yu, Yu Hui, detuvo a Tian Guang y dijo indiferentemente, —La razón por la que vinimos a su Clan Tian no es para comer. Bien, describe la apariencia de ese joven en ropas violetas ahora.

Tian Guang no se atrevió a dudar mientras apresuradamente asentía su cabeza y recordaba las escenas que vivió esa noche. Detalladamente le describió la apariencia de ese pequeño demonio al grupo del Clan Yu...

—Gran Anciano, ¡es él! —El joven, Yu Xiang del Clan Yu, tenía una expresión agitada.

—Mientras sea él... De ser el caso, ha dejado esta ciudad hace siete días. —Yu Hui asintió. —Bien, es ahora de que nos vayamos.

—Gran Anciano, —Tian Lin dio un paso adelante mientras decía respetuosamente, —los tres han venido de muy lejos y deben estar hambrientos. ¿Por qué no descansan en mi Clan Tian y comen un poco? Es el honor de nuestro Clan Tian el que nos hayan visitado. Espero que me permitan mostrarles la hospitalidad del Clan Tian.

Yu Hui no acepto directamente, sino que miró al Segundo Anciano Yu Li y a Yu Xiang. –¿Qué piensan?

—Gran Anciano, ya que Duan Ling Tian se ha ido hace siete días, no tenemos prisa. Tengamos un banquete antes de irnos, —Yu Xiang sugirió.

—Exacto, estamos viajando con Caballos Ferghana, así que podemos alcanzarlos en dos días incluso si nos detenemos a comer algo. —Yu Li asintió mientras por sus ojos pasaba una fría luz.

Yu Hui asintió para luego mirar a Tian Lin. —Entonces tendré que molestar al Gran Anciano Tian.

—No hay problema, en verdad no es un problema. —Tian Lin no pudo evitar sonreír. Los últimos días habían sido difíciles para el Clan Tian luego de la muerte del Patriarca y ser obligados a entregar un millón de plata. Los otros dos clanes en Ciudad Valle Lluvioso estaban cada día presionándolos más, claramente intentando ganar control sobre el Clan Tian.

En su opinión, si el Clan Tian conseguía establecer una relación con el Clan Yu de la Ciudad Provincial, podría asegurar la prosperidad del Clan Tian.

—Perdónenme, me dirigiré a la cocina a dar las ordenes, —Tian Guang dijo emocionadamente mientras salía del Salón de Audiencias.