Capítulo 563 - Honorarios médicos (1)

"¡Cierren las puertas!"

Cuando el comandante vio lo que sucedió, inmediatamente ordenó a sus hombres que cerraran las puertas de la ciudad. Aunque era solo una ciudad pequeña, era un lugar importante de asuntos militares, por lo que tenía medidas de protección muy eficientes que podrían rivalizar con las grandes ciudades.

“Li Yue, las puertas están cerradas. ¿Deberíamos regresar y descansar?” Ye Lang solo quería volver a su habitación cuando vio las puertas cerradas.

Si el comandante lo escuchara, ¡se habría puesto furioso! Era obvio que Ye Lang ni siquiera lo tomó en serio.

Iba y venía a su antojo, esta era la actitud actual de Ye Lang.

“¿Cómo podríamos volver ahora? Deberíamos salir a la fuerza”, dijo Li Yue. Si ella aceptara, no sería Li Yue, se llamaría Ye Lang.

“¿Forzar nuestra salida? Eso no es bueno, es ilegal ".

“... ¿Quieres hablar de legalidad? ¿Qué has hecho que sea legal? Me mentiste, me secuestraste, ¿fue legal?” su rostro se oscureció, cada vez más enojada mientras hablaba.

“Hey, estoy considerando esto por tu culpa. No importa si lo que hago es legal, soy el enemigo del Imperio Cielo Elevado. No necesito obedecer las leyes, pero tú eres diferente. Eres el Capitán de Guardias de la Ciudad Imperial”, dijo Ye Lang, preguntándose por qué estaba tan enojada Li Yue.

"?¿¿?" Se detuvo por un momento, sorprendida al descubrir que Ye Lang estaba realmente preocupado por ella.

“No tienes que pensar en mí. Solo soy una persona que fue secuestrada por usted, lo que significa que no puedo tomar mis decisiones ahora. Lo que sea que hagas no me afectará”, dijo suavemente.

“¡Oh, eso hace las cosas simples entonces! ¡León, adelante!” una vez que la escuchó decir eso, decidió enfrentar las puertas de frente. Sin embargo, no iba a ser fácil.

Si estuviera solo, hubiera sido muy fácil, pero ahora tenía a Li Yue y el león aún más problemático.

Ahora había cientos de personas entre él y las puertas de la ciudad. Todos eran hombres del comandante de Ciudad Muyang, aunque la última palabra todavía no estaba en sus manos.

Había cinco mil soldados en esta ciudad, solo quinientos de ellos estaban debajo de él. Allí estaban el coronel, el teniente general y el general. El general ordenó a las cinco mil personas, él era el que tenía la máxima autoridad aquí.

Dentro del Imperio Cielo Elevado, los rangos militares eran como tales: Teniente: 5 personas, Capitán: 20 personas, Mayor: 100 personas.

El comandante ordenó a 500 personas, Teniente coronel: 1000, coronel: 3000, teniente general: 5000, general: 10,000.

Luego estaban el General en Jefe, el Mariscal y el Gran Mariscal. Estos no tenían un número fijo de personas debajo de ellos, se movieron sobre la posición de liderazgo de los diferentes ejércitos.

En cuanto a la posición de Capitán de la Guardia de Li Yue, eso era parte de otro sistema. Esa era una rama directamente debajo de la Emperatriz, diferente de los militares.

Era impresionante que hubiera un teniente general aquí para controlar a cinco mil soldados. Esto significaba que la ciudad Muyang era un lugar importante.

"Aaihh, León, ¿por qué no puedes volar?" Ye Lang se palmeó la cabeza con pesar. Cuando vio a tanta gente a su alrededor, de repente pensó en volar.

"Ggrroar, grroar", rugió el león suavemente, quejándose de Ye Lang o culpándolo por pensar demasiado.

Cuando vio a todos los soldados como si estuvieran listos para defender las puertas con sus vidas, decidió abandonar la idea. Bien podría esperar a que llegara el tipo, tal vez podría convencerlo de dejarlo ir.

¡Esperar un rato no fue un problema, fue mucho mejor que matar!

"¿Todavía estás pensando en escapar?" El comandante se puso al día al ver que Ye Lang no se movía. Pensó que Ye Lang había cedido y tenía miedo.

"¿Escapar? Nunca escapo, solo me muevo estratégicamente”, respondió casualmente. Sin darle la oportunidad al comandante de responder, dijo una vez más: "Date prisa y pide a tus hombres que abran las puertas, no quiero perder más tiempo con todos ustedes".

“¡Incluso puedes pedirme que te abra personalmente las puertas! Solo quiero que compenses las pérdidas sufridas por mis subordinados, mil monedas de oro por cada hombre. Hay doce personas, entonces serán doce mil. Más compensación por mi tiempo, así que pagame quince mil. ¡Entonces puedes irte!” El comandante se rió por lo bajo. Estaba seguro de que Ye Lang no podría pagar. Fue entonces cuando ofrecería otro precio con... algunas condiciones.

“Oh, ¿querías dinero? Podrías haber dicho eso antes. Quince mil, ¿verdad?” Ye Lang le dio un cheque de quince mil monedas de oro. "¿Ahora puedes abrir las puertas?"

El dinero era solo un número para Ye Lang. Le encantaba gastar dinero. Esto era básicamente pagar los honorarios médicos de estas personas, bueno, Li Yue cortó a doce personas esa tarde.

El comandante tomó el cheque, atónito al darse cuenta de que el cheque era realmente real. Tenía quince mil monedas de oro en sus manos.

Este joven que acaba de darle un cheque tan casualmente ni siquiera se tomó en serio quince mil monedas de oro. ¡No debe ser un hombre común!

¡Las cosas empiezan a ponerse interesantes!

"¡Oye, pide a tus hombres que se aparten!" gritó Ye Lang, señalando a los soldados en frente.

"Señor, solo dije que el dinero era para que usted se fuera, pero no para la dama", dijo el mayor con una sonrisa y un tono mucho más amigable. Debe ser el poder del dinero.

"¿Por qué?" preguntó, perplejo, mientras Li Yue lo fulminaba con la mirada.

"Porque ella lastimó a mis hermanos", dijo el mayor con un tono solemne como para decirle que esto era un asunto serio.

"Ya le he pagado sus honorarios médicos, el asunto ha sido resuelto", respondió Ye Lang. No le importaba el tono del comandante, solo quería expresar su punto de vista.

“Se suponía que debía resolverse, pero la dama aquí era demasiado cruel. ¡Les cortó los brazos y las piernas!” el comandante estaba exasperado.

“¡Se lo merecían! Basándome en sus actitudes, sé que lo han hecho muchas veces. Sé que no somos las primeras víctimas y tampoco las últimas. Es por eso que les cortó las extremidades, para que nunca más puedan lastimar a los civiles”, dijo Ye Lang directamente. Estaba muy tranquilo como si fuera una conversación casual.

"¿¿??" Li Yue estaba conmocionada. Estos eran exactamente sus pensamientos, pero ella nunca le dijo. ¿Cómo podría haberlo sabido?

¿Estamos en el escenario donde ... Ahh, ¿qué estoy pensando?

La cara de Li Yue se puso roja, para desconcierto de todos. ¿Qué estaba pasando que podría hacer que su cara se pusiera roja?

"Incluso si estaban equivocados, el castigo debería haber sido nuestro negocio, no es para que lo decidan los extraños", dijo el comandante con una expresión gélida.