Capítulo 181: Piedras Divinas Euforia.

Cuando la Hija Sagrada vio que Yang Qi estaba por gastar todos sus puntos de mérito en Piedras Divinas Euforia empezó a ponerse de nerviosa de inmediato.

—¿Por qué quieres Piedras Divinas Euforia Yang Qi? Están manchadas con energía aviesa del Infierno de Euforia, ¡son extremadamente inmundas! Ni siquiera la energía yang pura puede purificarlas. ¡Sin inútiles! Ni sirven como pisapapeles.

El Gran Anciano Logro-Virtud dejó salir un bufido. —Dice que quiere una, Hija Sagrada Muchasflores, ¿quién eres tú para entrometerte? Las Piedras Divinas Euforia son artefactos del pasado distante, y contienen un poder increíble. Los individuos ordinarios jamás se atreverían siquiera a poner sus manos sobre una. Por suerte, nuestro Instituto Semi-Inmortal enfrentó hace mucho las fuerzas del Infierno de Euforia, es la única manera en la que conseguimos un lote de ellas. Originalmente se usaban como cultivos de recursos para los dioses diabólicos más poderosos de la antigüedad, y son tan poderosas que ni un Legendario puede refinarlas. Son verdaderos tesoros.

El Gran Anciano Logro-Virtud parecía preocupado de que Yang Qi cambiara de opinión, así que movió la mano y una gran puerta resplandeciente apareció de la nada, dentro de la cual arrojó el medallón de identidad de Yang Qi.

Poco después, una intensa energía siniestra empezó a emanar de la puerta.

Luego Yang Qi pudo ver como el Gran Anciano Logro-Virtud sacaba cuidadosamente una piedra.

Era aproximadamente del tamaño de un puño, y estaba sellado con talismanes de papel que abundaban con energía honrada, y eran tan poderosos que era imposible saber qué tipo de persona los había creado. Como mínimo, tendría que haber sido ser un Legendario.

De hecho, esos "talismanes" tan poderosos parecían indicar que ninguna persona sola había sellado al piedra, sino un grupo de expertos trabajando juntos. Esa era la única manera en la que pudieron haber contenido la energía siniestra del a piedra.

En lo profundo del la Piedra Divina Euforia había algo que parecía una diminuta masa de carne y sangre retorciéndose. Como si la piedra laguna vez hubiera existido en las profundidades de un infierno antiguo, como parte del cuerpo de algún monstruo feroz.

Yang Qi también podía sentir que esa energía siniestra estaba repleta con una abundante fuerza vital, como si un diablo embrionario acechara en lo profundo del a piedra. Por supuesto, ningún individuo normal podría absorber esa fuerza; si lo hacían, se transformarían en un diablo siniestro o algún otro ser. Quizás hasta terminaría poseído y convertido en monstruo.

—Esta es la Piedra Divina Euforia más grande y poderosa de nuestra colección. Se dice que la piedra una vez fue empapada por la sangre de un dios diabólico del infierno. En la antigüedad, los mayores expertos del Instituto Semi-Inmortal encabezaron una campaña en una dimensión alterna, y allí la adquirieron. Nueve equipos de nueve grandes ancianos Legendarios trabajaron juntos para sellarla. Solo debido a tu gran cantidad de puntos de mérito se te permite tenerla.

El rostro del Gran Anciano Logro-Virtud mostraba una sonrisa siniestra. —De verdad te estoy beneficiando aquí. Por cierto, la energía siniestra de la piedra ha estado carcomiendo lentamente el sello. Ten cuidado, o podrías terminar convertido en un monstruo. —Repentinamente empezó a reír y le arrojó la piedra y el medallón de identidad a Yang Qi.

Yang Qi acababa de gastar todos sus puntos de mérito en lo que parecía ser una piedra inútil.

—Estás llevando las cosas demasiado lejos Gran Anciano Logro-Virtud! —dijo la Hija Sagrada Muchasflores claramente furiosa. De hecho, parecía que hasta podría comenzar una pelea.

—Qué. Puede que seas una genio, Hija Sagrada Muchasflores, una Legendario a los cuarenta o lo que sea. Pero no te tengo miedo. Si sigues causando problemas no me quedará más opción que ponerte en tu lugar! ¡Tus payasadas no pertenecen al Salón de Logros y Virtud! Quizás puedas vencerme dentro de cien años, pero ahora no eres rival para mí. Retrocede antes de quedar en ridículo.

—¡Muy bien! ¿Quieres ver de lo que soy capaz! —Por sus ojos pasó un destello y se preparó para atacar—. ¡La Hija Sagrada Muchasflores no le teme a nadie!

—Olvídalo Sénior, —dijo Yang Qi—. Solo está siguiendo los deseos del Príncipe Heredero, y es demasiado poderoso. Solo vámonos. Si seguimos causando problemas aquí, la Salón de Logros y Virtud aparecerá luego para usarlo contra nosotros. Tenemos que ahorrar nuestra fuerza para cuando de verdad importe. Además, nada de lo que hagamos aquí nos ayudará. Es obvio que el Príncipe Heredero controla el Salón de Logros y Virtud.

—Muy bien, —dijo la Hija Sagrada Muchasflores, sorprendida por dentro por lo tranquilo que se veía Yang Qi—. Pero no dejaré las cosas así. Le reportaré el asunto al rector. Aún no se ha retirado, ¡y el Príncipe Heredero no ha tomado su posición!

Dicho eso, se volteó y se fue del Salón de Logros y Virtud.

Yang Qi se dirigió a Li He y los demás y dijo, —Vámonos hermanos. No desperdicien sus puntos de méritos aquí. —Yang Qi sabía que debido a todo esto, ahora sus hermanos jurados pasarían dificultades. La única manera de que recibiera un trato justo sería que lograra derrotar al Príncipe Heredero.

—¡Vámonos! —Entonces todos salieron orgullosamente del Salón de Logros y Virtud sin molestarse en siquiera mirar atrás.

El Gran Anciano Logro-Virtud los miró salir. Sonrió fríamente y dijo, —Perros inútiles. ¿Aún creen que pueden desafiar al Príncipe Heredero? No es más que una arrogancia absurda. Todo el Instituto Semi-Inmortal le pertenecerá tarde o temprano. Una vez que termine de matar a ese monstruo, el Joven Maestro Velo Celestial, Yang Qi y sus amigos estarán más que muertos.

En algún momento desconocido, otra persona había llegado al Salón de Logros y Virtud.

—Estoy sorprendido, —dijo esta persona. Llevaba un abanico lujoso, y se veía como un príncipe del mundo mortal. Pero su aura era la de alguien capaz de luchar a los mismísimos Cielos.

—¿¡Maestro Hidalgo de Viento!? —dijo el Gran Anciano Logro-Virtud claramente sorprendido—. ¿¡Líder de la Sociedad de Hidalgos!?

En efecto, este hombre era el líder de la segunda sociedad más grande del Instituto Semi-Inmortal, la Sociedad de Hidalgos. Era un neófito sagrado increíblemente conocido. Aparte del Príncipe Heredero, pocas personas eran capaces de igualarle. Su padre había sido un miembro influyente del consejo de ancianos supremos durante muchos años.

Yang Qi había crecido en un área remota, cultural y económicamente carente, pero el Maestro Hidalgo de Viento era lo contrario. Había crecido con un apoyo substancial constante.

Los ancianos supremos eran Legendarios Imperecederos, todos con esperanzas de llegar eventualmente a ser Grandes Sabios.

Si el Príncipe Heredero fallaba en su ascenso, terminaría viéndose limitado por ellos.

—Sorprendente Gran Anciano Logro-Virtud, —dijo el Maestro Hidalgo de Viento mientras se abanicaba—, Le hiciste gastar todos sus puntos de mérito en una inútil Piedra Divina Euforia. Qué gran ganancia.

El Maestro Hidalgo de Viento bloqueó todo el Salón de Logros y Virtud sin advertencia alguna, ya nadie más podría entrar.

—¿Qué se supone que sea esto Maestro Hidalgo de Viento? Las Piedras Divinas Euforia son objetos raros y maravillosos, incluso en la antigüedad.

—Claro, claro, claro. Objetos raros y maravillosos de la antigüedad. Pero nadie puede usarlos. Son básicamente diablos embrionarios. Además, un grupo de Legendario tuvo que esforzarse por mucho tiempo para sellar la energía siniestra de esa cosa. No se podría ni imaginar lo espantoso que sería si se rompiera el sello. —El Maestro Hidalgo de Viento se abanicaba tranquilamente y siguió analizando en detalle. Estaba claro que había escuchado todo. —Te libraste de un problema en potencia, y ayudaste al Príncipe Heredero. Dos pájaros de un tiro, ¿cierto? Sea cual sea el milagro que se consiguió el pueblerino de Yang Qi, no hay manera de que entienda lo aterradora que es la Piedra Divina Euforia. Como dije, sorprendente.

—¿A qué quieres llegar Maestro Hidalgo de Viento? ¿Te vas a meter en el asunto? Yang Qi fue el que dijo que quería la Piedra Divina Euforia. ¿Y qué si ayudo al Príncipe Heredero? ¿Lo desafiarás?

—¿El Príncipe Heredero? ¿Crees que me puede hacer nada? No es ninguna amenaza hasta que se convierta en Gran Sabio. —El Maestro Hidalgo de Viento repentinamente desató un aura que hizo temblar al Gran Anciano Logro-Virtud. Después de todo, este no era rival para él.

—¿Qué haces? —dijo—. ¡Este es el Salón de Logros y Virtud! No puedes causar problemas aquí.

—Si el Príncipe Heredero puede causar problemas, ¿¡por qué yo no puedo!? —sonrió el Maestro Hidalgo de Viento—. Ya rompió las reglas en la competencia de artes marciales, y hasta se robó la recompensa. El resto de los neófito sagrado no están contentos con sus violaciones descaradas. Las personas tienen que respetar las reglas o ser aplastadas por ellas. Déjame decirte algo. La Sociedad de Hidalgos. la Sociedad de Habilidad Divina y la Sociedad de los Cinco Relámpagos tenemos treinta neófitos sagrados en conjunto. Y hemos estado en contacto con los neófitos sagrados de otros institutos. Pronto nos reuniremos para decidir qué hacer con el Príncipe Heredero. Es demasiado ambicioso, y si le dejamos hacerse más fuerte, me temo que todos seremos asimilados en su Sociedad del Príncipe Heredero. Por lo que he venido hoy para darte una última advertencia amistosa. Ven conmigo. Únete a nuestra reunión. ¡O espera a ser asesinado!

—¿Qué! —el Gran Anciano Logro-Virtud repentinamente se encontró entre la espada y la pared—. Eh, uhm... pero Yang Qi...

—El Príncipe Heredero lo está mirando como un halcón. Así que podemos usarlo de carnada. Morirá de cualquier modo. La pregunta es, dentro de cuánto tiempo.

El Gran Anciano Logro-Virtud no estaba seguro de cómo salir de la situación, —Eh, tengo que pensarlo un poco y...

—¿Pensarlo? Lo lamento, eso no será posible. Me darás tu respuesta en lo tarda en quemarse un palillo de incienso. Y esperaré justo aquí. O vienes conmigo a la reunión, o te conviertes en enemigo de todo el que esté presente. Si eso sucede, haremos todo en nuestro poder para verte muerto.

El Maestro Hidalgo de Viento ondeó su mano y un incienso apareció.

Mientras el Maestro Hidalgo de Viento hablaba con el Gran Anciano Logro-Virtud, Yang Qi y sus cuatro hermanos jurados estaban afuera del Instituto Semi-Inmortal en unas montañas distantes.

—Hermano, ¿por qué nos has traído? —le preguntó Li He

Yang Qi empezó a reír. —Ese idiota del Gran Anciano Logro-Virtud de verdad me dio la Piedra Divina Euforia. Para mí, es más valiosa que el Portal del Gran Vacío! Ah, Príncipe Heredero, has cometido un gran error aquí. En realidad me has dado acceso a energía que se origina de un verdadero infierno, la sangre de un dios diabólico, y una verdadera manifestación del Infierno de Euforia.

Entonces sacó la Piedra Divina Euforia y esta empezó a pulsar con una voluntad diabólica que manchó el cielo de negro.

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