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OFT - Capítulo 1209
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Capítulo 1209: Sin título

Traductor: Crowli

Capítulo 1209: Sin título

Los ojos de Xu Qing se entrecerraron, pero su expresión no cambió en absoluto. En un abrir y cerrar de ojos, su cuerpo entró en la tercera forma de dios y se elevó la semiacabada cuarta forma de dios.

La sombra del Reloj Solar se distinguía débilmente.

El antiguo sol atado a su cuerpo también brilló en ese instante. Un poder aterrador surgió de él.

En ese momento, la Espada del Emperador en el cielo atacaba a la albóndiga negra que estaba a punto de descender de la grieta del Reino Divino.

La gran mano formada por el poder del Emperador Humano también se estaba disipando debido al poder del dios de la esfera negra.

La presión del Reino Divino se extendió por la Academia Imperial, provocando que la mayoría de los cultivadores presentes tosieran sangre. Sus mentes retumbaban y eran incapaces de moverse.

Podría decirse que la sincronización de Bai Xiaozhuo era muy precisa y su velocidad incomparablemente rápida. Ahora que aparecía frente a Xu Qing, era como si una montaña celestial lo reprimiera. Los tentáculos de todo su cuerpo estaban potenciados por su fuerza de combate de Acumulación de Almas. Junto con su aterradora divinidad, formaban un golpe fatal.

Sin embargo, por muy preciso que fuera el momento, por muy rápido que fuera su ataque, era imposible matar a Xu Qing aquí.

En realidad, Bai Xiaozhuo lo sabía. De ahí que hubiera otra razón para esta escena aparentemente fatal.

Quería ver quién salvaría a Xu Qing.

¿Dividiría el Gran Emperador su atención para salvar a Xu Qing?

O tal vez, como había mencionado su maestro, podría haber una tercera fuerza oculta en la Ciudad Imperial, o incluso alguna otra presencia.

En resumen, Bai Xiaozhuo pensó que al menos podría atraer a algunas de estas fuerzas con su ataque para que su maestro pudiera obtener más información.

El juicio de Bai Xiaozhuo era correcto y la verdad era así. En el instante en que Bai Xiaozhuo se acercó a Xu Qing, la expresión del rostro del Gran Emperador en el Planeta Antiguo Soberano reveló repentinamente agudeza.

En la Torre del Olvido del Mundo Mortal, en el santuario de la sala ancestral, el zorro de arcilla emitía una luz demoníaca.

Al mismo tiempo, entre los estudiantes que rodeaban la plataforma Dao de la Academia Imperial, no todos estaban desprovistos de movilidad. Había un estudiante cuyos ojos revelaban un brillo frío y estaba a punto de dar un paso adelante.

Sin embargo, había una facción a la que le importaba la vida y la muerte de Xu Qing más que a nadie. Pasara lo que pasara, no permitirían que mataran así a Xu Qing.

De ahí que se movieran más rápido que los demás.

En el instante en que Bai Xiaozhuo se acercó a Xu Qing, unos rugidos furiosos se extendieron en todas direcciones como un trueno.

"¡Quietos!"

"¡Retirada!"

"¡Colapsad!"

"¡Débil!"

"¡Fortalece!"

"¡Acelerar!"

"¡Indestructibilidad!"

Cada palabra contenía la intención del Gran Dao, y era como el sonido del Dao Celestial. Las leyes y reglas de su interior circularon hasta el extremo y se convirtieron en el más alto nivel de la ley.

En cuanto se pronunció la palabra "congelar", incluso Bai Xiaozhuo, que tenía la fuerza de combate de un cultivador de Acumulación de Almas, sintió que todo su cuerpo temblaba violentamente. Fue detenido forzosamente durante un momento. Cuando sonó la palabra "retirada", su cuerpo retrocedió un paso.

Cuando resonó la palabra "colapso", todo el cuerpo de Bai Xiaozhuo retumbó y mostró signos de colapso.

Sin embargo, su divinidad surgió con fuerza en ese momento. Aunque se vio afectado, su ímpetu se convirtió en un dedo ilusorio que continuó presionando a Xu Qing. Por donde pasara, el vacío se haría añicos y todo se derrumbaría. La intención de exterminio era intensa.

Sin embargo, sólo duró un instante. En un abrir y cerrar de ojos, la palabra "debilitar" la redujo a la mitad.

Inmediatamente después, la palabra "fortificar" actuó sobre el cuerpo de Xu Qing, transformándolo en una armadura protectora incomparablemente robusta que le ayudó a resistir el poder del dedo de Bai Xiaozhuo.

Unos sonidos retumbantes resonaron cuando la armadura se derrumbó. La palabra "velocidad" potenció la velocidad de Xu Qing, haciendo que su velocidad de retirada aumentara explosivamente. En un instante, retrocedió tres mil metros.

La última palabra, "indestructibilidad", contenía realmente divinidad y tenía la intención de la indestructibilidad de un dios. Envolvió todo el cuerpo de Xu Qing y formó una luz dorada que se transformó en un rostro solemne frente a él, soportando la última fuerza que quedaba del dedo de Bai Xiaozhuo.

Desde lejos, después de que el dedo de Bai Xiaozhuo lo destruyera todo, chocó sin piedad contra la frente del rostro.

Al instante siguiente, la cara se derrumbó y sonaron miles de lamentos. Sin embargo, el dedo de Bai Xiaozhuo no pudo continuar y se disipó.

En el aire, Xu Qing permanecía indemne...

Esta escena provocó en las diversas fuerzas una intensa sensación de sorpresa. Lo sorprendente no era que Xu Qing estuviera bien, sino que la persona que había atacado...

"¡Xu Qing es el Hijo Divino de nuestra secta!"

Una voz suave sonó desde el vacío frente a Xu Qing. Al instante siguiente, se abrió una grieta en el vacío. A través de la grieta, se podía ver que había un altar en su interior.

Este altar parecía estar en una cueva celestial. En la entrada de la cueva, se podía ver el cielo y la cara fragmentada colgando en lo alto del cielo. El altar era inmenso y tenía un total de 999 escalones. En el punto más alto había un cultivador vestido con una túnica negra.

En cada escalón inferior había numerosas figuras vestidas con túnicas negras, e incluso en las profundidades del abismo bajo el altar podían verse más figuras vestidas de negro meditando con las piernas cruzadas.

Dentro había miles de personas, y el suelo ante ellas estaba manchado de sangre, lo que indicaba que habían tomado sobre sí la fuerza del dedo de Bai Xiaozhuo en lugar de Xu Qing.

Mientras resonaba esa frase, la figura de túnica negra que estaba de pie en el punto más alto del altar dio un paso adelante y cruzó directamente la grieta que apareció en el espacio de la Academia Imperial. Entró en la Academia Imperial y se situó frente a Xu Qing.

En cuanto apareció, el poder de la Acumulación de Almas brotó de su cuerpo. Su aura era poderosa, y de hecho desprendía un rastro del aura del rostro fragmentado.

La llegada de esta persona hizo que las expresiones de las distintas fuerzas cambiaran.

"¡Alto Sacerdote de las Palabras Verdaderas!"

¡La facción que había salvado a Xu Qing no era otra que la de las Palabras Verdaderas!

Esta escena hizo que Bai Xiaozhuo frunciera el ceño. Lo que quería atraer no era a ese grupo de lunáticos que parecían ir por el mismo camino que él, sino que en realidad sus ideales fundamentales eran completamente diferentes.

Los ojos del Emperador Humano en la proyección del palacio también se entrecerraron ligeramente. Podría haber actuado antes, pero prefirió esperar a ver quién venía a salvar a Xu Qing.

Por eso, en ese momento, su estado de ánimo era similar al de Bai Xiaozhuo y estaba aún más sorprendido.

Justo cuando todos se sentían conmocionados, el Sumo Sacerdote de las Palabras Verdaderas, que había aparecido frente a Xu Qing, levantó la cabeza. Dentro de la túnica negra que ocultaba su rostro, sólo se veían un par de ojos rojos que miraban a Bai Xiaozhuo.

"¡Hijo Divino, no te muevas!"

Tras decir esto, la figura de túnica negra giró la cabeza y miró a Xu Qing. La luz roja de sus ojos emitía codicia y sonó un trago.

"Hijo Divino, llego tarde. ¿Estás herido?"

"Si estás herido, afectará al sabor debido a que se mezclarán otras auras, y no sabrá bien".

Mientras hablaba, el sonido de su trago se hizo aún más intenso. Un sonido similar provenía también de las innumerables figuras

negras en el altar de la grieta.

Todas ellas levantaron la cabeza y miraron ávidamente a Xu Qing a través de la grieta.

La doctrina de las Palabras Verdaderas consistía en encontrar personas que no murieran bajo la mirada del rostro fragmentado. Pensaban que tales personas habían sido bendecidas por el rostro fragmentado, y sólo ellas podían ser los Hijos Divinos de las Palabras Verdaderas.

Después de comer al Hijo Divino, estarían más cerca del dios.

Ésa había sido su práctica a lo largo de la historia. Los que más comían eran personas que habían sobrevivido una vez a la apertura de los ojos del rostro fragmentado. En cuanto a los que habían sobrevivido a la mirada dos veces, había rumores de que las Palabras Verdaderas de otras regiones los habían consumido, pero los seguidores de las Palabras Verdaderas de la raza humana no.

La expresión de Xu Qing era desagradable. No esperaba que quien apareciera fuera realmente las Palabras Verdaderas. Además, las palabras de la otra parte le hicieron darse cuenta inmediatamente de que, aunque entonces había descubierto las Palabras Verdaderas con su técnica divina, también habían descubierto algunas cosas sobre él.

De ahí que apareciera este grupo de lunáticos.

En ese momento, en el Reino Divino del cielo, la albóndiga negra lanzó un profundo rugido. Bajo la amenaza de la Espada del Emperador, no se atrevió a irrumpir por la fuerza. Era como si todas sus acciones anteriores no fueran más que una prueba.

Ahora que había sondeado la respuesta, optó por retirarse.

La grieta del Reino Divino dejó de expandirse. Lentamente empezó a encogerse y a volverse borrosa.

En cuanto a Bai Xiaozhuo, al ver que la situación no iba según su plan, levantó la cabeza y miró al Emperador Humano en el cielo.

El Emperador Humano también le miraba con calma, como si le dijera a la otra parte que seguía observando la exhibición.

En el momento en que sus miradas se encontraron, por alguna razón, las palabras que Xu Qing le había dicho entonces en el Condado de Fenghai aparecieron en la mente de Bai Xiaozhuo.

"No eres digno de seguir al Príncipe Heredero Verde Púrpura".

Bai Xiaozhuo cerró los ojos.

'Tiene razón porque yo... no soy puro'.

Cuando volvió a abrir los ojos, el aura de Bai Xiaozhuo era menos antigua y más viva. Sus ojos también se volvieron claros. Levantó la mano y golpeó despiadadamente el corazón de su pecho.

Con este golpe, su corazón, que procedía del Reino Divino, explotó instantáneamente. En medio de sonidos retumbantes y violentos, todo el poder de la fuente divina que contenía estalló al unísono.

Nada quedó atrás.

Su cuerpo también empezó a arder intensamente en ese momento.

Como una polilla volando hacia el fuego, mostró el último resplandor de su vida.

Esta erupción y ardor le llevaron a su cima en un instante. El aura de su cuerpo se elevó explosivamente y el poder de las sustancias anómalas se extendió sin cesar. La sensación de ser un dios se hizo cada vez más intensa.

Bajo la influencia de las sustancias anómalas, el cielo sobre él se desdibujó y aparecieron chispas en la bruma.

Era una flor formada por el fuego. Era... ¡la flor del destino celestial!

Al principio había una, pero muy pronto aparecieron dos, tres... En un abrir y cerrar de ojos, todo el cielo de la Academia Imperial se llenó de flores del destino celestial. Desde lejos, era como un enorme cuadro que se extendía entre el cielo y la tierra.

Eran interminables, todas formadas por llamas doradas que deslumbraban como un brocado tejido.

En cuanto a los chorros de fuego de las flores, cuando aterrizaban en el suelo, brotaban llamas. Sin embargo, ya no eran flores del destino celestial, sino lirios araña.

El color era rojo.

Sin fin... Pasó una suave brisa y surgieron capas de ondas en el mar de fuego de los lirios araña. Era como si alguien estuviera pulsando las antiguas cuerdas de la cítara, emitiendo el sonido de la reencarnación.

Arriba estaban las flores del destino celestial y abajo los lirios araña, formando un mar de chispas de color rojo dorado que no dejaban de florecer y estallar.

Había diferentes rituales para convertirse en un dios. En este momento, uno de ellos surgió en la Academia Imperial.

Una vez que estas llamas continuaban, ¡era equivalente a encender el fuego divino!

El cuerpo de Bai Xiaozhuo se volvía borroso y emergía como una forma diferente a cada momento que pasaba.

Su fuerza de combate también era cada vez más asombrosa en este mar de flores. Sin embargo, era una lástima que encender el fuego divino no fuera tan sencillo después de todo. La dificultad era demasiado grande.

El Hijo Divino de la Luna Roja había fracasado, y Bai Xiaozhuo... lo había iniciado a toda prisa. No había ninguna posibilidad de éxito.

Esto podía verse por el hecho de que ya había chispas que mostraban signos de extinguirse en el borde del mar de flores.

Sin embargo, pasara lo que pasara, en este momento, la fuerza de combate de Bai Xiaozhuo ya había llegado al límite de su vida.

Esta escena también provocó ondas en los corazones de todos los que estaban mirando.

Los ojos del Emperador Humano brillaron con resplandor, quizá debido al reflejo de las chispas.

Mientras esta luz brillaba, la voz de Bai Xiaozhuo era como los murmullos de un dios, resonando por toda la Ciudad Imperial.

"Con el mundo como un horno y todos los seres vivos como carbón, los fuegos duales de oro y rojo encienden el fuego divino. Emperador, por favor, observa".

En cuanto sonó la voz, Bai Xiaozhuo se movió, envolviendo las flores del destino celestial en el cielo, los lirios araña en la tierra, así como los fuegos dorado y rojo. Juntos, formaron un meteoro ardiente, que se dirigía hacia el Emperador.

A su alrededor, las nubes se agitaron, las flores del destino celestial y los lirios araña florecieron juntos, mientras los feroces fuegos dorados y rojos iluminaban el cielo, su luz brillando sobre miles de kilómetros.


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Capítulo 1210: Las flores florecen y caen

Traductor: Crowli

Capítulo 1210: Las flores florecen y caen

Eran como polillas a una llama.

Así era a los ojos de todos los espectadores.

El Emperador Humano era el único Gobernante de la raza humana en la actualidad. Aparte del Emperador Espada, era el experto más fuerte. Frente a él, independientemente de si se trataba de la Nihilidad o de la Acumulación de Almas, la diferencia no era tan significativa.

Aunque Bai Xiaozhuo había quemado el corazón del Reino Divino y su cuerpo de Fusión Divina a cambio del poder de las llamas que superaban a las chispas.

Sin embargo, al final, seguía sin poder alcanzar la indestructibilidad, ni podía encender realmente el fuego divino y convertirse en un dios.

Sin convertirse en un dios, le resultaba imposible enfrentarse al Gobernante.

Por lo tanto, el resultado de esta batalla ya estaba predeterminado.

Sin embargo, Bai Xiaozhuo se mantuvo firme, con claridad en los ojos y calma en el corazón, su velocidad aumentaba cada vez más.

Barrió los destinos celestiales y los lirios araña, llevando el mar de fuego rojo dorado mientras surcaba el cielo.

Aunque sólo se trataba de la proyección del Emperador Humano en el cielo de la Academia Imperial, parecía que para Bai Xiaozhuo en aquel momento la ilusión y la realidad eran lo mismo.

En un instante, su aura formó una luz deslumbrante.

Como una estrella fugaz que descendiera de los nueve cielos, se acercó rápidamente, rasgando el vacío, apareciendo ante el Emperador Humano. Sus manos se juntaron, fusionando las palmas, mientras formaba una espada con dos dedos.

Reunió todo el poder dentro y fuera de su cuerpo en la espada de dos dedos.

Incluía las llamas gemelas doradas y rojas de los alrededores, las flores del destino celestial y los lirios araña, así como su vida, su tiempo y todo lo que le rodeaba.

Más cerca del Emperador Humano.

Olas de calor se extendieron y el entorno ardió. El mundo se distorsionó, dando la sensación de que la proyección del palacio también estaba corroída por las llamas furiosas.

Los Reyes Celestiales bajo el Emperador Humano levantaron la cabeza y sus auras se extendieron. Justo cuando estaban a punto de salir, fueron detenidos por el Emperador Humano.

"Interesante".

El Emperador Humano habló con calma. Levantó la mano derecha y señaló suavemente con el dedo índice el mar de fuego y meteoritos que se precipitaban sobre él.

Su acción parecía muy ordinaria, como si no contuviera ningún poder de cultivo ni manifestara ningún poder.

Sin embargo, en el instante en que aterrizó y entró en contacto con la espada de Bai Xiaozhuo, el mundo retumbó, emitiendo una explosión ensordecedora.

¡Era como si incontables estrellas hubieran estallado al mismo tiempo!

Las fluctuaciones hicieron que la Academia Imperial se balanceara con tanta violencia que parecía que iba a derrumbarse.

La atronadora explosión provocó un repentino cambio en el clima. El cielo se oscureció al instante, con nubes oscuras agitándose y truenos resonando. Una indescriptible sensación de terror se extendió en todas direcciones.

En cuanto a la fuente de todo aquel terrorífico poder, los cuerpos del Emperador Humano y de Bai Xiaozhuo no cambiaron en absoluto.

Sólo la esquina de la túnica imperial se balanceó ligeramente, y unos mechones de pelo se agitaron hacia atrás como si los soplara una brisa.

Eso era todo.

En cuanto a Bai Xiaozhuo, su cuerpo temblaba violentamente. Su cuerpo, ya borroso, era como los dientes de león que se alejaban, desapareciendo gradualmente.

Sin embargo, sus ojos seguían siendo muy brillantes. Miró fijamente al Emperador Humano que estaba a unos centímetros de distancia y murmuró.

"Entre el destino y los lirios, las llamas de dios".

Las flores del destino celestial que le rodeaban volvieron a florecer al instante. Cuando llegaron a su límite, se marchitaron y se convirtieron en cenizas que se juntaron delante de Bai Xiaozhuo.

Lo mismo ocurrió con los lirios araña. Brillaban intensamente hasta que se convirtieron en cenizas.

También estaba el mar de fuego rojo dorado que se agitaba y se acumulaba en los alrededores. Al final, surgió frente a Bai Xiaozhuo y no quedó nada fuera.

Bajo estas convergencias, una flor mística que fusionaba las características del destino celestial y los lirios araña floreció frente a Bai Xiaozhuo.

Esta flor ardía intensamente.

Su aparición atrajo la atención del Emperador Humano.

Inmediatamente después, Bai Xiaozhuo dejó escapar un suave suspiro.

Exhaló y sopló sobre la flor mística. La flor flotó y sus pétalos rodearon al Emperador Humano, como si estuvieran a punto de formar una nueva flor con él como núcleo.

Un destello oscuro apareció en los ojos del Emperador Humano mientras hablaba con calma.

"Desaparece".

Al oír sus palabras, todos los pétalos que le rodeaban temblaron y se derrumbaron, convirtiéndose en innumerables fragmentos que, al final, se convirtieron en cenizas en el viento.

En cuanto a Bai Xiaozhuo, parecía haber completado todas sus misiones y cerró los ojos.

Su cuerpo... se disipó completamente en humo, convirtiéndose en incontables fragmentos de espejo que contenían recuerdos. Se hicieron añicos, se disiparon y se convirtieron en cenizas.

Como si no quisiera que las sucias cenizas le mancharan, en el momento en que el Emperador Humano retiró el dedo, agitó ligeramente la manga.

En un instante, las cenizas que poco a poco se habían vuelto indistintas frente a él se dispersaron en todas direcciones, sin dejar rastro.

Un profundo suspiro sonó desde la grieta en el cielo que procedía del Reino Divino. Después de eso, la marca en el cielo empezó a curarse, y parecía que todo había llegado a su fin.

Bai Xiaozhuo era el Gobernador original del Condado de Fenghai que había seguido al Príncipe Heredero Verde Púrpura durante la era del Reino Verde Púrpura. Su historia había quedado enterrada en el paso del tiempo. Ahora, parecía que su vida también había vuelto al destino.

Desde el principio hasta el final, el Príncipe Heredero Verde Púrpura no apareció.

El cielo exterior ya no estaba oscuro, pues la persistente luz del sol poniente bañaba toda la ciudad con tonos dorados.

El rostro del Gran Emperador en el Planeta Antiguo Soberano observó la Academia Imperial con una mirada profunda. No se sabía si estaba mirando al Emperador Humano, a Xu Qing o... a una existencia que nadie percibía fuera de la brecha del Reino Divino.

El corazón de Xu Qing también se agitó. Mirando la brecha en el cielo, pensó en las escenas del Condado de Fenghai. Antes de venir a la Ciudad Imperial, no esperaba ver aquí a Bai Xiaozhuo y a Verde Púrpura.

"Bai Xiaozhuo es el primero".

"¡El  Cuervo es el segundo!" murmuró Xu Qing para sus adentros.

En ese momento, los estudiantes de la academia seguían sumidos en el tumulto, con emociones que iban de la excitación a la complejidad, de la aprensión a la confusión. Por sus mentes corrían pensamientos diversos, que variaban de una persona a otra.

La discusión sobre el Dao de la Academia Imperial terminaba aquí.

El Emperador Humano volvió a sentarse lentamente en la silla del dragón y la proyección de todo el palacio se difuminó gradualmente.

La Espada del Emperador también regresó y se fusionó con el cuerpo de Xu Qing.

Tras la muerte de Bai Xiaozhuo, sus marionetas perdieron vitalidad y cayeron al suelo.

Al ver que todo había terminado de verdad, el Director tenía una expresión apenada. Estaba a punto de anunciar el final de la discusión sobre el Dao.

Sin embargo, en ese momento, Xu Qing sintió de repente intensas emociones procedentes de la sombra.

"¡Maestro... come... alma del tiempo... escapa!"

Al oírlo, Xu Qing levantó la cabeza al instante. Sus ojos estaban negros como el carbón cuando el poder de la Restricción del Veneno entró en erupción, formando su ojo divino. Sin embargo, todo era normal en su visión.

El cielo era normal, la grieta en el cielo era normal, y todo en los alrededores era normal.

La sombra había seguido a Xu Qing durante muchos años y, naturalmente, sabía qué hacer. Por eso, se fusionó instantáneamente con el cuerpo de Xu Qing y se reunió fuera de sus ojos, aumentándolos como unas gafas.

Junto con el poder de la fuente divina y la habilidad de la sombra, en ese momento apareció en los ojos de Xu Qing una escena que poca gente veía.

Aunque todavía estaba un poco nebulosa y no era muy clara, Xu Qing se dio cuenta de que... en la grieta que estaba a punto de desaparecer por completo del cielo, una brizna de alma se fundía en ella.

Para ser precisos, podría no tratarse de un alma, sino de una parte del tiempo, y parecía ceniza.

Esta alma era especial. Si no fuera por la pequeña sombra que se fijaba en ella, Xu Qing no habría podido verla en absoluto.

Era la época de Bai Xiaozhuo, que había sido arrebatada por el Príncipe Heredero Verde Púrpura en aquel entonces.

"El último movimiento de la manga del Emperador Humano parecía dispersar las cenizas. Sin embargo, por lo que parece ahora, ¡su acción es sospechosa!"

Los ojos de Xu Qing revelaron de repente agudeza. Sin embargo, sabía que no era el momento de pensar en las acciones del Emperador Humano.

Por eso, sin vacilar, la forma de dios que había fuera del cuerpo de Xu Qing se dispersó, transformándose en más de 1,3 millones de hilos de alma que se dirigieron instantáneamente hacia el cielo.

"¡Vuelve aquí!"

Una voz fría salió de la boca de Xu Qing. Sus hilos de alma se elevaron hacia el cielo y llegaron al borde de la grieta en un abrir y cerrar de ojos, envolviendo la brizna de alma del tiempo.

La Pequeña Sombra también se extendió rápidamente.

Si era Bai Xiaozhuo el de antes, aunque Sombrita quería comérselo, no se atrevía a acercarse, pues sabía que no tenía poder para devorarlo.

También era este sentimiento de deseo lo que le había estado torturando, y por eso había estado observando a Bai Xiaozhuo desde el principio. El impulso de su corazón había seguido creciendo a medida que avanzaba la batalla.

En este momento, podía sentir claramente que esta alma del tiempo ya no era peligrosa.

En cuanto al sabor, sintió que sería aún más fragante que antes.

Era como si el alma hubiera experimentado muchas calamidades y hubiera refinado todas las impurezas, dejando sólo la esencia original.

También se correspondía con el dicho de que el mundo era un horno y todos los seres vivos eran carbón.

Se utilizaba para forjar y volver a la simplicidad.

Esta esencia de origen podía reencarnarse en un humano o... bajo un entorno específico, reencarnarse en un dios natural.

Por eso, en ese momento, Sombrita estaba loca de deseo.

Su saliva se esparció en todas direcciones y, junto con el millón de hilos de alma de Xu Qing, se extendió instantáneamente por el cielo, agarrando ferozmente el alma del tiempo...

Esta escena atrajo la atención de todos los miembros de la Academia Imperial y de las distintas fuerzas. Todos quedaron sorprendidos.

Desde la proyección disipadora del palacio, el Emperador Humano también miró hacia allí.

En ese momento, bajo el control de Xu Qing, el millón de hilos de alma se movieron rápidamente en el cielo, tejiéndose en una enorme jaula.

Esta jaula era asombrosa, sellando todas las direcciones.

Sombrita se esforzó aún más y no escatimó esfuerzos para adherirse a los rastros formados por la grieta en el cielo y utilizó su cuerpo para bloquearlos e impedir que la comida escapara.

Después de hacer esto, aumentó la frialdad en los ojos de Xu Qing. Levantó la mano derecha y la apretó despiadadamente hacia el cielo.

Inmediatamente, la jaula de hilos del alma se encogió, formando una esfera negra del tamaño de la palma de la mano que se dirigió directamente hacia el cielo.

que se dirigió directamente hacia Xu Qing y aterrizó en su mano.

Xu Qing la agarró y ni siquiera la miró. Tampoco dio al alma ninguna oportunidad de transmitir sus pensamientos. Sus cinco dedos ejercieron fuerza y volvieron a apretar.

Con un estruendo, el millón de hilos de alma que se habían condensado en una bola devoraron el alma del tiempo con locura.

Sombrita entró en pánico y se unió rápidamente. Tras dar unos mordiscos, quiso continuar, pero su velocidad de devoración era claramente inferior a la de los hilos de alma.

En un abrir y cerrar de ojos, el alma del tiempo se disipó por completo.

El alimento formado por el poder que contenía era asombroso. Xu Qing podía sentir claramente que los hilos de su alma se dividían y sufrían una transformación bajo la influencia de la esencia fuente.

1.400.000, 1.600.000, 1.800.000... Al instante siguiente, al explotar la esfera del alma, 2.000.000 de hilos de alma cubrieron el cielo y la tierra.

En cuanto a Xu Qing, se encontraba bajo los 2 millones de hilos de alma. Su larga cabellera y sus ropas ondeaban al viento, parecía un dios o un demonio, con un aura capaz de devorar el mundo.

¡El cuerpo y el alma de Bai Xiaozhuo estaban destruidos!

El Emperador Humano miró a Xu Qing. La proyección del palacio desapareció por completo.

Al mismo tiempo, en la Torre de Recogida de Estrellas de la Capital Imperial, el Preceptor del Estado que había estado mirando fijamente a la Academia Imperial cerró los ojos.


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