Capítulo 504 - Perdido (3)

Durante ese tiempo, Ye Lang también recibió un informe de Sangre Fría Cinco sobre la protección oculta alrededor de Zhao Yarou. Estaba sorprendido de lo bien protegida que estaba. Incluso si viniera un luchador de nivel Tian (Celestial), podría no ser capaz de dañar a Zhao Yarou.

Por eso Sangre Fría Cinco le recordó una vez más que no provocara ni intentara nada con Zhao Yarou, y que nunca revelara su identidad.

Ye Lang no pensó que la primera parte fuera un problema. Podía controlarse a sí mismo. Sin embargo, la segunda parte fue un poco más difícil. Si pasaran más tiempo juntos, con su inteligencia, ella podría adivinar.

No parecía darse cuenta antes, pero ahora estaba muy desconcertado por cómo Zhao Yarou actuó a su alrededor. Ella no le habló como si fuera un extraño en absoluto.

Sin importar las circunstancias, Ye Lang sintió que era necesario separarse. Él debe perderla pronto...

El segundo día, Ye Lang hizo muchos intentos, pero aún así no pudo separase de ella. Ella era como un parche de piel de perro, pegado a él.

Con esto, Ye Lang finalmente le dijo, con la mayor honestidad, que era molesta. Luego, él le dijo que no lo siguiera.

Lo que dijo a continuación provocó evoco muchos recuerdos...

“¿Estás tratando de evitarme de nuevo? ¿Por qué me odias tanto?"

¿Por qué dijo ella “otra vez”? 

Ye Lang no se detuvo en esta pregunta porque pensó que debía ser porque había estado tratando de deshacerse de ella desde el día anterior.

"Mmm…"

Al final, podría usar el método más primitivo: corrió. Con la rienda del caballo en una mano, corrió como un loco. El pobre caballo estaba sufriendo y apenas podía seguir el ritmo.

En respuesta, Zhao Yarou saltó hacia su caballo y corrió tras él. A medida que se adentraban más en el bosque, lentamente perdieron el rumbo mientras la cantidad de personas que seguían a Zhao Yarou disminuía...

"Todavía estás corriendo".

"Todavía me estás siguiendo".

"No lo haré si no corres".

"No lo haré si no me sigues".

"Entonces deja de correr primero".

"No, deja de seguirme primero".

"Tu…"

"Tu…"

Ye Lang y Zhao Yarou seguían discutiendo, mientras que Li Yue sintió un dolor de cabeza. Ella nunca hubiera imaginado que el asunto se intensificaría a tal situación. La Emperatriz de un gran imperio jugaba felizmente con esta persona.

Maldición, ¿quién es feliz ahora? 

Si Ye Lang y Zhao Yarou supieran lo que estaba pensando, eso es lo que dirían.

"¿Oye? ¿Dónde estamos?" preguntó Zhao Yarou de repente. Se dio cuenta de que no podía reconocer dónde estaban y había perdido a todos sus hombres.

Esto fue impactante porque sabía lo capaces que eran sus guardias. Sabía que estaba corriendo bastante rápido, sí, ¡pero aún así deberían poder seguir el ritmo!

En este momento, sintió un poco de miedo. Temeroso de que Ye Lang pudiera hacerle algo, ya que solo estaban ellos tres.

"¿Cómo podría saberlo?", Resopló Ye Lang. También notó algo extraño ... No podía sentir la presencia de Sangre Fría Cinco, y cuando le envió una pregunta no hubo respuesta.

Parece que Zhao Yarou no fue la única que perdió a su guardaespaldas.

Sin embargo, en este momento, Zhao Yarou estaba sola. ¡Esta era la oportunidad perfecta para matarla! Sin embargo, Ye Lang no hizo tal cosa, nunca sabremos si fue porque no lo pensó.

“¿No lo sabes? Entonces, ¿por qué nos trajiste aquí? ¿Nos vas a hacer algo?” dijo Zhao Yarou, cubriendo su cuerpo.

"Vete al infierno, incluso si todas las chicas del mundo murieran, todavía no estaría interesado en ti", dijo Ye Lang.

"¿Qué?" preguntó Zhao Yarou amenazadoramente, irradiando violencia.

Lo que Ye Lang dijo fue muy ofensivo, definitivamente todavía estaría enojada incluso si estaba de buen humor ese día. Además, ella nunca tuvo muy buen humor.

"Dije... incluso si todas las chicas del mundo murieran, aún no estaría interesado en ti", repitió Ye Lang, ignorando por completo su furiosa ira.

"¿Te doy tanto asco?" su tono se hizo más y más frío.

“No se trata de asco u odio, no siento nada. Es solo una cuestión de principios”, dijo Ye Lang con indiferencia.

“Su Majestad, no hablemos más de eso. Creo que deberíamos hablar sobre lo que debemos hacer ahora". Li Yue trató de cambiar el tema de conversación al notar la tensión en la atmósfera.

"Hmmph". Zhao Yarou miró fríamente a Ye Lang.

Al menos esta era la Emperatriz que ella conocía. Aunque su mirada fría era aterradora, Li Yue pensó que esto se sentía un poco más normal. Se suponía que Zhao Yarou debía verse así.

"Señor Fox, ¿no sabe dónde estamos?" preguntó Li Yue. Por el mal humor de Zhao Yarou en este momento, sería inútil preguntarle. Ella solo seguía a Ye Lang de todos modos.

"No lo sé, pero estoy seguro de una cosa", dijo Ye Lang.

"¿Qué es?" preguntó Li Yue, mientras Zhao Yarou lo miraba una vez más.

"Estamos perdidos".

"..." Ambas chicas se callaron.

"¡Lo sabemos! ¿Eso es lo que significa que no saber dónde estás?” preguntó Zhao Yarou suavemente.

El asintió. Miró a su alrededor y dijo: "No lo sé, pero estoy seguro de otra cosa".

"Solo dinos".

"También hemos perdido el resto", dijo Ye Lang.

"Idiota", dijo Zhao Yarou.

"¿No puedes decir algo un poco más útil?" dijo Li Yue, exasperada.

Ye Lang pensó por un momento. "Bien, también estoy seguro de una cosa más".

"..." Ambas lo miraron fijamente, sin molestarse en hablar.

"Estoy seguro de que si no encontramos refugio, pronto nos empaparemos", dijo Ye Lang.

"¿Estás diciendo que va a llover?" Li Yue miró hacia el cielo, pero no había señales que indicaran que estaba a punto de llover.

“Sí, lloverá muy pronto. Una tormenta eléctrica también. Por eso deberíamos ir a esa cueva ahora”. Ye Lang señaló una cueva cercana ubicada en la ladera de una colina. La boca de la cueva era enorme, por lo tanto, visible desde aquí.

"¿Estás seguro de que va a llover?" preguntó Zhao Yarou.

"Estoy seguro", él asintió sin más detalles.

"Esta bien, vamos." Zhao Yarou también se apresuró a tomar una decisión.

Por lo tanto, los tres caminaron hacia la cueva. Una vez que entraron, el clima exterior comenzó a cambiar. Enormes nubes cubrían el cielo. Iba a haber una tormenta pronto.

En este momento, ambas chicas estaban agradecidas de haber creído en Ye Lang o se habrían empapado.

"¿Cómo sabías que iba a llover?" preguntó Li Yue con curiosidad.

“De pequeños detalles en el entorno. No es dificil. Puedo enseñarte si estás interesada”, dijo Ye Lang.

"Bien." Li Yue asintió con la cabeza. Estaba muy interesada, por supuesto, porque el clima era un factor importante durante la guerra.