Capítulo 540 - Trabajando solo (1)

“Su Majestad, ¿por qué está tan seguro de que volverá por mí? Con la situación actual, debería estar corriendo lejos de aquí. Se descubrió su disfraz, nunca volverá...” Li Yue frunció el ceño, como si pensara que era imposible.

En privado, ella también estaba un poco decepcionada. Sentía que si no fuera por la tarea que tenía que cumplir, definitivamente no volvería por ella.

“Creo que volverá. Todavía no ha recibido tu Armadura Tianji, volverá, es ese tipo de idiota, no se detendrá hasta que obtenga lo que quiere", dijo Zhao Yarou con una sonrisa, sacudiendo la cabeza y mirando al cielo nocturno.

"¿¿??" La multitud miró a Zhao Yarou confundida, Li Yue aún más perpleja.

Para todos, Ye Lang era un niño despistado al que no le importaba nada. ¿Cómo podría ser la persona que ella estaba describiendo? ¿Una persona que nunca se rendiría hasta alcanzar su objetivo? Ese no era Ye Lang, ¿verdad?

¿Por qué ella pensaba eso? No entendían como llego a ese entendimiento...

Su Majestad debe haberse equivocado...

"¿Es eso cierto?" Li Yue murmuró.

“No me importa que todos duden de mis especulaciones, solo esperen y vean. Además, a todos se les permite lastimarlo, está bien si está medio muerto. Pero no debe ser asesinado”. El tono de Zhao Yarou se volvió helado cuando llegó al final de su oración. Sabían que si alguien desobedecía sus órdenes, definitivamente morirían.

O tal vez las consecuencias no serían tan simples como la muerte.

Según lo que acaba de decir, nadie pensó que Zhao Yarou se preocupara por Ye Lang. Si lo hacía, ¿por qué no le importaría su bienestar?

Pero si no lo hacía, ¿cómo podría uno explicar lo que acaba de pasar? ¿Cómo explicarías el hecho de que ella organizó una fiesta para conocerlo, sus sonrisas felices con él, la actitud diferente que tenía hacia él?

¿Fue todo eso realmente para atrapar a Ye Lang? Tal vez eso fue todo... pero aún no parecía correcto.

¿Y qué si eso no parece correcto? Decir que Zhao Yarou se preocupaba por Ye Lang sonaba más anormal. ¡Eran enemigos jurados!

"Sí, señora". Li Yue enderezó su postura, respondiendo con el aire de un subordinado. Frente a Zhao Yarou, ella era de hecho solo otra subordinada. Estaba un poco distraída por Ye Lang.

Incluso si Zhao Yarou estaba equivocada e hizo los arreglos incorrectos, ella todavía tenía que obedecer sin objeciones.

“Te lo recordaré una vez más: debes traerlo de vuelta con vida. Si eso no es posible, déjalo escapar”, dijo Zhao Yarou.

"¿¿??" La multitud no entendió. Entendieron la parte en la que ella lo quería con vida, pero la segunda parte era confusión. Por lo general, la gente prefiere matar a su enemigo para que otras personas no lo atrapen.

Quizás porque la identidad de Ye Lang era demasiado especial aquí. Si alguna de las partes lo matara, solo provocaría muchos problemas. Y no todos podían afrontar tales consecuencias.

Sí, debe ser por eso.

No importa lo que Zhao Yarou estaba pensando, estaba cien por ciento confirmado de que quería esconder a sus hombres cerca de Li Yue para una emboscada. Ella contrató a muchos maestros para esta misión, similar a la cantidad de luchadores expertos que contrató para su fiesta de cumpleaños.

En este momento, Ye Lang estaba bien escondido en la capital. Nadie podría encontrarlo aparte de Sangre Fría Cinco, que estaba con él.

¿Por qué estaba ella con él? No era porque ella supiera que Ye Lang estaría volando aquí, le había dicho que viniera cuando saliera del palacio.

“Cinco, regresemos. Nos prepararemos para nuestro próximo movimiento".

"¿Qué? ¿Qué pasó adentro? ¿Por qué tuviste que escapar así, te descubrieron?” Sangre Fría Cinco todavía no sabía lo que pasó. Todo lo que sabía era que él había salido del palacio de una manera peculiar que solo puede explicarse como una salida de emergencia.

"Sí, lo saben". Ye Lang asintió mientras respondía con calma, su tono sonaba como si fuera muy normal.

"..." Sangre Fría Cinco guardó silencio por un momento. "Entonces deberíamos irnos de inmediato".

“No tenemos que hacerlo. No pueden encontrarme, solo soy una persona. La misión es demasiado importante, aún no ha terminado. Todavía quiero pensar en otra solución. Informe a Sangre Fría Siete, hablaré con Athena. Nos vemos en el Piso Romántico”. Cuando terminó de hablar, se fundió en las sombras de la noche, moviéndose sin dejar rastro de evidencia.

Tanto Sangre Fría Cinco como Ye Lang estaban familiarizados con esta técnica de camuflaje.

Esto se debió a que Ye Lang había aprendido esta habilidad de Sangre Fría Cinco. Sin embargo, en este punto, no le quedaba nada que enseñarle.

El Piso Romántico. Este es el lugar con el que Zhao Yarou y el resto estaban familiarizados, pero a menudo se olvidaron. No pensaron que Ye Lang volvería a estar allí porque sería demasiado obvio.

Sin embargo, Ye Lang decidió esconderse allí una vez más. Quizás el lugar más peligroso era el más seguro.

Ye Lang envió un mensaje para Sangre Fría Siete y Athena para venir. Teóricamente, esto era peligroso porque si alguien los viera, sería muy problemático.

Sin embargo, con las habilidades de Sangre Fría Siete y Athena, nadie las vería. Ni siquiera Zhao Yarou.

En el pasado, cuando Ye Lang todavía viajaba al aire libre, Zhao Yarou no había notado su presencia. Ahora que Athena y Sangre Fría Siete estaban en guardia, ella definitivamente no lo sabría.

Por otra parte, en este punto, todos solo sabían que Ye Lang estaba actuando solo.

“Maestro, realmente te gustan los lugares elegantes como este, ¿eh? ¿Qué quieres, llamándome aquí a esta hora?” Athena apareció dentro del burdel de repente, riéndose cuando vio a Ye Lang descansando en el patio.

Había estado preocupada por la seguridad de Ye Lang, especialmente si algo había sucedido dentro del palacio. Ahora que él estaba allí, ella se sintió aliviada.

Mientras él estuviera de vuelta en una pieza, todos los demás problemas podrían resolverse lentamente.

"Estás aquí. Siéntate, esperemos a Pequeña Cinco y al resto”, dijo Ye Lang suavemente sin moverse.

Athena no dijo nada. Se sentó junto a Ye Lang en los escalones de piedra. La piedra estaba fría, pero tal vez porque ahora estaba al lado de Ye Lang, no le importó en absoluto.

En este momento, Ye Lang yacía en los escalones de piedra del patio. No había mesas ni sillas cerca de él.