Capítulo 132: Estudiantes del Cónclave.

—Quien soy yo no importa. Solo tienes que saber que soy la condena de tu existencia. Ustedes los monstruos siempre buscan una oportunidad para plagar a la humanidad y cometer los crímenes más espantosos. Así que acabaré con tantos de ustedes como pueda.

Los dedos de Yang Qi se unieron en un gesto de conjuro, y entonces su fuego sabio platino se agitó intensamente y reveló unos dragones azures, tigres blancos, aves bermellón, tortugas negras, qilines, palacios resplandecientes, árboles llameantes, pasto plateado, y todo parecía rebosar con el poder del Paraíso de la Legión Divina.

Por supuesto, esta no era la verdadera tierra pura del Paraíso de la Legión Divina, sino una simple manifestación de ella.

Pero sí que intensificó su fuego sabio, y a medida que quemaba al Rey Cadáversangriento Diabólico, Yang Qi podía sentir como se beneficiaba él mismo.

Su energía verdadera recorría su cuerpo como un río, y hacía que el fuego inmolara la energía siniestra que encontraba. Cualquier cadáver cercano era convertido en cenizas, la sangre en los pantanos se secó y hasta la tierra empezó a fundirse hasta formar lava. Todo de verdad estaba siendo purificado.

Esta parte de la Dimensión Cadáver Celestial, un verdadero reino de fantasmas diabólicos estaba convirtiéndose temporalmente en un paraíso.

Un paraíso que pertenecía a Yang Qi.

El Rey Cadáversangriento Diabólico temblaba por el esfuerzo y volvió a tratar de librarse.

—¡Cometa del Emperador de Sangre! ¡Yo Gobierno el Cosmos! —Una figura de túnicas rojas apareció, con una corona rojo sangre en su cabeza. Un mar de sangre surgió a su alrededor al mismo tiempo.

Yang Qi podía ver que la batalla había llegado a su punto crítico. El Rey Cadáversangriento Diabólico estaba usando las artes energéticas supremas del Sutra Diabólico del Emperador de Sangre, y convocó un emperador de sangre del inframundo para un último ataque explosivo.

—¡Detonación de Sangre! ¡Relámpago de Sangre!

Unas grandes masas de sangre se reunieron para formar un relámpago que golpeó su fuego sabio platino y el Crisol del Fuego Infernal. El emperador de sangre movió su mano al mismo tiempo e hizo que una luz color sangre saliera, una luz repleta de las maldiciones de fantasmas y con los chillidos de dioses.

—¡Espejo de Fuego Sabio! —rugió Yang Qi, frente a él se formó un espejo formado de puro fuego platino. La luz color sangre golpeó de lleno el espejo y luego es vio reflejada.

Nuevamente era otra faceta de la Fuerza del Mamut Divino Supresor Infernal.

Ahora que era un Usurpador de Vida cuaternario, Yang Qi estaba aún más familiarizado con las infinitas variaciones de la técnica.

A pesar de que el Relámpago de Sangre logró sacudir su fuego sabio platino, no era capaz de atravesar el Crisol del Fuego Infernal.

Mientras Yang Qi mantuviera el crisol bien cerrado, no importaba lo que el Rey Cadáversangriento Diabólico hiciera, no era capaz de sacudir ni la energía verdadera de Yang Qi, ni su confianza.

El proceso perduró durante ocho horas enteras, hasta que la energía verdadera del Rey Cadáversangriento Diabólico finalmente empezó a acabarse, y empezó a debilitarse de manera evidente. Ahora era como un pez en la tabla de cortar, solo podía esperar su final.

En un momento como este, Yang Qi no tenía la más mínima intención de contenerse.

—¡Crisol del Fuego Infernal! —gritó—. ¡Funde la sangre y deshace los diablos! ¡Extermina todos los demonios despiadados! ¡Establece un paraíso puro! ¡La legión divina jamás podrá justificarse con un infierno vacío!

¡ZAAS!

Su poder se vertió en el Rey Cadáversangriento Diabólico, el cual gritaba mientras era fundido lentamente hasta apenas quedar una gota de sangre y de energía vital.

A través de esa gota pasaban todo tipo de símbolos mágicos, algo que parecía existir entre un estado líquido y sólido.

—«Whoah. Eso sí que me dará una quintaesencia de fuerza vital poderosa. De hecho, ¡creo que podría ayudarme a usurpar vida una quinta vez! ¡El Rey Cadáversangriento Diabólico sí que merece ser conocido como un rey diabólico en la dimensión alterna que es la Dimensión Cadáver Celestial!»

Había muchas zonas peligrosas en el Continente Abundancia Exuberante, varias dimensiones alternas, algunas grandes, otras pequeñas. Muchas contenían vastas cantidades de tesoros. Algunas no tenían ni entradas ni salidas, y solo los Legendarios podían descubrirlas. Aquellas que podían ser exploradas por artistas energéticos de niveles más bajos eran las que tenían entradas permanentes, pero casi siempre estaban vigilados por monstruos y demonios poderosos.

La Dimensión Cadáver Celestial era de las segundas.

La mayoría de los expertos se concentraban en matar monstruos primero antes de buscar tesoros. Después de todo, los cuerpos espirituales ya eran tesoros de por sí, y podían convertirse en píldoras medicinales u objetos mágicos.

El Rey Cadáversangriento Diabólico era un poderoso Usurpador de Vida septenario, pero no había sido capaz de hacerle frente a Yang Qi.

Después de todo, Yang Qi cultivaba una técnica que era básicamente el flagelo de todo tipo de artes energéticas siniestras y malignas. Si Yang Qi hubiera estado enfrentándose a un practicante de artes energéticas ortodoxas, que estuviera en la Usurpación de Vida septenaria, como mucho habría podido librar una amarga batalla a muerte con pocas esperanzas de ganar o hasta de escapar. Pero cuando luchaba contra diablo siniestros como estos, en realidad lo hacían mucho más fuerte.

En la Fuerza del Mamut Divino Supresor Infernal, la parte de "supresora del infierno", lo decía todo.

—«Ahora a mi mar de energía.» —Por supuesto, el Rey Cadáversangriento Diabólico seguía resistiéndose, como decía el viejo dicho, un ciempiés no deja de moverse hasta ser completamente aplastado. Justo cuando Yang Qi se preparaba para arrojarlo a su Crisol del Fuego Infernal, un rayo de luz brillante salió disparado desde las profundidades de la Dimensión Cadáver Celestial.

Entonces se escuchó estruendo poderoso, seguido por un rayo de luz que parecía un relámpago.

¡Era energía de espada!

¡Una energía de espada que tronaba como un trueno!

También era descomunal, y cortaba el aire como un dragón blanco en camino directamente hacia Yang Qi.

—«¿Qué es eso? ¡Que energía de espada tan intensa! Nunca había encontrado algo así de fuerte.» —Sabía bien que no podría luchar contra algo así, por lo que salió disparado hacia abajo, golpeó el suelo y se enterró profundamente bajo la superficie.

La tierra en este sitio era un lodazal de pantanos sangrientos, en cuanto entró, una poderosa energía siniestra empezó a intentar corroerlo.

Pero no temía en lo absoluto. Se enterró como una locha y se desvaneció sin dejar rastro.

Cuando ese gran rayo de luz de espada que parecía un relámpago golpeó el suelo, todos los pantanos de sangre se evaporaron, y la tierra se sacudió al mismo tiempo que la energía siniestra que contenía era erradicada.

Luego salió disparada una onda de choque descomunal, y para cuando se calmó el polvo, lo único que quedaba atrás era un enorme cráter. A pesar de que la tierra aún era de color rojo sangre, ya no se podía ver nada moviéndose en toda el área.

Un solo ataque de espada había arrasado toda la zona.

Era el tipo de energía de espada capaz de destruir montañas y desviar ríos, como la ira explosiva de un ser celestial.

Obviamente no se había originado de un artista energético ordinario, sino de algún experto trascendente.

Después de que el gran estruendo se disipara, un individuo de blanco apareció en el aire sobre el cráter. Tenía unas cejas largas que se extendían hasta su sien, y una espada en su mano. Pero su espada se disolvió de inmediato en energía y volvió a entrar a su cuerpo. Tenía la piel tan pura como el jade, y en su frente había un símbolo plateado que se veía casi como un relámpago.

Este era un humano, no un fantasma diabólico, y su energía de espada había sido pura y ortodoxa, del tipo diseñada para conquistar lo siniestro. Tan solo el sonido que emitía podría sacudir a la mayoría de los diablos siniestros.

—«Quienquiera que fuera... ¿se enterró? Era humano, ¿o diablo?» —El hombre de blanco se quedó observando el cráter y luego hacia el pasadizo que era el Ojo Diabólico Mortal. —«Ese es el camino que lleva a las Montañas Cadáver Negro, un área repleta de fantasmas diabólicos. No puede ser que alguien viniera por allí. El área circundante a las Montañas Cadáver Negro es remota y baldía, no hay sectas ni organizaciones grandes. ¿Cómo llegó aquí este tipo?»

¡Swooosh!

Mientras murmuraba consigo mismo, otro hombre se acercó acompañado por una mujer, ambos se movían tan rápido que dejaban una serie de imágenes residuales a su paso.

Estas eran claramente personas favorecidas por los Cielos, expertos consumados.

Por supuesto, eso era de esperarse; solo los mejores de los mejores podían venir a la Dimensión Cadáver Celestial.

—Hermano Mayor Lei, —dijo la joven—. Tu Gran Esgrima del Trueno sí que ha llegado a la cumbre. Arrasaste con toda el área incluso a quinientos kilómetros de distancia. ¿Pero por qué lo hiciste sin advertencia y luego te desvaneciste?

—Sentí unas fluctuaciones de energía vital en esta área que indicaban una batalla. —El hombre que había desatado esa energía de espada de trueno era Lei Tao[i]. Se quedó mirando sus alrededores y continuó, —Lamentablemente, quienes fueran, ya escaparon, por lo que es imposible saber si eran corruptos u honrados.

—¿Dices que hay alguien más en el Reino Cadáver Celestial? —añadió el otro hombre—. Este sitio pertenece a nuestro Instituto Semi-Inmortal, y solo los estudiantes del cónclave pueden venir a cultivar y acabar con diablos siniestros. Eso es algo bien sabido, personas de otras organizaciones no vendrían, eso incitaría la ira de nuestro instituto. Tomando en cuenta eso, diría que las fluctuaciones que detectaste han debido ser una batalla entre monstruos. Pero después de ver tu técnica de espada, Hermano Mayor Lei, no hay manera de que se atrevan a mostrar sus caras ahora. Y si era un individuo honrado, no se hubiera enterrado. La tierra aquí es un lodazal tóxico de carne putrefacta que solo los fantasmas diabólicos pueden tolerar.

—Hermano Mayor Lei, nuestra misión nos ha llevado desde las Montañas Cadáver Demoníaco hasta aquí, estamos buscando el agua de manantial de fuerza vital para el Príncipe Heredero. Vamos, sigamos con la búsqueda. Si no nos apresuramos nuestra misión habrá sido un fracaso, y el Príncipe Heredero no estará contento.

—Por cierto, Hermano Mayor Lei, —añadió la mujer—, ¿tienes idea de por qué el Príncipe Heredero está tan decidido a que encontremos el agua de manantial de fuerza vital? No es probable que la necesite él, dada su base de cultivo.

—Debe ser para esa mujer, —respondió el hombre—. ¿Cuál era su nombre? ¿Yun Hailan? Desde que apareció, el Príncipe Heredero la ha estado favoreciendo mucho y la ayuda en todo. Me pregunto si los rumores serán ciertos... Bueno, hemos seguido mucho tiempo al Príncipe Heredero. No creo que se haya enamorado de una mujerzuela cualquiera. Es un dios descendido de los Cielos, y va en búsqueda del Dao Celestial. Existe fuera de la ley, y pronto ascenderá al nivel de Gran Sabio. ¿Cómo podría una mujer cualquiera distraerlo?

Entonces Lei Tao abrió sus ojos de golpe. —No es que podamos descubrir lo que piensa el Príncipe Heredero, ¿cuál es el punto de especular? Debe haber un propósito tras todo esto, algo que involucra su plan maestro. Además, Yun Hailan no es una mujer ordinaria. Sumado a la sangre del dios marino en sus venas, también tiene un poco del aura de un dragón. Eso lo he visto personalmente. Hay un aura de un dios dragón dentro de ella, y pude sentir como me llamaba. No caben dudas de que hay algo especial en ella, así que es obvio que el Príncipe Heredero la está preparando por una razón específica.

—¿El aura de un dios dragón? —dijo la mujer—. Con razón el Príncipe Heredero le pidió a los Patriarcas Viento y Nube que la tomaran como aprendiz. He oído que sus artes energéticas han estado avanzando a pasos agigantados.

—Que alguien se nos una tan repentinamente sí que nos pone presión, —dijo el otro hombre—. Tenemos que seguir poniendo empeño en nuestro cultivo y ascender lo más pronto posible al nivel Legendario.

Dicho todo eso, el grupo finalmente se fue volando a lo lejos.

[i] Lei Tao: Lei es un apellido, que también significa "trueno, relámpago". Tao significa "ola".

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