⚠️ Traducción hecha por fans. Sin derechos sobre el contenido original.
Capítulo 126: Entrando a las Montañas Cadáver Negro.
Esta fue una noche sin poder dormir para Fuerte Yan.
Una gran purga estaba llevándose a cabo, incontables soldados armados y maestros de energía descendieron sin piedad sobre el Clan Wang, arrestaron a todos en su base y luego la saquearon. Se pudieron escuchar gritos y aullidos por toda la ciudad mientras los demás clanes ricos y aristocráticos esperaban temblando a que pasara la noche.
Jamás en la vida olvidarían la escena de Yang Qi acabando con el poderoso Diablocalavera Rey de la Plaga, un experto del Templo de Peste Sombría, quien terminó como simple cenizas al viento.
Los expertos del Templo de Primavera y Otoño fueron capturados y encarcelados.
Hasta ahora, habían temido el nombre del Instituto Semi-Inmortal, pero no necesariamente a Yang Qi. Pero ahora sí que estaban aterrados de él, una sensación que se convertía en veneración.
Yang Zhan se acababa de declarar rey, y no estaba en una posición muy estable todavía. Aunque muchos clanes aristocráticos habían aceptado actuar como ministros de su gobierno, la verdad era que muchos no tenían buenas intenciones, y se la pasaban riñendo por los asuntos militares y financieros.
Pero ahora todos entendían lo verdaderamente poderoso que se había vuelto Yang Qi, y sabían que era inútil resistirse al Clan Yang.
Dentro de un estudio del palacio real, Yang Zhan asentía mientras escuchaba un reporte con respecto a las riquezas confiscadas del Clan Wang. No podía estar de mejor humor. No solo habían evitado una gran catástrofe, pero ahora él mismo era un Usurpador de Vida, y había dado un gran paso para consolidar su poder real en Fuerte Yan. De ahora en adelante, el Clan Yang sería tan famoso y glorioso como el sol del mediodía. Incluso algunas de las organizaciones más poderosas de estas tierras dudarían antes de pensar en invadir su territorio.
Si jugaban bien sus cartas, no sería imposible establecer un legado de mil años.
—Padre, —dijo Yang Qi—, Iré a las Montañas Cadáver Negro para entrenar un poco. Ayuda a mis hermanos con su cultivo. Cuando consiga la medicina espiritual adecuada, los ayudaré a llegar también a la Usurpación de Vida. Uno de estos días seré lo bastante fuerte para ir a la Montaña Colgante a buscar a mi madre.
—Muy bien Qi'er. Aún es difícil creer que te hayas hecho tan fuerte. Pero el Instituto Semi-Inmortal está lleno de dragones ocultos y tigres al acecho. Lo mejor será mantener oculto tu verdadero poder.
—Lo tendré en cuenta Padre. Por cierto, ya terminé de montar la formación de energía del Dao de monarcas en una recámara secreta bajo el palacio. Ya que mis hermanos ya poseen la Esgrima de las Cuatro Estaciones, solo tienen que cultivar en esa formación y podrán avanzar a grandes pasos. También sugiero que promuevas a algunos miembros jóvenes y leales del clan y darle menos atención a los ancianos líderes. Será más fácil fomentar la devoción entre los jóvenes. Conoces el viejo dicho, ¿cierto? Quien te da la leche es tu madre. Las lealtades de los ancianos no son más que un acto de conveniencia.
—No te preocupes hermano, —dijo Yang Yunchong—. Nos encargaremos apropiadamente de los asuntos del clan. Los ancianos líderes se han vuelto inútiles hace tiempo. Pondremos nuestros esfuerzos en los jóvenes con energía. Los viejos podrán vivir el resto de sus días en paz mientras no nos traicionen.
—Muy bien, —respondió Yang Qi con un resplandor en sus ojos—. En cuanto haya establecido una buena base de poder en el Instituto Semi-Inmortal, podré hacer que sus hijos vayan a estudiar allí.
A estas alturas, sus dos hermanos ya estaban casados y tenían hijos.
Él era el único que seguía soltero.
Ya que tenía diecinueve, lo tradicional hubiera sido que ya estuviera casado. Pero Yang Zhan sabía bien que su hijo aún tenía un largo sendero frente a él, y bastante longevidad. Así que esas cosas podían esperar.
—Ten cuidado en las Montañas Cadáver Negro Qi'er.
—No te preocupes. —Dicho eso, Yang Qi se puso de pie y convocó una manifestación de Energía verdadera humanoide. Se veía exactamente como él, y tan vívida que su cuerpo hasta emitía calor.
La energía verdadera de Yang Qi había llegado a un nivel tan alto que su Energía verdadera humanoide era casi como una encarnación extracorporal, una segunda divinidad naciente.
—Dejaré atrás esta Energía Verdadera Humanoide para esperar al anciano del Templo de Primavera y Otoño. Con suerte podremos resolver estas cosas de una vez por todas. Cuando llegue el anciano, volveré rápidamente de las Montañas Cadáver Negro. No debería tomar más de unos momentos.
Por supuesto, ya que Yang Zhan era un Usurpador de Vida, la reputación del Clan Yang sería suficiente para resolver muchas situaciones complicadas.
Una vez arreglado todo, Yang Qi se elevó por el aire y se desvaneció.
Yang Zhan observó a su misterioso y poderoso hijo partir y suspiró. —«Verdesura, ¿puedes ver esto? Tu hijo solo sigue haciéndose más y más poderoso. Pronto será rival para los Grandes Sabios. Seguro que un día irá a buscarte en la Montaña Colgante.»
Yun de Mar estaba ubicado sobre unos riscos que daban al océano. Era una ciudad próspera que ya había empezado a ser llamada el Estado de Yun. Muchas tropas patrullaban las calles, y un flujo constante de mercaderes iba y venía entre los incontables muelles.
La ciudad era mucho, mucho más grande que Fuerte Yan, y el regente de todo era el padre de Yun Hailan, Yun Zhonglong.
En este momento se encontraba sentado dentro de un estudio de su mansión, frente a él se encontraba un hombre de mediana edad, era nada más y nada menos que Yan Gufeng. Después de ser expulsado de Fuerte Yan, decidió poner su lealtad en Yun de Mar, o más apropiadamente, el Estado de Yun.
—Estoy contento con tenerte de nuestro lado ahora, Yan Gufeng. —Los dos eran Maestros de Energía y magistrados de ciudades.
—Después de ser expulsado por el Clan Yang, me volví apenas poco más que un perro vagabundo. Estoy agradecido con tu trato Líder Supremo. —Aunque Yan Gufeng mantenía una expresión plácida, era imposible ocultar la ira en sus ojos—. Mi hija está estudiando en el Instituto del Dragón Verdadero y fue promovida hace poco. Además, se ha acercado a un experto importante allí. Pronto podrá conseguir mi venganza. No dejará al Clan Yang salirse con la suya en todo esto.
—Vengarse es más fácil decirlo que hacerlo, —dijo Yun Zhonglong con una pequeña sonrisa—. He oído que Yang Qi se unió al Instituto Semi-Inmortal, y ya alcanzó el nivel de Usurpación de Vida. Eso lo convierte en un estudiante de élite. Se hace más poderoso con cada día que pasa.
—Eso también lo escuché. Tu hija también está en el Instituto Semi-Inmortal y ha conseguido el respaldo de una persona muy poderosa. También es una estudiante de élite, ¿cierto? Por lo que entiendo, hizo que Yang Qi se robara la Píldora del Dragón Latente para despertar la sangre del dios marino en su interior. Creo que me debes un poco de ayuda aquí, Líder Supremo. Yang Qi odia a tu hija, y seguro que intentará vengarse. Los dos tenemos un conflicto con el Clan Yang que solo puede terminar en la muerte. Comprendes todo eso, ¿cierto?
Yun Zhonglong asintió. —Por supuesto.
Fue entonces que alguien tocó la puerta.
—Adelante, —respondió Yun Zhonglong.
Uno de los agentes de Yun Zhonglong entró y se puso de rodillas. Luego dijo con una voz temblorosa, —Líder Supremo, tengo malas noticias. Acabo de recibir un reporte sobre lo sucedido ayer en Fuerte Yan. Yang Qi volvió a casa para visitar a su familia, y aparecieron tanto el Templo de Primavera y Otoño como el Templo de Peste Sombría. Al final Yang Qi acabó completamente con Diablocalavera Rey de la Plaga del Templo de Peste Sombría, un Usurpador de Vida secundario. No quedaron más que las cenizas...
—¿Qué? —Yun Zhonglong, recibió el reporte y lo leyó cuidadosamente. Tras terminar, colapsó sobre su silla como si hubiera envejecido una década entera—. Y Yang Zhan también es un Usurpador de Vida ahora...
—Estas son grandes noticias, —dijo Yan Gufeng—. ¿Me permitiría leer el reporte Líder Supremo?
—Mira, —respondió Yun Zhonglong mientras le entregaba el reporte.
Yan Gufeng lo leyó y su expresión empeoró rápidamente. No pudo evitar decir con manos temblorosas, —¿Acaso Yang Qi es un dios de los Cielos descendido al mundo mortal? ¿Cómo puede ser tan fuerte? ¿Qué ha aprendido en el Instituto Semi-Inmortal? No. Esperen. Esto no tiene nada que ver con el instituto, ¿cierto? ¡Debe haber sido ese relámpago! Mi subordinado Luo Hun lo dejó lisiado, y luego lo golpeó un rayo. Todo ha cambiado desde entonces.
Después de un buen rato, Yun Zhonglong inhaló hondo y dijo, —Rápido, ¡enviadle un mensaje a mi hija para decirle lo sucedido! Hay algo muy misterioso con Yang Qi. Mi hija seguramente tendrá conexiones en el Instituto Semi-Inmortal que podrán ayudar. —Le regresó la mirada a Yan Gufeng y continuó—, Ha llegado la hora de un viaje al mar. Tenemos que hablar con uno de los reyes del Pueblo Marino.
Mientras tanto, en las Montañas Filón Celestial, en lo alto del mar de nubes, Yun Hailan acababa de emerger del Mundo Cosmomenor. Y lo primero que notó fue un águila volando hacia ella; extendió su mano y esta aterrizó sobre ella para permitirle recibir el mensaje en su pata.
—¿Una carta de casa? —El águila se fue volando, y entonces abrió el mensaje—. «Yang Qi volvió a casa. ¿Cómo se hizo tan poderoso? ¿Ayudó a su padre a alcanzar el nivel de Usurpación de Vida? ¿Cómo lo hizo? ¿No le dije a Song Haishan y a la Sociedad del Príncipe Heredero que lo vigilaran? ¿Por qué no me contaron nada?»
Bajó volando de las nubes sin dudar y salió de las Montañas Filón Celestial. Una vez de regreso en la parte principal del instituto, varios miembros importantes de la Sociedad del Príncipe Heredero le dieron la bienvenida. Ya que tenía el favor del Príncipe Heredero, y los Patriarcas Viento y Nube eran sus maestros, todos la adulaban rápidamente.
—¿Dónde están Jiang Fan y Song Haishan? —preguntó fríamente—. Traédmelos.
—El Hermano Mayor Jiang Fan fue a causarle problemas a Yang Qi. Pero parece que Yang Qi sabía que venían y se ha ocultado. Luego Jiang Fan envió un mensaje indicando que se había ido en una misión junto a Song Haishan. No se han reportado aún.
El hecho de que Song Haishan y Gu Fenxian estaban muertos seguía siendo un gran secreto. Jiang Fan y los demás seguían lejos de la secta y planeaban esperar a volver antes de reportar las muertes.
Pero Yun Hailan era lo bastante astuta para sospechar la situación.
—La Sociedad del Príncipe Heredero tiene maneras secretas de transmitir mensajes, ¿cierto? Díganles que vuelvan de inmediato. Tenemos algo muy importante que discutir.
Después de entrar a su habitación, los demás miembros de la Sociedad del Príncipe Heredero intercambiaron miradas y sacudieron la cabeza.
—Esta chica avanza de manera exagerada. ¿A qué nivel está ahora? ¿De verdad tenemos que contactar al Hermano Mayor Jiang Fan?
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