Han pasado ya cinco años desde que renací y se me ha dado un nuevo nombre, ahora me llamo Alexander. En todo este tiempo no he detenido nunca mi entrenamiento, actualmente ya tengo diez marcas de la técnica del dragón milenario y cuando alguien alcanza las primeros cincuenta marcas es capaz de duplicar su poder base en cambio si logras las cien marcas tu poder actual se triplica. Con solo diez apenas puede elevar mi nivel de pelea un poco más de lo que ya tengo pero me puede servir mucho en caso de emergencias. También recalcar que soy un mago principiante de rango diez, estoy a un paso de ser un mago de nivel novato.
Parece que las coordenadas que elegí para reencarnar también fueron las correctas, el continente de Roxario es uno de los más grandes ubicado en el centro del mundo y elegí aparecer en este lugar porque es neutral hacia los doce grandes clanes que controlan este mundo. En este lugar puedo entrenar, demostrar mis grandes habilidades sin correr el riesgo de que quieran reclutarme para mantenerme vigilado. Yo soy un hombre libre, no seré atado a ningún poder y mi objetivo es explorar el mundo libremente sin preocupaciones ya que seguro en mil años que estuve ausente muchas cosas deben haber cambiado.
Estoy viviendo en un orfanato que es dirigido por la santa iglesia, es una de las instituciones más viejas y se nota que no tuvo grandes remodelaciones. Estamos en un barrio bastante pobre, parece que les cuesta bastante el conseguir dinero para mantenerse. La señora Martha es la persona que me trajo hasta aquí ella es la directora y máxima autoridad. Siempre ha venido a verme, la considero como mi madre y la quiero mucho.
Hace un año sorprendí a todo el mundo aprendiendo a leer a los cuatro años y estuve constantemente en la biblioteca por lo cual muchos otros niños me han ignorado o estuvieron apodándome como el abuelo del salón. No puedo enojarme con chicos que hasta hace poco estaban mojando la cama, no tengo tiempo que perder como para andar jugando con ellos, necesito volverme lo más fuerte posible rápidamente así seré libre de ir donde quiera por lo tanto estuve estudiando toda la historia que paso mientras no estaba y cuanto había cambiado todo.
Estoy reunido con todos los chicos de mi edad, hoy es el gran día en el que un profesor y marido de Martha el señor John nos enseñaría sobre la magia. No es algo que necesite pero todavía no le he contado a nadie que ya se utilizarla, sería demasiado escandaloso ya bastante impacto han tenido con mi inteligencia y encima hablo como si fuera un adulto usando palabras complejas. El tipo que nos dará lecciones es un pelado bastante grande de cuerpo y que impone respeto. Por lo que detecto su nivel es de mago Avanzado, nada mal para alguien que vive en un lugar tan terrible como este pero se queda muy chico con los grandes genios del mundo.
"Bueno niños les explicare las cosas más básicas que tienen que saber cuándo se trata sobre la magia, primero como sabrán en este mundo hay doce grandes clanes cada uno especializándose en los doce tipos de magias existentes hasta la fecha. Ellas son la de agua, fuego, tierra, viento, oscuridad, luz, natural, física, psíquica, invocación, alquimia y eléctrica. A su vez la capacidad de los magos se dividen en diez niveles estas son: principiante, novato, medio, avanzado, maestro, gran maestro, experto, supremo, legendario y divino. También entre estos niveles son separados por diez rangos antes de alcanzar el nivel que sigue por ejemplo yo actualmente soy un mago de nivel avanzado de rango cinco, me faltarían otros seis rangos más antes de ser un mago de nivel maestro"
"Ahora sé que les he dado demasiado información de golpe, no podrán memorizarla pero eso no es lo importante. Lo que les daré ahora es una técnica de respiración, el primer paso importante es sentir todo el mana que se encuentra en la naturaleza en especial el aire el cual siempre es la forma de energía más pura. Todo esto servirá para que puedan abrir su centro de mana que se encuentra en el interior de cada uno, con esto abierto serán capaces de usar cualquiera magia de cualquier tipo, pero siempre todos nacen con alguna especialidad haciéndote más fuerte usando un cierto tipo de magia por sobre las demás. Un ejemplo claro soy yo que desde que empecé a practicar se me dio más fácil usar la de fuego. Si son demasiados suertudos talvez en un futuro puedan llamar la atención de algunos de los grandes clanes para que les entrenen, aunque dije que cada uno se especializa en magias distintas no significan que no acepten otros que tengan más además de esa. De hecho los más grandes genios de la humanidad han podida utilizar todas casi al mismo nivel"
Después de haber explicado todo bastante bien nos pasó una técnica de respiración súper básica, que siempre enseñan a todo el mundo para que en un mes veamos quienes son los primeros en conseguir usar magia. Por eso veo que todos están muy entusiasmados, algo que obviamente a mí no me interesa en lo más mínimo.
Un mes después estábamos esperando a John en una salita, el profesor nos reunió a todos y cada niño se fue presentando mostrando sus resultados: Aunque la primera mitad lo intento no pudieron hacer nada ya que sus centros de mana todavía no estaban el cien por ciento abiertos.
"Mi nombre es Paul, la magia que domino es la de fuego igual que la del profe. Todos observen y siéntanse inferiores a mi"
Acto seguido mostro una gran flama que salió de uno de sus dedos, se apagó al cabo de unos segundos. Su control es malo todavía pero para ser tan chico, mostrar un tamaño de flama tan grande si sigue entrenando diligentemente será muy poderoso en el futuro. Después de su turno, otros dos fueron capaces de usar magia un chico y una chica que eran hermanos mellizos ambos usaban magia de tierra y de luz respectivamente. Pero no llamaron tanto la atención como Paul, apenas se vio que tenían algo.
Finalmente solo quedo yo para mostrar mis cualidades, aunque muchos ni siquiera están interesados por mí.
"Oye cerebrito más te vale que no nos hagas perder el tiempo, di que no sabes hacer nada así podemos seguir con la clase nunca te vimos meditar en ningún momento y solo te la pasas leyendo esos libros inútiles"
Luego de mirar a Paul que me insulta de esa forma, lo único que hago es sonreírle mientras camino al frente de todos con los ojos cerrados llevando con mis dos brazos una piedra bastante grande que se encontraba en el parque donde los niños juegan.
"Mi nombre es Alexander, la magia que puedo utilizar es la del tipo físico. Pondré esta piedra en el piso y la romperé de un solo puñetazo para demostrárselos"
"Espera un momento Alexander todavía te falta mucho para hacer eso, traeremos algo más suave como una pequeña madera"
El profesor quiso detenerme diciéndome algo bastante razonable, si hubiera sido un joven común como todos los aquí presentes diría que tiene la razón pero se equivoca conmigo. Todos solo me miran con cara de compasión, sacudiendo las cabezas como diciendo que solo quiero lucirme para hacer quedar mal al mejor de todos que era Paul actualmente.
"No necesita preocuparse, solo quédese quietecito y vean quien es el verdadero genio aquí"
Antes de que todos pudieran hacer algo concentro todo mi mana sobre mi brazo derecho que parece como si se iluminara de un color verde, golpeo hacia abajo destruyendo la piedra sin dejar ningún solo escombro además de que hago una pequeña grieta en el suelo del salón.
Por cierto nunca vi la mandíbula del profesor abriéndose tanto, incluso por un momento parece como si hubiera tocado el suelo de la impresión que se llevó y era acompañado por los gritos de sorpresa de los demás niños de fondo.
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