Capítulo 45 – No es justo

Contrario al estado de júbilo de la familia Ye, Du Yuan Ming, Zhou Wu y Dong Ho se sentían inquietos y temerosos.

El patriarca Du miraba perniciosamente al campamento Ye. Estuvo tan cerca de deshacerse de ellos, y en esto momento estaban a punto de huir como si nada hubiera ocurrido. No había manera de describir la sensación de ser detenido a un solo paso de erradicar una amenaza, especialmente cuando volverían más fuertes, ¡y protegidos por alguien como el maestro Yi!

La mayor parte de los jóvenes Ye se había despertado para este momento. No prestaban mucha atención a la condición de Ye Zhong, ya que era el que había soportado más heridas. Era razonable que fuera el último en despertarse.

El maestro Yi se sentía aliviado desde el momento en que supo que Ye Wei estaba bien, pero todavía sentía curiosidad de por qué Ye Zhong no se movía. Frunció el ceño y entrecerró sus ojos. Un destello dorado apareció en sus ojos para luego mover su mirada penetrante hacia Ye Zhong, comprobando la condición de su cuerpo y flujo de Qi.

Miró fijamente al cuerpo inerte por 10 segundos, mostrándose preocupado y acongojado.

“Este chico tenía talento, es una lástima…”, rompió el silencio después de una evaluación minuciosa. Movió su cabeza de lado a lado con resentimiento y entonces, un largo y triste suspiro le siguió.

El nombre de Ye Zhong fue la primera cosa que salió de los labios de Ye Wei después de despertar. El maestro Yi podía notar de sus observaciones que los primos ocupaban un gran espacio en el corazón el otro. Debido a eso, haría cualquier cosa dentro de sus habilidades para revivir al primo de su aprendiz del coma en que se encontraba.

Pero, tristemente, ese no era el caso. Sin la ayuda de la Hoja Welkin, ¡Ye Zhong podría nunca ver nuevamente la luz del sol debido a su Sentient despedazado!

Poner sus manos en esta hierba sería el primer paso. Podría despertarlo, sí, pero las probabilidades de la recuperación completa de su Sentient era de menos del 10 %.

El corazón de Ye Wei se entristeció al oír el suspiro del Maestro; preguntó ansiosamente: “maestro Yi, ¿está bien mi primo?”, nerviosamente apretó sus puños mientras esperaba la respuesta de su maestro.

“¿Por qué no está despertando?”, preguntó Ye Hai.

La familia empezaba a preocuparse después de oír el largo suspiro. Al ser un Guerrero cinco estrellas a la edad de 22, Ye Zhong estaba en buen camino de sobrepasar el cultivo de Ye Zheng Qing, y era el mejor candidato para la posición de patriarca.

“El Sentient de este chico está despedazado; no se despertará por el resto de su vida”. El maestro Yi no inventó ninguna historia, no sabía cómo.

Las palabras del Maestro golpearon a los Ye como una bola de rayos que hizo que escalofríos recorrieran sus espaldas. El patriarca y Ye Hai quedaron pasmados y casi se cayeron.

“¿Pero a qué se refiere? ¡¿La Llovizna Verde no lo salvó?!”, Ye Hai no podía aceptar que su hijo, el joven más fuerte, y el futuro de la familia Ye se encontrara en estado vegetativo.

“¿Sentient despedazado?”, la voz del maestro Yi hacía eco en la cabeza de Ye Wei. “¿No se despertará por el resto de su vida?”, estaba estupefacto, parado como un ser sin alma.

[Lo hizo por mí… Estaba peleando una batalla imposible de ganar contra el general por mí…]

Con un sentimiento de culpa sin fin alguno apuñalando su corazón, Ye Wei tenía un dolor de pecho severo. Apenas y podía respirar.

“¿Hay alguna otra forma?”, el rostro de Ye Wei mostraba determinación, pero su voz temblorosa decía lo contrario. Apretó sus puños, levantó su vista hacia el maestro Yi, “haré lo que sea por la recuperación de mi primo, incluso si es necesario que atraviese el mismo Infierno”.

Inspirado por la terquedad de Ye Wei, el maestro Yi halló la respuesta a su pregunta: “si, un gran si… Si puedo tener posesión de algunas hojas Welkin debería ser capaz de hacerle recobrar la consciencia con una postura extravagante. Pero esa planta es muy rara. Con ella, ¡ya veré qué puedo hacer!”

“¡Gracias, Maestro!”, el humor de Ye Wei se enfrió un poco. [Si el Maestro no puede hallarla, yo lo haré], dirigió una inclinación de cabeza nuevamente hacia el maestro Yi.

Du Yuan Ming, Zhou Wu y Dong Ho sabían que estaban en problemas ya que eran los responsables de cada una de las heridas de Ye Zhong. Trataron de huir sigilosamente de la escena mientras los Ye empezaban a hablan del joven que se encontraba en estado vegetativo.

“¿Dónde creen que van?”, gruñó el maestro Yi, su sigilo no podía esconderse de su mirada fría.

“Maestro Yi…” Los tres temblaban de miedo. No podrían escapar de esta situación peleando, ni por separado ni juntos.

“Han habido ciertos malentendidos entre nuestra familia y los Ye, pero ahora me doy cuenta que nos pasamos de la raya debido a  nuestra impulsividad, y debido a ello nos disculpamos. No hicimos nada malo, ¡por favor, déjenos ir!”, dijo Du Yuan Ming con una voz temblorosa mientras hablaba cada vez más bajo tratando de excusarse, tanto a él y su familia. Inclusive dejó de lado su orgullo como patriarca enfrente del maestro Yi.

Lo que Du Yuan Ming dijo hizo que los ojos de Ye Wei se abrieran. [¡Ustedes hicieron todo esto! Ustedes avergonzaron e hirieron nuestra familia, ¿y se atreve a decir que solo fue un malentendido? Si el Maestro no hace las cosas de la manera justa, ¡yo mismo vengaré a mi familia cuando sea lo suficientemente fuerte!]

El maestro Yi vio la mirada de odio de Ye Wei, y eso solo confirmó las fechorías de la familia Du. Sin pensarlo más, empezó a mover su mano derecha. Una larga hilera de runas voló de la punta de sus dedos, y una ola de Qi apareció rompiéndose como una alta ola alcanzando la costa.

La Palmada Dorada de Arhat era una de las poderosas creaciones del maestro Yi. Para la mayor parte de la gente, era un honor ver esta postura dos veces en un día, pero no para estos tres.

Conociendo su poder, Du Yuan Ming rápidamente usó la postura Tortuga de Ónix. Energía primordial cruda se pegó a su cuerpo formando una gruesa armadura negra que cubría cada centímetro de piel.

Zhou Wu rugió como un león y rápidamente terminó su secuencia de runas, Bloqueo Primordial. Las runas en su palma crecieron alrededor de ellas mismas; eventualmente, escarbaron y agitaron el suelo, formando un robusto muro de Qi que permanecía alto frente a él.

“¡Ataúd Glacial!”, gruñó Dong Ho. Su gordura se agitaba mientras canalizaba el Qi. Cuatro placas de hielo denso se congelaron alrededor de su cuerpo, formando un gran ataúd, brillando azuladamente y pareciendo impenetrable.

No iban a contraatacar para evitar enojar aún más al hombre más poderoso de esta esquina de tierra, por lo que optaron por defenderse de la mejor manera que pudieron.

El maestro Yi gruñó y continuó canalizando su despiadado ataque. La palmas doradas aterrizaron de manera viciosa en la defensa de los tres.

Tan pronto las palmas golpearon, la armadura de Du Yuan Ming se desquebrajó; el muro de Zhou Wu se desintegró; y el hielo de Dong Ho se quebró.

Dong Ho era el que fue más duramente golpeado ya que su defensa era completamente irrelevante, solo fue necesaria una palma dorada para sacarlo fuera del panorama. Salió volando y cayó a 20 metros del punto de impacto. Gritó en el suelo de dolor cuando no estaba vomitando sangre.

Nos le fue mejor ni al general ni al patriarca a pesar que sus defensas eran más sólidas gracias a su cultivo. Las palmas fueron ralentizadas, pero todavía dejaron marcas en sus cuerpos y dañaron sus meridianos, lo que provocó que el flujo de Qi fuera obstruido en sus sistemas, causando un dolor insoportable.

El karma llega, muchas veces más pronto de lo que las personas esperan. Había pasado mucho tiempo desde que ellos temieran a la muerte.

El maestro Yi miraba fijamente hacia abajo, hacia el patriarca Du, y fríamente dijo: “No creo que haya lugar para la familia Du en esta ciudad”. Su voz afilada petrificó a los miembros de la familia Du, y ellos estaban al tanto que el Maestro Rúnico podía aplastarlos a todos como hormigas.

“¡Saludos, maestro Yi! Yo no soy uno de ellos, ¡soy de la familia Lu en la Ciudad Ning! ¡Por favor, no hiera a un civil!”, el adolescente de rostro duro también estaba asustado; él no creyó que las cosas saldrían mal con los Du.

[Hummm, tiene bastante talento, es incluso mejor que el chico en coma, pero nada comparado con Ye Wei. ¡Además, suena como un vándalo dos caras!], el maestro Yi lo miró con su vista penetrante y pensó. “¿Qué haces aquí entonces? ¡Vete al carajo!”, movió rápida e intensamente su manga hacia el joven Lu.

El talento y gestos del adolescente no lo salvarían hoy. El golpe invisible del maestro Yi lo azotaron más rápido de lo que podía pestañear, y no tuvo tiempo de usar una postura defensiva. Todo lo que pudo hacer era levantar sus brazos, los cuales se rompieron como ramitas por la onda de presión.

Voló como una roca pequeña rebotando en la superficie de un lago; después de rebotar en la tierra unas cuantas veces, fue detenido por el muro lateral de la arena. Sangró de su boca y permaneció inmóvil en la tierra doblado como una marioneta de cuerda enrollada.

Apenas consciente, decidió pretender estar muerto y tuvo la esperanza que alguien de su familia lo salvaría cuando la situación se calmara.

El extraño temperamento del maestro Yi horrorizaba a todos en la escena, los Ye incluidos. Ahora eran sus amigos, pero tendrían que comportarse lo mejor posible si es que iban a mantener contacto con esta bomba impredecible.

En un momento estaba sonriendo, al siguiente estaba rompiendo huesos como si nada. Al ver la furia del maestro Yi se tenía una sensación más vívida que temer a la Muerte.

Del silencio vino una voz. “Maestro Yi, ¡esto no es justo!”, Du Yuan Ming estaba de rodillas, tomando lo que quizá se convertiría en su última oportunidad de decir lo que estaba pensando.