Capítulo 136: Detrás de escena.

Aurora aplaudió a los estudiantes que salían cansados de la arena.

“¡Felicidades!” Dijeron Aurora y Cithrel al unísono mientras que esta última lanzaba una magia de recuperación al grupo.

Clémentine, Leslie, Nicole y Dalia se mostraban cansadas y entre todas ellas Alice, era la única que estaba totalmente relajada. 

“Eso fue agotador. No pensé que fuera tan difícil luchar con un espadachín.” Murmuró Clémentine exhausta.

Los otros se tiraron a los sofás de la sala de descanso.

Este era el primer combate grupal de la semana y ahora se podía decir que ya estaban en las finales.

Hoy se habían enfrentado a dos Rango A, y mientras Alice se encargaba de uno, Clémentine tuvo que encargarse de un espadachín que con su aura de espada la hizo sufrir.

En cuanto al otro era un psiónico que recientemente había ascendido y solo pudo enfrentarse a Alice, hasta ser derrotado.

Los demás también tuvieron sus rivales que los hizo agotarse.

Las batallas grupales habían empezado con veinte equipos, y antes del combate del grupo de Clémentine solo quedaban cinco.

Técnicamente, tras los enfrentamientos quedarían tres equipos, ya que uno pasaría a la siguiente ronda.

No obstante, como ese grupo tenía únicamente rangos B y llegaron de ese modo decidieron retirarse.

Así que dependiendo de quien ganara el otro combate sería su oponente para la final.

En los dos equipos restantes había dos rangos A en cada equipo y si bien destacaba que en uno de ellos estuviera Marc, el combate iba a estar parejo.

Hubiera sido otro asunto si otro rango A se involucraba, lamentablemente los estudiantes de ese rango priorizaban los combates individuales. 

“Los próximos combates serán demasiado agotadores.” Murmuró Nicole y respirando hondo, exclamó. “Me esforzaré para llegar lo más alto posible.”

Una exclamación que trataba de animarse a ella misma y que provocó algunas sonrisas.

“Ese es un gran espíritu de batalla.” Dijo Dalia y rascándose su mejilla, agregó. “Yo creo que el próximo combate será mi límite.”

En las batallas grupales Dalia era enviada a que luchara duramente contra otros oponentes magos de su rango, logrando que adquiriera experiencia.

Sin embargo, era difícil decir si podía ganar o no cuando se enfrentaban a enemigos complicados como los luchadores o espadachines.

Si esos tipos se acercaban a un mago eran un gran dolor.

“¡Entonces debemos seguir entrenando!” Exclamó Nicole recuperando todo su espíritu de batalla.

Ellas dos eran las únicas del grupo que todavía permanecían entre los participantes del Rango B y si bien también había algunos estudiantes de primer año, en este grupo, únicamente estaban ellas dos.

Érica no pudo inscribirse y Leslie fue derrotada.

Así que ellas tenían que esforzarse para hacerse un lugar entre los cincuenta combatientes que quedaban en los combates de individuales de rango B.

“Les ayudaré a entrenar.” Dijo Cithrel que estaba presente y notando que la mirada de Érica también se dirigía a ella, añadió. “También puedes unirte.”

“¡Gracias!” Respondió Érica con una voz elevada.

Cithrel era una gran experta y conocedora de la magia no solo al nivel práctico a la hora de lanzar hechizos, sino que también en conocimiento teórico y aprender algo de tal mago siempre era valioso.

“¿Quieres unirte? Debe ser difícil enfrentarse a enemigos de Rango A individualmente.” Invitó Cithrel.

“Si, me gustaría unirme. Aunque mis oponentes no son tan difíciles.” Respondió Clémentine y mirando a Alice, murmuró. “He tenido mucha suerte esta vez.”

Ella no estaba bromeando.

Era cierto que los estudiantes de Rango A tenían una mayor experiencia y habilidad, pero había algunos individuos a los que Clémentine podía derrotar.

En ese sentido a ella, le toco oponentes a los cuales podía enfrentarse y tenía una gran posibilidad de victoria.

En definitiva, no se enfrentaba a Alice… Eso era lo más importante para ella y nadie la juzgo.

“Bueno, el próximo combate de Alice será interesante.” Murmuró Leslie por su parte.

Alice se enfrentaría con el espadachín que dirigió al grupo de asaltantes en la prueba del inicio de la academia.

Gregorio Bellucci, un rango A con altas posibilidades para coronarse campeón.

Él junto a Oliver y Niels eran los objetivos prioritarios para ser campeones o estar entre los primeros.

Uno ya fue eliminado por Alice y ahora se acercaba el combate.

Todo el grupo estaba animado por lo que sucedería.

“Mientras me paguen las bolsas de papitas que me prometieron, no me importa quién sea el oponente.” Respondió Alice comiendo sus papitas.

La expresión de Aurora tembló y no dijo nada.

Una mercenaria experta altamente reconocida en áfrica y temida por muchas personas en esas tierras distantes, ahora estaba enfrentándose a estudiantes por unas bolsas de papitas.

Estaba segura de que sorprendería a muchas personas si la llegaban a descubrir.

Agitando su cabeza sutilmente, Aurora miró la hora y notó que ya estaba por empezar la clase de historia mágica.

“¿Van o se quedan a descansar?” Preguntó Aurora con curiosidad señalando la hora.

La academia y los profesores fueron muy permisivos con aquellos que participaban en el torneo, dándole la posibilidad de faltar a algunas clases para centrarse en el torneo.

Si bien siempre se los incentivaba a que participaran en la clase, si terminaban un combate y estaban cansados o ellos eran los siguientes para empezar uno, los profesores fueron permisivos.

“Quiero entrenar un poco más.” Respondió Nicole dando una media sonrisa.

Clémentine ya era un Rango A y Leslie había demostrado una fuerza aterradora con su nuevo equipo, tenía que admitir que se sentía presionada para mejorar.

Tal vez no tenía una gran rivalidad, pero su deseo de hacerse fuerte y estar a la par de sus compañeras era honesto.

Solo si era fuerte podía proteger a sus compañeros.

“Entonces, me quedaré.” Comentó Cithrel con una sonrisa.

“Yo también…” Murmuró Dalia y a su lado Érica también asintió.

“Yo tengo que prepararme para mi combate.” Dijo Clémentine con una media sonrisa.

Al final los únicos que quedaron fueron Leslie, Alice y Aurora que se dirigieron a las aulas.

“Salir de unas vacaciones y luego tener que entrenar eso si es agotador.” Murmuró Leslie cuando estaban caminando.

“Tú también te estás preparando para robarte un puesto.” Señaló Aurora con una sonrisa.

La había visto entrenando duramente y aunque trataba de hacerlo en privado para que nadie descubriera su carta oculta, era evidente que se estaba esforzando.

“Hago lo mejor que puedo.” Respondió Leslie un poco avergonzada.

Aurora dio una sonrisa ante esa respuesta tan humilde.

Cada uno de los estudiantes estaba trabajando duro y esforzándose para entrenar.

Un objetivo era muy importante para el avance y el desarrollo personal y cada uno de los estudiantes lo estaba aprovechando por completo. 

Cuando llegaron a la clase, no tuvieron que esperar demasiado a que la Profesora Forde llegara.

“Oh, el torneo estaba tomando mucho tiempo de los estudiantes.” Murmuró la Profesora Forde al ver que la clase estaba media vacía.

Si bien el torneo se había centrado en el combate, por lo que Aurora sabia también otros estudiantes tenían su propia participación en el torneo internacional.

Los estudiantes de alquimia, estudiantes de artesanía o los estudiantes de informática ya no se trataba solo de ayudar, sino que ellos tenían su propio ‘torneo’ dentro del torneo internacional.

Eso significaba que los estudiantes de las diferentes disciplinas competerían con otras academias que tenían disciplinas similares.

Dándole aún más variedad al torneo internacional.

“Bien, a causa del bajo número de estudiantes dejaremos los exámenes de lado durante este año.” Anunció la Profesora Forde y antes de que los estudiantes pudieran festejar, agregó. “Pero todos me tendrán que dar un informe detallado sobre un tema de historia mágica.”

A Aurora no le importo las segundas palabras, y festejo no tener que estudiar para un examen.

Estaba acostumbrada a realizar informes y era común como líder de su grupo mercenario reunir información u organizarla para las misiones, así que no iba a ser demasiado problemático.

Estar en la academia protegiendo a Cithrel para ella eran unas vacaciones pagas y quería aprovecharlas.

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El Director Vincent revisó unos mensajes en su reloj holográfico y luego respondió a cada uno de ellos.

“Perdón por dejarte esperando Edward. He estado ocupado respondiendo a las preguntas de tu notable informe.” Dijo el Director Vincent dejando de usar su reloj holográfico y mirando a su aprendiz, comentó. “Tu informe ha causado un revuelo en el ámbito académico. A pesar de que eres un mago de combate, muchos dicen que mereces el título de Archimago.”

En términos generales se le llamaba ‘Archimago’ a aquellos magos de Rango S que podían controlar los elementos o podían lanzar sus hechizos sin cántico como si utilizaran magia de forma natural.

A pesar de que algunas magias no tenían un ‘elemento’ como lo era magia de ilusión, magia de invocación, magia espiritual u otras magias, el concepto se seguía aplicando.

Ellos tenían que estudiar mucho para lograr captar las teorías por las cuales se realizaban los hechizos y al final eran como los Archimagos elementales que podían lanzar los hechizos con total naturalidad.

Sin embargo, algunos magos altamente reconocidos solo aceptaban el título de ‘Archimago’ a aquellos que realizaban una investigación digna.

Eso significa que aceptaban aquel que estudiaba la magia, mejoraba o creaba un nuevo hechizo.

Lo que ellos remarcaban era que un mago de combate necesitaba estudiar y aprender no solo luchar.

Después de todo, a pesar de que los Archimagos controlaban los elementos, al final cuando atacaban siempre replicaban un hechizo de alguna u otra manera.

“Solo fue gracias al informe de Aurora y su información, maestro.” Respondió Edward con un tono humilde.

El Director Vincent lo miró un momento y al final no dijo demasiado.

“Por cierto, ¿cómo va el torneo?” Preguntó el Director Vincent cambiando de tema.

“La semana todavía está comenzando, pero ya estamos realizando varios enfrentamientos. Lo que queremos es que este jueves o viernes más tardar se tenga los campeones, para luego revelar los puestos y que puedan ser desafiados.” Respondió Edward con una expresión seria.

Los combates individuales de Rango B eran lo que tenían un mayor número de participantes.

Lo que se buscaba era que ellos fueran reducidos y pasaran las siguientes rondas para que al final, se revelara el campeón en esta semana.

Los combates de Rango A eran parecidos, pero estaban más distribuidos entre los días, ya que ahora quedaban diez participantes.

Aun así, también deseaba que fueran decididos en esta semana.

Dejando por último a los combates grupales que sería lo mismo, pero como tenía un menor número estaban bien distribuidos para que pudieran entretener a los espectadores durante la semana.

Edward explicó todos los detalles proyectándole el combate de Clémentine que se estaba llevando a cabo en este momento. 

“Eso es agradable de ver.” Murmuró el Director Vincent asintiendo suavemente ante la destreza de esa psiónica.

No solo se trataba de habilidad y fuerza general, lo que Clémentine estaba demostrando era una actitud muy seria cuando se enfrentaba a su enemigo.

Si le dijeran que estaba llevando a cabo una misión importante, el Director Vincent lo creería.

No atacaba a matar o algo por el estilo, sino que se trataba solo de la actitud al mirar el torneo.

“Escuche que el Profesor Miller ha estado bastante sorprendido por la fuerza de los estudiantes que fueron al grupo mercenario de Aurora y Alice.” Dijo el Director Vincent y mirando a su estudiante, murmuró. “Me pregunto qué hacen para cambiarlos de tal forma.”

La expresión de Edward tembló por un momento y al final respondió. “Les muestran la realidad.”

Con esa respuesta no dio más explicaciones y se quedó en silencio.

Por dentro el Director Vincent suspiró por su estudiante que le gustaba guardar todo y se detuvo de indagar.

“Alice ha estado derrotando a todos sus oponentes sin que ellos pudieran dar resistencia. Su falta de seriedad al ganar le ha ganado popularidad en la red de la academia.” Dijo el Director Vincent dando una media sonrisa y mirando a su estudiante, preguntó. “Es increíble que siga siendo una mercenaria de Rango A, ¿no lo crees?”

Alice oficialmente fue registrada hace unos años y fue clasificada como Rango A y desde ese momento no había vuelto a actualizar su rango.

Las misiones que aparecían oficialmente en el gremio de mercenario también eran escasas e incluso si se investigaba un poco más.

Al final para obtener más información se debía poner en contacto con una red de información de áfrica o hablar con las autoridades de Zerzura.

El Director Vincent no hizo ninguna de los dos.

Sin embargo, podía entender que, con el talento y capacidad de Alice, seguramente ahora estaría a un nivel sorprendente.

“Ella dirá que es un Rango A no importa quién lo pregunte.” Respondió Edward rascándose la mejilla sin saber cómo reaccionar.

A pesar de que tenía más información su aprendiz se quedó en silencio guardándola.

Suspirando por la lealtad de su estudiante por esas jovencitas, Vincent agitó la cabeza.

“No importa. Que las autoridades responsables del torneo internacional se hagan cargo de esas cosas.” Dijo el Director Vincent sin darle demasiada importancia.

Aunque estaba dejando de lado el asunto, tirándole al trabajo a otro en realidad no era como si pudiera hacer algo.

No podía ver la fuerza de Alice y tampoco podía ver la verdadera capacidad de Aurora a pesar de que había notado algunos rasgos de un espadachín en ella.

Ellas se ocultaban muy bien y eran expertos en ese ámbito, nada nuevo cuando ellas ocultaban completamente su información personal.

“¿El torneo internacional está preparado?” Preguntó Edward con curiosidad.

“Si, el Emperador Víctor le ha dado bastante importancia. Este es un evento para poner a su nación ante los ojos del mundo y es un evento importante para nosotros.” Reveló el Director Vincent en un tono honesto.

Aceptó el torneo a pesar de que le molestaba este tipo de ‘evento’, ya que era beneficioso conociendo lo que estaba por venir.

Los portales abismales eran un problema que lo hizo sentir tenso incluso a él.

Pasar de una mente maestra y un conflicto que terminó con un resultado inesperado e inexplicable a los portales abismales, lo hizo sentir tenso.

“¿Eso es verdad?” Preguntó Edward inseguro y al ver que su maestro lo miraba, agregó. “Las noticias de tensiones entre las dos naciones del continente americano todavía sigue siendo el principal foco de atención. Y más por la participación del mismo Emperador contra los carteles de drogas.”

El Director Vincent asintió ante esas palabras.

Los carteles de drogas y las mafias eran organizaciones que trataban de sobrevivir luego del Gran Cataclismo.

En su momento lo lograron gracias a los gobiernos corruptos de América del sur y en algunos casos tomaron el control, no obstante, todo cambió cuando el Emperador de Sudamérica apareció.

El conflicto del que todo el mundo hablaba venía de que el Emperador traspasaba las fronteras generando conflictos diplomáticos, pero la verdad era…

“Todo esto es un movimiento político. América del norte necesita perder el foco de atención sobre los portales abismales para calmar a las naciones que se han unido recientemente. Mientras que Víctor quiere demostrar que el pilar de Sudamérica sigue igual de fuerte que antes y no importa que suceda, él estará para su gente.” Reveló el Director Vincent y mirando a su estudiante, aclaró. “Aunque no lo creas, detrás de escena muchas personas actúan para que el pánico no se extienda y muchas cosas suceden.”

Cambiar el foco de atención de los portales abismales a una tensión política era lo más común entre los gobernantes y poderosos.

Tal vez tenían sus propias razones, pero en cierto sentido disminuía el pánico general sobre los portales abismales y su llegada.

“Entonces, ¿el torneo internacional es igual?” Murmuró Edward captando algo de las palabras de su maestro.

El Director Vincent dio una sonrisa, sin responder a ese murmullo.